Capítulo 17

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Toque el timbre de casa de Jimmy nerviosa y el salio a abrirnos. Yo estaba con Johnny y Brian, y nos estábamos juntando para hacer un trabajo y reírnos un rato juntos. 

- ¿Como estas Sullivan? - lo salude en la mejilla. Estaba tan guapo, su cabello estaba húmedo recién salido de la ducha y su perfume olía delicioso.
- Bien - sonrió - ¿y tu?
Me duele el corazón Jimmy, porque las cosas han cambiado. Porque quisiera que todo vuelva a ser como esa tarde que pasamos juntos, y tu me cuidabas.
- Genial.
Sonreí mientras entraba a la casa recordando esa tarde... había pasado mucho tiempo.
Matt me recibió alegre con un abrazo.
- ¡Hey! Cantante - me atrapo en sus brazos.
- ¿Como estas fortachón? - me reí.
Luego fui a tirarme sobre el guitarrista.
- ¡Zaaaacky! - me tire sobre el y me abrazo.
- ¿Como esta la mejor cantante de la universidad? - beso mi mejilla.
Me sentía mucho mejor ahora que estaba con ellos. Realmente los había extrañado, los necesitaba tanto, que tenia miedo de ponerme a llorar ahí mismo. Me relaje y me senté en la mesa con los chicos, luego entraron Brian, Johnny y Jimmy y todos se saludaron. Mire a mi alrededor, era una linda sala, una hermosa casa. Y estaba muy bien mantenida como para que Jimmy viva solo aquí. Sonreí al imaginarnos a el y a mi sentados en su enorme sofá mirando televisión juntos, pero luego disipe mi mente, recordándome que eso no iba a suceder dolorosamente.
Realmente tenia que olvidarlo. El no estaba interesado en mi de la forma en que yo lo estaba con el. Ademas de que ahora tengo "dueño" según los chicos, las cosas no mejoraban.
Jimmy trajo un paquete de galletas y comimos mientras resolvíamos las consignas de trabajo. Era un sábado a las diez de la mañana y habían pocas ganas de trabajar, sin embargo todos hacíamos nuestro mejor esfuerzo.
Luego de unas tres horas el trabajo estaba resuelto por la mitad, y las ganas de almorzar nos impedía continuar. Los chicos comenzaron a juntar dinero para ir a comprar pizzas, pero no aceptaron el mio.
- Olvidado niña - me dijo Brian devolviendome mi dinero - ¿qué clase de hombres crees que somos si te hacemos pagar?
- ¿Al menos los acompaño?
- No tu quédate aquí con Jimmy - dijo Matt y me guiño el ojo disimuladamente. Yo solo me puse nerviosa y maldecí a Matt en mi mente. Sabía lo incómodo que esto iba a ser, por mas que me moría por estar con él. La puerta se cerró y Jimmy y yo quedamos sentados uno frente a otro en la mesa, con un incómodo silencio.
- Así que... ¿Cómo te ha ido pequeña? - me dijo y lo miré tímida - ¿Sigues cantando? - bromeó.
Se notaba que el ambiente estaba tenso, por mas que intente bromear.
- Sabes que sí...- sonreí y le respondí irónica - ¿y tú? ¿todavía eres baterista de Avenged Sevenfold?
- Siempre - se rió.
No teníamos mucho por hablar así que Jimmy encendió el televisor y luego comenzó a buscar algo por la casa, dejándome sola en la sala y yo decidí seguir leyendo mis apuntes para adelantar un poco el trabajo. Los minutos pasaban y yo me sentía peor, me preguntaba por qué las cosas no podían volver a ser lo que eran antes.
- ¿Necesitas que te ayude? - apareció detrás de mi de repente, y me dijo cerca del oído, mirando mi trabajo. Grité. Su rostro estaba cerca del mio y mi corazón se aceleró del susto y de tenerlo cerca.
- ¡Me asustaste James! - dije nerviosa mirando fijamente mi trabajo y el se rió. Creo que a Jimmy le gustaba asustarme, como aquella vez en casa de Zacky, cuando apareció ebrio en la cocina, y me besó, como jamás nadie me había besado.
Se sentó a mi lado en la silla en que estaba sentado Matt.
Mi celular que estaba sobre la mesa sonó, había recibido un mensaje. Estaba por tomarlo pero Jimmy lo agarró antes que yo.
- Tienes un mensaje - me sonrió burlón - a ver... - se paró y me levanté para quitarle mi celular.
- Dámelo Jimmy - le supliqué.
- Lo siento - lo levantó muy alto donde yo no podía tomarlo - pero creo que ahora es mío.
Sonreí. Por un momento me permití olvidarme de todo. Solo eramos él y yo corriendo por su casa y riendo porque él no quería devolverme mi teléfono. Me tropecé y me caí de cara al suelo. Jimmy estalló de la risa y yo lo fulminé con la mirada, pero luego empezamos a reírnos..
- Ahora verás grandulón - le dije mientras me ayudaba a levantarme y camine hacia él arrinconándolo contra la pared. Estábamos cansados de tanto correr y respirábamos con dificultad.
- ¿Qué quiere usted de mí señorita? - dijo burlándose, alejando el celular de mí.
- Mi teléfono - le hice pucherito.
- No - se rió.
- Oh vamos - me reí yo también y salté para intentar tomarlo, pero el es demasiado alto y no pude alcanzarlo.
Puso sus manos detrás de su cintura y envolví mis brazos en él para intentar tomarlo.
Entonces tuve que contener mis impulsos de besar su linda boca cuando se acercó demasiado a mi rostro.
- ¿Que parte de "ahora es mio" no entiendes pequeña? - me dijo de una forma tan suave y seductora. Mi corazón volvía a latir desesperadamente. Nuestros rostros estaban tan cerca que casi podía sentir su respiración. Sentía que iba a desmayarme. El teléfono volvió a sonar y Jimmy se fué corriendo hacia el otro lado de la sala y entre risas, volví a correrlo.
Desde hace tiempo que no me sentía así. Solo él podía alegrarme de esa forma, como nadie podía hacerlo en el mundo jamás. Me permití a mi misma pensar que tal vez no todo estaba perdido. Que podríamos volver a esa relación de amistad y confianza que alguna vez tuvimos. Yo lo amaba y lo necesitaba en mi vida, estas semanas sin su compañía me habían dolido tanto, y me sentía una estúpida por haber peleado con él por una tontería. Él no sentía lo mismo por mí, pero el dolor de un amor no correspondido, era mas soportable que el dolor de la soledad. De estar lejos de esa persona que tanto amas. Te extrañaba tanto Jimmy.
Se alejó de mi cuando el teléfono recibió un tercer mensaje.
- ¿Por qué tantos mensajes eh? - me dijo burlón - a ver... - la expresión de Jimmy cambió al mirar la pantalla de mi celular. Se quedó un momento leyendo y noté en sus ojos un sentimiento extraño. Todo lo contrario a la mirada divertida que tenía hace un momento.
- ¿Sucede algo Jimmy? - me acerqué preocupada creyendo que se trataba de alguna emergencia.
Luego dirigió sus ojos a mí. Su mirada parecía perdida, y a pesar de que estaba sonriéndome parecía que lo hacía con gran esfuerzo.
- Eh... es, tu novio... - me acercó mi celular y luego de mirarlo por un momento lo tomé.
"Tu novio". Odiaba esa frase. Odiaba que Jimmy creyera que Jason era mi novio. Yo no soy de ese chico, no quiero serlo. Solo amo a un hombre, y ese hombre estaba parado en frente mío, con una expresión que me dolía. Pero de todas formas... ¿De qué importaba si Jason era mi novio o no? A Jimmy no le importaba en lo mas mínimo si yo tenía novio o no. Me lo dejó muy claro con esa pelea que habíamos tenido. A el no le importaba si yo era novia de Hitler. El no quería que salga con Jason por el bien de la banda. Por mas de que Jimmy me había pedido perdón y yo a él, recordar sus palabras me dolían, porque me hacían recordar lo indiferente que le soy. Y otra vez volvió esa fría ola de agua que apaga la pequeña llama de esperanza en mi interior.
La puerta de la casa se abrió y Brian, Johnny, Zacky y Matt entraron, traían cajas de pizza y sodas. Volvimos a la mesa a sentarnos y empezaron a comer pizzas, pero yo no empecé hasta que leí los mensajes de mi supuesto novio.
Jason: Buenos días hermosa, recién me levanto. ¿Cómo estás?
Jason: Te extraño linda.
Jason: Tengo ganas de besarte otra vez.
Miré avergonzada a Jimmy, porque había leído esos mensajes. El solo estaba con la mirada perdida en la mesa. No le respondí a Jason, no tenía ganas. Hoy me dedicaría a disfrutar la tarde con mis muchachos de Avenged Sevenfold, a recuperar todo el tiempo perdido desde que había conocido a Jason.
Luego de casi media hora nuestros estómagos estaban llenos y estábamos riendo mientras mirábamos televisión y charlábamos.
- Oye rockerita, hoy estaremos tocando otra vez en el bar de universitarios - me dijo Matt - ¿Quieres que te pasemos a buscar?
Me sentí mal. Yo sabía que los chicos tocarían hoy, pero también sabía que su banda enemiga "Guilty Spawn" estaría tocando esa noche también. Y alguien ya me había invitado.
- Eh... bueno, yo, eh... - miré el suelo - yo iré a verlos, pero otra persona pasará a buscarme - los miré avergonzada.
Todos pusieron mala cara, sabían de quién estaba hablando.
- ¿White, verdad? - bufó Johnny.
Asentí y mire a Jimmy. Estaba mirándome serio y luego bajó su mirada al suelo.
- Ustedes saben que mi corazón le pertenecerá siempre a Avenged Sevenfold ¿verdad? - los chicos me sonrieron, menos mi lindo baterista - Solo me invitó a ver a su banda en vivo y dijo que pasaría a buscarme, es todo.
- Mas te vale que esperes mas nuestra presentación que la de ellos - Zacky me guiñó el ojo y yo me reí.
Pasamos un par de horas mas con nuestro trabajo, y cuando por fín estaba terminado guardé mis cosas y saludé a los chicos uno por uno.
- Adiós muchachos... - salí de la casa hacia entrada de la calle y me volteé al darme cuenta de que alguien me seguía.
- ¿No quieres que te acompañe? - me dijo Jimmy.
- Descuida, voy sola... - le sonreí y abrí el portón. Me acerqué y besé su mejilla dejando que una descarga recorra mi piel al sentir el roce de mis labios en su piel - vas a romperla esta noche ¿verdad Sullivan? - dije mirándolo a los ojos.
El seguía con esa mirada perdida, sin embargo me sonrió.
- Lo haré si tu me lo pides.
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¿Que creyeron? ¿Que habia olvidado esta hermosa novela? Emoticón heart JAMAS!
y más porque yo ya lei los siguientes caps....
*risa malvada*


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