Media hora más tarde iba rumbo a mi entrevista con la esperanza de conseguir el empleo y con el recuerdo de aquel hombre, no podia dejar de pensar en el y eso me ponía triste. Llegué a un edificio con unas letras plateadas enormes que decían “Torre azul”. Sonreí al ver aquel nombre tan ostentoso para un edificio de 5 pisos. Lo curioso es que estaba conectado a otro edificio del mismo tamaño por un hermoso puente de cristal en el 3 piso, creo que ambos pertenecían a la misma empresa pero no estaba segura. Al entrar a la "Torre azul", la recepcionista me miró con sus grandes ojos verdes y me escaneo de arriba abajo. Creo que mi pantalon de vestir, mi camisa de seda y mi cola de caballo no eran de su agrado, pero después de tantas entrevistas, me sorprendí a mi misma que aún me vea presentable.
—Bienvenida a la Torre Azul, ¿En que puedo ayudarte?— me regalo una sonrisa fingida.
—Soy Mila y tengo una entrevista con Rafael Green sobre el puesto de Editora.
—permítame un minuto para avisarle al licenciado Green, si gusta tomar asiento— me señalo una sala que estaba justo al lado de la recepción.
—gracias– me acomode en uno de los sillones.
La chica tomó el teléfono e hizo una llamada, no podia negar que era muy guapa, se veía espectacular montada en esa minifalda negra y blusa de seda gris. Tal vez sea un requisito aqui, ser guapa y elegante. Mire mi ropa y me sentí algo insegura, ya iba un poco desalineada y tenia algo de sudor, pero después de caminar varias cuadras era obvio que no iba a llegar 100% presentable. Abri mi bolso y saque un espejo, retoque mi maquillaje y una vez mas acomode mi cabello, regrese el espejo a la bolsa y saque mi perfume de bolsillo y me puse un poco, no queria dar una mala imagen.
—puedes pasar, es el último piso— la voz de la chica me tomo por sorpresa, guarde mis cosas en la bolsa y le sonreí.
—gracias.
Me levanté del sillón, camine rumbo al ascensor y toque el botón, 1 minuto después ya estaban las puertas del ascensor frente a mi, subí en el y oprimí el último piso, nunca me ponía nerviosa en las entrevistas, pero hoy era la excepción, tenía que conseguir el empleo porque ya no me quedarían muchas opciones. Salí del elevador y camine hacia la oficina que decía licenciado Green, di unos pequeños golpecitos y después escuché la voz de un hombre que decía “pase”.
Entre a la oficina y un hombre muy elegante me recibió de pie junto a un hermoso escritorio de madera fino, estiró su mano para saludarme y me dio los buenos días, indico que me sentara y cuando nos acomodamos abrió una carpeta donde tenia impreso mi curriculum.
—¿Tu debes de ser Mila verdad?
—si, un placer
—igualmente Mila, Es impresionante tu curriculum, ¿por qué dejaste de trabajar en petroleras Unión?— me miró a los ojos, asi hacian todos los que me entrevistaban, creo que me querian poner nerviosa, o tal vez era mi imaginación.
—tuve unas diferencias con el dueño, fueron asuntos personales— me encogi de hombros, la verdad no quería entrar en detalles, pero viendo la expresión del licenciado Green, creo que el si quería.
—podrías explicarlo– se puso derecho sobre su silla.
—Noel, el hijo del señor Johnson era mi prometido… yo— dude un poco –yo lo descubrí teniendo sexo con su secretaria en su oficina, así que..., rompí el compromiso y me fui de la compañía.
—lo siento mucho— parecía apenado –no quería hacerte recordar malos momentos, es solo que me gusta saber la verdad.
—esta bien no se preocupe, era un idiota— me quede helada al escucharme decir esas palabras delante del licenciado Green, se supone que queria dar buena impresión, pero siempre que recuerdo a Noel se me revuelve el estómago y se me salen todos los insultos del mundo sin pensar.

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Nos Pertenecemos
Romancedos familias separadas por el odio fundado por los abuelos de la familia harán hasta lo imposible para impedir que dos de sus integrantes se amen con libertad, podra el odio hacia un apellido evitar que Milla y Taylor se amen? 03/10/2024