Vidas entrelazadas

Capítulo 31

Lucas

Recorro el pasillo de la universidad, ajustando mi cazadora de cuero y observando a mi alrededor con atención. Espero ver a Emma antes de entrar a clases.

La jornada de ayer se repite en mi mente, provocando que mi corazón palpite con intensidad. Tenía miedo de confesar mis sentimientos y de que ella no me aceptara. Sé lo difícil que es para ella lidiar con todo esto, pero que haya decidido darme una oportunidad y salir conmigo me llena de una felicidad verdadera.

Siento una mano en mi hombro y me sobresalto. Relajo el semblante al ver a mi mejor amigo, que me mira con cautela.

—Estás perdido, hermano. ¿Qué ha sucedido? —me pregunta.

—Eso te pregunto yo a ti. Llevas días muy centrado en mi cuñada; se nota que van bien —respondo.

Él sonríe con un tono de complicidad, y realmente me alegro por Liam. Merece ser feliz, y Jess es una gran compañía para él.

—Vamos muy bien, sorprendentemente nos entendemos y nos sentimos cómodos el uno con el otro. Ahora, ¿qué ha pasado con Emma? —pregunta directamente, fijando su mirada en mí.

—Estamos saliendo —digo rápidamente.

—¿Qué has dicho? —me mira con una expresión de sorpresa.

—Emma y yo estamos saliendo. Ayer hablamos y le pedí que fuera mi novia.

—¿Aceptó así, sin más?

—Claro que no. Hablamos mucho y me dio una oportunidad. Es difícil para ella, pero también siente cosas por mí.

—Se les notaba en la mirada. Emma es una chica muy fuerte, aunque a veces se haga creer frágil. Cuídala mucho, Lucas —me aconseja.

—Lo haré, tranquilo. ¿Cuánto nos queda para entrar a clase?

—Justo ahora nos quedan cinco minutos y tenemos examen.

Me sobresalto al darme cuenta de que no he estudiado nada, apenas he revisado mis apuntes estos días.

—De cómo conquistar a una chica —dice después de unos segundos

—¡Que te jodan! —se ríe con fuerza.

Camino hacia clase, es mejor llegar antes y revisar mis apuntes para tener una idea de lo que nos espera.

Al llegar al salón, suspiro y me siento en una de las últimas filas. Algunos compañeros ya han llenado la mayoría de los asientos, todos esperando la llegada del profesor.

Estudiar arquitectura siempre me ha fascinado. Aunque mis padres influenciaron mi elección, puedo decir que es una de las pocas cosas que realmente me interesan. Me apasiona imaginar un día ver mi nombre en las grandes noticias sobre construcciones de empresas, casas y hoteles. Construir y crear para las personas es algo asombroso desde una perspectiva creativa.

Las asignaturas no son nada fáciles, especialmente cuando nos enseñan las técnicas y fundamentos. Aprender a colocar cada elemento donde corresponde y materializarlo se convierte en una tortura cuando estoy bloqueado. Pero espero con ansias las prácticas, donde podremos imaginar y luego crear; así habré vencido este año y pronto estaré graduándome.

Me pierdo en mis pensamientos hasta que soy consciente de que Liam se ha sentado a mi lado y que una notificación ha llegado a mi WhatsApp. Abro la aplicación con la esperanza de que sea Emma, pero en lugar de eso, es un mensaje de mi madre.

Mamá 8:45 
Llega temprano, tenemos que hablar.

Suspiro, mirando la pantalla de mi móvil.