Pregnant ➳ j.b

Capítulo 33

Y aquí estábamos, esperando los resultados de la dichosa prueba de paternidad. No había sido nada del otro mundo, fue como supuse que sería o más bien como investigue que sería.

—Señor Bieber.— llamo la secretaria con un sobre en su mano. Justin se levanto y fue hacía donde ella, intercambiaron unas palabras, él asintió y volvió hacía mi.

—Vamos a donde el doctor para que lea los resultados.— asentí y me pare para seguirlo hasta el consultorio del doctor. Entramos y él estaba allí escribiendo algo en un papel. Alzo la mirada al vernos.

No sabía el por qué, pero me sentía nerviosa. Seguramente era la presión del momento.

—Doctor, el señor Bieber viene por la prueba de paternidad.— le dijo la secretaria al doctor y le entrego el sobre.

—Puede retirarse.— la secretaria asintió y salió cerrando la puerta detrás de ella.— Tomen asiento.

—Gracias.

—A ver, señor y señora Bieber.— dijo abriendo el sobre una vez que nos sentamos.

Señora Bieber.

Eso sonaba tan bien. Ninguno de los dos se inmuto a decir algo, por lo que él continuo.

—Bien.— saco unos papeles y comenzó a leerlos en voz baja. Unos minutos después dejo los papeles en la mesa y hablo.

—¿Y?— preguntó Justin claramente ansioso por una respuesta.

—Bieber, según aquí...— comenzó a decir.— Es positivo. El niño es de usted.— solté un suspiro. Fue como si un peso más se fuera de mis hombros.

—¿Está seguro de ello?— cuestionó y él asintió.

—Si quiere puede comprobarlo usted mismo.— le entrego la hoja. Justin la miro por unos minutos y asintió. No llevaba ninguna expresión en el rostro.

—Bien. Gracias doctor.— le agradeció parándose y estrechando la mano con él, hice lo mismo.

—Es mi trabajo. Y suerte con esta nueva aventura.— le regale una sonrisa y asentí.

Si tan solo supiera lo que hay detrás de todo esto.

Minutos después ya estábamos en el auto. Justin no había dicho ni una sola palabra en todo el trayecto hasta aquí. Encendió el motor, pero no arranco.

—¿Ahora si me crees?— murmure rompiendo el silencio. Él asintió sin mucho interés.

—Las pruebas no mienten. ¿O sí?— lo fulmine con la mirada. ¿A este qué le pasaba ahora?

—No puedes dejar lo imbécil ni por un rato.

—Es de naturaleza. ¿Qué quieres?

—Joder Justin, solo trato de hacer las cosas bien contigo.— me queje.— No quiero más líos.— él soltó un suspiro claramente frustrado y se paso las manos por la cara.

—Lo lamento.— se disculpo y me sorprendí. Él no era de esas personas que solían disculparse por nada. Eso lo teníamos claro.— Es solo que debo procesar esto. Lo cambia todo. Ese niño es mío y por ello pongo muchas cosas en riesgo. No es tan fácil como crees Madison. Yo tengo una esposa e hijos, una familia. Es complicado. Necesito tiempo.

Esa era una de las cosas que a veces odiaba en él, solo era él y él. Yo también arriesgaba en todo esto y él al parecer no lo veía.

—Claro, tu familia perfecta.— solté sarcásticamente.

Si tan solo supieras querido Justin.

—¿Crees que es fácil para mí? Eres tan egoísta Justin, eres tú y solamente tú siempre...