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Suspiro, sentada en el banco de la pequeña plaza que está frente al campo

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Suspiro, sentada en el banco de la pequeña plaza que está frente al campo. Estoy un poco más tranquila, pero sus palabras siguen martillando en mi cabeza, los recuerdos siguen vivos en mi cabeza y todo parece tan sin rumbo.

No quería, pero creo que ha cambiado, y se está convirtiendo en una mejor persona, después de todo, han pasado cuatro años. Cuatro años son suficientes para que una persona entienda lo que sus actos de inmadurez causaron en las personas, es suficiente para perseguir a ser una mejor persona y tratar de corregir su error.

Sus pequeños actos a mi lado, mostrando ser alguien tan comprensible y amable tienen sentido ahora. Kylie se ha convertido en una persona fría y temida, dueña de un imperio que todos sueñan con dirigir, una asesina de élite que le quita la vida a los que se lo merecen, que corre el peligro de ser brutalmente asesinada en un momento de debilidad, pero aún así se mantiene firme, tratando de estar siempre al frente de todo y de todos. Y aunque no quiera admitirlo, ella siempre estuvo a mi lado, incluso antes de entrar en mi vida.

- ¿Mali? - levanto la cara, viendo a Joshua acercarse con pasos vacilantes.

- Hola - forzo una sonrisa, pasando las manos por la falda.

- Oye hermanita, ¿qué pasó? - se sienta a mi lado, poniendo su mano sobre la mía. - Estoy aquí para decir la verdad y escuchar - suelta una risa baja, balanceando mi pierna nerviosa.

- Es Kylie, debes saberlo - digo y lo veo moviendo la cabeza de acuerdo. - Tuve un sueño, un recuerdo, ¿sabes? Recordé un momento del pasado, donde tuve contacto con Kylie - suspiro, con los recuerdos vivos. - sentí todo de nuevo, todo dolor al escuchar sus crueles palabras - suspiro, mordiéndose el labio inferior.

- Me enteré - pasa su mano vaga por el pelo, mirando a su alrededor durante segundos. - ella se arrepiente, Mali - sus palabras suenan con calma, volviendo la cara hacia mí. - Vivo con ustedes dos desde hace mucho tiempo, y ahora que te acuerdas, tal vez sea el momento de decir todo lo que he escuchado durante años - giro mi cara, con curiosidad brillando en los ojos.

Joshua se volvió de lado, apoyando su mano sobre su pierna, respirando profundamente, mirando la entrada del campo.

- bueno, cuando Kylie fue enviada a Canadá, me enviaron conmigo, para estar siempre pendiente de ella. Sabes, Kylie era una chica a la que le encantaba meterse en problemas - suelta una risa sin humor. - durante todos los años que estuve con ella, el tema siempre fue tú. Ella estaba devastada en los primeros años, siempre inquieta y mirando sus cosas, era algo sorprendente. En su último año en Canadá, estaba tan cambiada, tan fría e incluso calculaba los pasos de todos los que la rodeaban.

Un suspiro se escapó de mis labios, mirando fijamente la entrada del gimnasio, viéndolo salir a pasos apresurados, moviendo su cabello y su teléfono al mismo tiempo.

- una noche, estábamos en el balcón de su apartamento, y ella había bebido un poco. Estuve allí todo el tiempo, y cuando tú nombre salió de su boca, las lágrimas que nunca pensé que ver corrieron por sus mejillas - dice tan tranquilo, mirando hacia la vista detrás de mí, como si estuviera viviendo eso de nuevo. - ella repitió tantas veces que se arrepintía tanto, y que nunca había entendido que toda esa confusión que tenía dentro era solo el amor que ella nutrió por ti. Realmente no podía soportar más escucharla hablar de ti. - Soltó una risa.

SUSURROS DE MEDIANOCHE - Kylia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora