Durante la madrugada, una serie de asesinatos golpea la ciudad, aterrorizando a todos. Malia Baker, decidida a ayudar a su padre en la búsqueda del criminal, se enfrenta no solo al miedo a la muerte, sino también al desafío de lidiar con su professo...
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- ¿Ya has decidido tus fantasías? - Ruby aparece en la puerta del baño, sosteniendo su cepillo de dientes.
La chica decidió a última hora que dormiría aquí, y yo no tuve más remedio que traerla. Pero no es que no me guste, simplemente me encanta cuando Ruby viene a dormir aquí.
- No, ni siquiera estoy pensando en eso últimamente - digo, mirando la pantalla del portátil mientras estoy tumbada boca abajo en mi cama. - pero pretendo usar algo espeluznante y por supuesto, sexy - vuelvo la cara hacia la rubia, con una sonrisa de lado, viendo a mi amiga reír y volver al baño.
- Estoy pensando que eres un poco diferente después de esa fiesta - ella habla en voz alta por estar en el baño.
Frunce el ceño, balanceando las piernas en el aire, mirando la puerta del baño, viendo su reflejo en el espejo.
- No soy diferente - digo, soltando un suspiro.
- Sé, creo que la profesora te tomó demasiado bien - se ríe, luego se enjuaga la boca.
No evito abrir mucho los ojos con su discurso, y rápidamente siento que mis mejillas se calientan.
Ruby había visto el momento exacto en que todo comenzó y no tuve más remedio que contar literalmente todo lo que le está pasando últimamente, especialmente las confusiones que me rodean.
- no exageres, Kylie ni siquiera es todo eso - me siento en la cama, cruzando las piernas como un indio, viendo a la rubia salir del baño con su pijama rosa.
- ¿Realmente no lo es? No la conoces muy bien - Ruby habla como si conociera a Kylie desde hace tiempo.
- Estoy seguro de que no lo es, ella es solo una mujer rencorosa y que se cree - digo, mirando las fotos de la mujer en la página web en la que abrí. - lo que no entra en mi cabeza es, ¿por qué una mujer tan poderosa y rica estaría enseñando en una escuela de mierda? - Miro hacia Ruby, que está sentada en mi tocador, cepillándose el pelo rubio.
- eso es realmente intrigante - Ruby me mira a través del espejo, compartiendo la misma mirada confusa.
- Necesito dejar de pensar en ella - resoplo, poniendo la almohada sobre mis piernas, luego colocando el cuaderno sobre ella.
- Parece que alguien está enamorando - miro a Ruby seria, no me gustan sus palabras.
- no hay pasión entre nosotras, Ruby - digo, volviendo a prestar atención a la biografía de Kylie Lorena Cantrall.
- Estoy hablando, Malia - escucho a mi amiga hablar, pero no quito los ojos de la pantalla. - te estás enamorando, y no sé si enamorarte de un gilipollas te traerá un final feliz - sus palabras me ponen tensa, y un suspiro se escapa de mis labios.
No es como si quisiera eso. No quiero de ninguna manera enamorarme de Cantrall, de tener que lidiar con sus confusiones y mentiras.
El silencio se instaló de nuevo en la habitación y volví a prestar atención a lo que había en la pantalla.
