Capítulo 19

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Louis.

—¿Era necesario hacer esto?—pregunté, con un toque de amargura cruzándose en las palabras.
—Sí Louis, era necesario. ¿Pensabas dejar que tu amada nos escuche hablar a gusto con él?—dijo Liam.
—No pero..
—Tenía que. Así estará tranquila cuando lleguemos.
—Estoy harto de esto, ¿Realmente qué vamos a ganar matándola? Tiene tanto tiempo con nosotros que le tengo afecto. Como si fuese mi hermana ya que no veo mucho a Katherine.—comentó Niall.
—Lo que ganamos es que no nos den cadena perpetua, y morir en las afueras de quién sabe dónde.
—Yo.. la quiero.—murmuré.
—¿Se van a arrepentir a éstas alturas?
—Tenemos una salida.
—Si genio, ¿cuál?—dijo Zayn.
—La única salida que tenemos es ir a un lugar lo suficientemente lejos y empezar una vida nueva con ella.
—Hagámoslo.—interfirió Niall, animado. Por un segundo me pregunté cómo era que él siendo tan noble seguía con nosotros.
—Vamos a Suiza, empecemos una vida nueva con ella, una vida limpia. Nos sacamos papeles de identidad falsos una vez más, y que para el mundo ella esté muerta. Aunque me cueste aceptarlo, secuestrarla a ella ha cambiando todo. Ella ha cambiado esto, incluso nuestras vidas. Entonces por qué no.. adiestrarla.
—En Suiza tiene familia Liam.—acoté. Liam me miró con recelo.
—He estudiado meticulosamente su vida por los últimos nueve meses. Día tras día, paso tras paso y ella está sola en este mundo. Realmente sola.
—Su tía y su hermana viven allí. Es peligroso. Además, estamos pensando en esto sin siquiera saber qué es lo que desea, que seguramente es volver a su vida con su familia.
—No me interesa Zayn, ella no irá allí. O hacemos esto, o le decimos la verdad de quién está detrás de todo esto y regrese a Inglaterra viviendo una farsa de vida con personas que no la quieren, y  que no merecen ver su sonrisa y dulzura como todos la hemos estado viendo durante este tiempo. Camila se queda con nosotros y punto. Louis merece un poco de alegría y no nos vendría mal tampoco a nosotros.—dijo firme. Una sonrisa me cruzó por el rostro. Realmente Liam estaba haciendo esto.
—Liam.. es demasiado.—murmuró Zayn.
—Ya, esperemos llegar a Suiza y veremos.

Camila.

Sentí mi estómago resolverse cada segundo más rápido, abrí mis ojos y vi todo borroso. Los párpados me pesaban como si un par de rocas estuvieran impidiendo que los abriese. Cuando finalmente lo logré ví a cada uno de los chicos multiplicados durmiendo a mi alrededor, supe que algo andaba mal con mi cuerpo y que terminaría una desagradable anécdota del futuro, levanté mi  cabeza del hombro de Louis con cuidado para no despertarlo a él ni a Niall, pero fue inútil y ambos lo hicieron un poco alarmados.

—Cam despertaste, tu has..
—Chicos, aterrizaremos en veinte minutos, abróchense los cinturones por favor. Y que todos se despierten pronto.—el chico de ojos verdes dijo, desde el mando.
—Gracias Harry.—Niall dijo, somnoliento.

¡Harry! ¡Harry era su nombre! Recordé, la Camila interior brincaba victoriosa hasta que retomé el dolor de cabeza y náuseas.

—Louis.. me siento un poco mal.
—¿qué tienes?—Preguntó, examinando mi rostro.
—El estómago revuelto..
—¿Del uno  al diez qué tanto?—interrogo Niall, haciendo una mueca de desagrado. A pesar de mi malestar y confusión una sonrisa me brotó de los labios por ver lo atento y dulce que él era conmigo.
—Treinta.

Todos se vieron entre sí,  empezaron a rebuscar cerca y alrededor de ellos desesperados. Pronto vomitaroa sin importar qué

—¡hazlo aquí!—exclamó Zayn entregándome  una bolsa plástica.

Demonios que asco era vomitar. Todo, lo mucho o poco que estaba en mi estómago había sido expulsado en varios batacazos que mi órgano me había dado con el fin de deshacerse de alguna toxicidad. El hormigueo que al principio sentía en mis labios y manos fue disminuyendo, el mareo de mi cabeza y lo borroso de mi vista igualmente.

—Asco, asco, asco, asco. Oh por Dios..—mascullé disgustada, dejándome tumbar en el asiento de nuevo.
—¿Mejor?—preguntó Louis, empleando un tono amable.
—Sí.. aunque me duele un poco la cabeza.
—Mierda.—Murmuró Liam, desviando su vista de mí.
—¿Mierda qué?—pregunté ansiosa.
—¿Nunca has tomado psicotrópicos?—preguntó.
—Claro que sí, pero.. ¿Por qué?—Me incorporé en el asiento.
—Te di.. Mmm algunos..—afirmó, casi inaudible. Sentí las sangres de mis venas empezar a calentarse.
—¡¿Qué tú qué?!—vociferé—. ¿Y si me dabas  una sobredosis y me matabas?  ¡Aunque no me sorprendería porque me odias!—grité, furiosa.
—Oh vamos.. estás viva y no te odio.
—No estás feliz de que respire.
—Así suena más bonito.—dijo con sarcasmo y río un poco. Liam tenía una sonrisa muy hermosa y dulce. Daría mucho por verlo riendo y no queriendo asesinarme.

Berna, Suiza.

Según Harry y Roger estábamos en Berna, la capital de Suiza aterrizando en un aeropuerto privado. Parecía.

—Genial.—murmuré.
—¿Cuánto tiempo sin venir?—preguntó, Zayn.
—Desde que tenía trece.—contesté, aferrándome de la suave lana del suéter de Niall—. ¿Adónde estamos exactamente?
—Aeropuerto antiguo. Alguien hizo que explotara años atrás, diseñó unas bombas explosivas altamente inflamables, parecía que era un atentado terrorista.—Harry me explicó.
—Jesús..—susurré—. ¿Nadie sabe quién lo hizo?
—Tienen años en su búsqueda pero sin éxito.—agregó Roger.
—Es escalofriante.—dije.
—Nada aquí es más escalofriante que mi mirada—dijo Zayn caminando a mi lado. Una pequeña sonrisa deslumbró en su rostro.
—Idiota.—reí y él sonrió—. Si supieras que tu mirada es dulce. Pero igualmente te odio.
—Pues.. tendrás que dejar de odiarme princesita Disney.
—¿Por qué dejaría de odiar a alguien que me tiene secuestrada, me maltrata y casi viola?—espeté con incredulidad.
—Porque estamos acá para comenzar una nueva vida juntos. Una vida limpia contigo.

EDITADA. Stockholm Syndrome  |  Louis Tomlinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora