EDITADA. Stockholm Syndrome | Louis Tomlinson|

Capítulo 29

Estaba entre afligida y enojada con la vida. No podía creer  la mala vida que me había tocado vivir. Jurando que la vida perfecta era la mía, que nunca sufriría ni lloraría más por alguna u otra cosa.

Que yo, era feliz.

Me dolía la cabeza, tanto como me dolía el corazón. Sentía como si alguien la martillara una y otra vez, me dolían los ojos y me ardían las venas. Estaba recostada  en una cama de hospital conectada por una aguja en mi antebrazo a un par de soluciones sujetas  de un largo y frío tubo de metal a mi lado, había alcanzado ver el celaje de Harry y Louis entre las cortinas pero al mismo tiempo los había visto desaparecer con un médico.

¿Qué hacía yo aquí?

Lo último que recordaba era que iba con Harry camino al salón de belleza. Louis apareció entre las cortinas grisáceas tiempo después delante de mí, automáticamente mi corazón empezó a palpitar tan rápido como siempre pasaba desde que había congeniado con él y aunque me sentía aliviada de verlo y con muchas preguntas que hacerle, no tenía fuerzas para sonreírle como quería. Él sonrió débilmente casi que por obligación y se sentó a un lado de mí tomando mi mano y envolviéndola entre la suya.

—Louis que..—dije  y el me silenció .
—Te quiero. ¿De acuerdo?
—Yo también pero..
—No te esfuerzes tanto Camila, solo escúchame. Perdona a Harry y a todos nosotros por ocultarte la verdad y..
—¿Que verdad?—lo interrumpí. Sus ojos turquesa habían centelleado con la luz blanca del techo cuando subió la mirada a la mía.
—¿No recuerdas lo que pasó?—preguntó. Negué con la cabeza aunque sentía que aunque no recordara ahorita, lo haría en unos minutos.
—¿Qué haces aquí? Se supone que pasarías el día ocupado con Liam y Zayn.
—Vine en cuanto Harry me llamó.
—¿Puedes decirme qué diablos pasó?
—No te lo diré ahora, el médico me ha dicho que no debes alterarte de nuevo.
—¡Dime!—repliqué enojada. Ésta vez sentía que el cerebro me estallaría.
—Harry te dijo quién mandó a asesinarte  y te desmayaste porque sufriste un shock emocional o algo así.—me explicó.

De pronto un montón de palabras, escenas y recuerdos volvían a mi como una gran y ruidosa tormenta. Recordé la cara de mi padre, el momento del secuestro. Cuando conocí a Louis y finalmente la última escena que llegó a mi cabeza fue la de Harry y yo. Sus palabras y su mirada de lástima y temor, recordé por qué estaba en un hospital.

—Mi padre los mandó a matarme Louis.—murmuré, aún con asombro.
—Camila..
—Ese bastardo tiene que morir. Tienes que ir a Inglaterra y hacerle lo mismo que él quería hacerme.
—¿Qué? Tuviste un gran ataque emocional y no es bueno que..
—Lo sé Louis. También siento que la cabeza me explotará, los ojos me arden y lo que sea que esté pasando por mis venas me está quemando pero estoy consciente de lo que pasa y de lo que digo, y quiero que lo que él quería hacerme, le pase a él.
—Es.. Es tu padre.. ¿No? Por algo te sentiste tan mal porque haya sido el el culpable. Lo quieres ¿No?—preguntó aturdido.
—Tal vez, pero ¿Qué de que soy su sangre? Soy su sangre. Soy su hija, ¿Y quiere que muera? Eso quiere decir que no tiene corazón y siempre me odió en secreto, solo decía quererme para no sospechar nada pero ¿Cómo fui tan tonta como para no darme cuenta? Estoy segura que mi madre también lo quiere, ver a su propia hija dentro de un ataúd muerta les daría satisfacción. ¿Para qué me trajeron al mundo? ¿Por qué no solo me abortaron o me dieron en adopción? Hubiera preferido ser pobre pero tener a una familia que me quisiese y es que no tengo a nadie que me quiera,y es su culpa, ellos me convirtieron en esto, en un monstruo sin sentimientos y por eso la gente me odia.  Me criaron como ellos, Johnny Parker es un psicópata Louis.
—Camila, primero tenemos que hablar esto con Liam, el sabe bien qué es lo que está pasando y sabe cosas que ni Harry ni yo sabemos.
—Liam me odia.—dije con incredulidad—. Si Jhonny Parker le dice que le dará más dinero a por mi muerte lo hará.—Louis se rió y vaciló.
—Cam, Liam no te odia, de hecho desde un principio pensó que era una idea  descabellada secuestrarte y matarte, y odió desde un principio que tu propia familia te quisiera ver muerta. Liam se comporta así porque tiene que hacerlo, es su trabajo no encariñarse con sus victimas ¿Entiendes? Trata de no tener que  ser como yo. Claro que sí se enojó contigo un par de veces y conmigo. Porque sigue siendo bastante raro como surgió todo entre tu y yo.
—Ustedes son tan.. No lo sé. Son buenos, no entiendo por qué hacen esto. No nacieron para hacer esto, todos ustedes son tan genuinamente buenos.
—Son decisiones que la vida nos hace elegir. Está destinado Cam, por una razón u otra. Te conocí de ésta manera sino, no hubiese sucedido. Nunca nos hubiesemos conocido en ninguna circunstancia.
—No lo sé Louis. Si estaba destinado a pasar hubiese pasado sin necesidad de todo esto, de que pasaras lo que pasaras y te arrastrara a este mundo. Ni a ellos.
—No es su culpa ni la mía. Dios así lo quiso, queda de nuestra parte hacerlo funcionar.
—Y no te culpo de haber elegido ser esto, te amo de igual manera Louis. De verdad lo hago y duele muchísimo hacerlo así. Sabiendo como todo surgió y que cada vez que salgas no sé si vuelva a verte. Duele amarte,  pero me gusta. Elegí que fuese así.
—Elegí que me hicieras daño.—susurró.
—¿Cómo asi?
—Mi amor por ti me mata poco a poco, me hace daño amarte pero lo hice. No es fácil Camila, podríamos  morir mañana mismo, podrías volver con tus padres mañana mismo y yo ir a prisión. Y esto, ésta maldita sensación y necesidad de protegerte hasta de ti misma me hace daño porque te amo, por ende tengo esa necesidad. Nací para vivir muriéndome por ti. —dijo viendo sus manos. Subió la mirada y sus ojos estaban brillando y sus labios se unieron en una delgada curva.
—Entonces me ha gustado tu manera de morir.

Louis se levantó y un par de gotas habían quedado plasmadas en la sábana.

—¿Adónde vas?—le pregunté preocupada porque estaba llorando, eso lo sabía perfectamente.
—Harry está esperando a verte, está tan preocupado como yo asi que lo dejaré pasar ¿De acuerdo?—dijo, y me besó en la frente. Desapareció entre las cortinas y aparrecio Harry Styles en su lugar.

《¡Princesa No Mía!》 Había gritado,  y alguien de afuera lo había mandado a callarse. Me reí y  se sentó en el mismo lugar donde estaba Louis hacía  unos segundos. Se inclinó y me dió un beso en la frente.

—Por fin despertaste, no vuelvas a hacerme eso. Fue horrible Princesa No Mía.—dijo, escuchándose realmente asustado.
—Lo siento..—murmuré—¿Tan mal estuve?
—Patético. Estabas llorando y de repente te quedaste seria, dejaste de llorar y caíste sobre mis piernas. Pensé que te había perdido.—susurró, sonreí y besé su mejilla. Sí que lo había asustado.
—Gracias por traerme aquí y no dejarme en todo caso, morir y gracias por decirme la verdad.
—Eso casi te mata Princesa No Mía, me sentí mal por ti, me sentí una basura.
—Oh vamos Harry, tu no eres la basura. En  todo caso es Jhonny Parker ¿No crees?
—Lo mataré Camila. Asi de simple, si no lo hace Louis o Liam yo lo haré y ten por seguro que dormiré con la conciencia en paz todas las noches cuando sepa que esa basura no tiene la dicha de respirar oxígeno.—determinó, con enojo en su mirada. Sé que era apresurado decirlo pero sentía que los amaba. Nadie me cuidaria como ellos nunca.
—¿Cuándo puedo irme de aquí? Odio los hospitales.
—Creo que en unas horas.
—¿Puedes decirle a una enfermera que me duele demasiado la cabeza? No hablo su idioma y no les entiendo mucho con el acento.
—Claro, duerme por favor.—dijo Harry en tono amonestador. Lo fulminé con la mirada y él se rió saliendo.

Entonces era él.

Ahora tenía que hacerlo enorgullecer como la amada hija que era. Asegurarme, de que el apellido Parker resurgiera.