Wizard Love 2

Capítulo 25.

Pronto llegamos a la estación de King Cross, salimos todos entre el andén 9 y 10 y allí unos cuatro autobuses nos esperaban fuera de la estación de trenes, cada casa de Hogwarts se subió a un autobús y estos nos llevaron hacia la que sería nuestra casa durante un mes entero.

Cuando bajamos del autobús McGonagall nos reunió a todos fuera.

- Bien, tienen media hora para cambiarse e instalarse en sus habitaciones, a las doce en punto os quiero ver a todos en el jardín ¿entendido? -todos asentimos y fuimos a que nos dieran las llaves.

Fuimos subiendo en el ascensor: Harry, Ron, Herms, Pansy, Draco y yo, (sí, estar todos juntos muy apegados en un espacio reducido y sin matarnos, es posible, lo he comprobado) y cuando llegamos al mini pasillo que separaba dos apartamentos miré el papel que nos dieron junto con las llaves, nuestro apartamento era el de la izquierda y el de Blaise, Theo, Anastasia, Dániel, Neville y Seamus el de la derecha.

Como yo era la que llevaba las llaves abrí la puerta del apartamento y encendí las luces.

- ¡Ah! No me lo creo Hermione, ¡mira esto! ¡y mira eso! joder esto es... flipante.

La casa era preciosa, el salón estaba unido a la cocina, cuando entrabas por la puerta lo primero que veías era un sofá y después una televisión, a continuación había una mesa con un ordenador que separaba el salón de la cocina, la cual tenía nevera, una mesa para preparar la comida, fregadero y una mesa para comer con seis sillas- mira, ¡hay un ordenador! ¡y televisión! –fui corriendo a la cocina y abrí la nevera- mira esto Harry ¡nos han dejado pizza!

- ¿Pizza? -dijeron Pansy y Draco confundidos.

- ¿Eso se come? -preguntó Ron.

- Sí, se come y está buenísima, mira toma -abrí la caja y le di un trozo a Ron- está más buena caliente.

- Wow, efto eftá rifquisimo -habló Ron mientras comía, a lo que Draco y Pansy le miraron con una mueca de asco.

- Ven Hermione, vamos -salí corriendo con Hermione por un pasillo y llegamos a la habitación de las chicas, era preciosa- ¡Aaaah! ¡Me encanta! -pegué gran chillido super agudo, es que era realmente perfecta.

La habitación era muy espaciosa y con las tres camas bastante separadas, estaba decorada a mi gusto totalmente y tenía tres grandes roperos realmente grandes. Pero lo que más me gustaba de todo, era que detrás del sofá con forma de sándwich de nata había un ordenador con una pantalla de televisión enorme.

Pansy subió corriendo al escuchar mi grito.

- No está mal, pero... ¿Qué es eso? –señaló la pantalla del ordenador.

- Eso, es el ordenador más grande que he visto en mi vida.

- ¿Qué es un ordenador? -volvió a preguntar.

- Ya lo sabrás, vamos Hermione tenemos que ir a por los baúles.

Hermione y yo volvimos a bajar las pequeñas escaleras y recorrimos el pasillo, llegamos al salón y vimos que Harry y Ron no estaban, pero no tardamos en oír sus voces.

- No, Harry, por favor quiero casarme con esto, tiene todo lo que deseo –decía la voz de Ron.

- Ron, no es legal casarse con una nevera -yo me empecé a reír al escuchar aquello al igual que Hermione.

- Herms ves y diles que se tienen que cambiar ya -Hermione se fue y entonces me di cuenta de que Draco aún seguía de pie mirando todo y poniendo caras raras- ¿y tú no te cambias? -le pregunté.