Wizard Love 2

Capítulo 27.

Al día siguiente me levanté con muchísima energía, me vestí con mi ropa de gimnasia muggle y me hice una trenza de lado, me encantaba ir con ropa deportiva, me sentía mucho más libre.

Fui hacia la cocina y allí me encontré con una imagen bastante divertida: mi hermano, Ron y Draco con ropa de deporte. Me empecé a reír como una loca al verlos así vestidos.

- Siento deciros esto, pero os veis un poco patéticos.
- Pues no, estamos geniales y estupendos, tú si que vas patética -me dijo Ron haciéndose el orgulloso, yo miré mi ropa.
- Ya claro Ron, lo que tú digas –rodé los ojos y me puse a desayunar, después de un rato salieron Hermione y Pansy.

Hermione iba más o menos bien pero Pansy...
Volví a reírme yo sola sin poder contenerme.

- Pansy, por Merlín, no hace falta ponerse tanto maquillaje, que se supone que hoy vas a sudar.
- Déjame en paz, yo me pongo lo que quiero.
- Vergüenza ajena -dije mirando a todos.
Cuando terminamos todos de desayunar salimos a tocarles a los de enfrente y cuando estos salieron no dudé en volver a reírme.
- Blaise, eh... quiero decir Zabini ¿qué te ha pasado? ¿Te ha atropellado un payaso multicolor y os habéis intercambiado la ropa?
- Blaise no le hagas caso, estás muy guapo -le dijo Pansy poniéndose roja una vez lo hubo dicho.
- Tú también Pansy –le contestó Blaise poniéndose rojo también.
- ¿Alguien me acompaña al baño para que vomite? Mucha cursilada veo yo por aquí delante.
- Oh, cállate Potter –dijo Blaise actuando como si me odiara.
- A mi hermana no la mandas callar serpiente -me defendió Harry.
- Tranquilo Harry, no me dan miedo las serpientes -dije sonriendo, en eso salieron Neville y Seamus y me puse a reírme como una loca por tercera vez en aquel día.

- ¿Qué pasa? –preguntó confundido Neville.
- ¿Es que hoy os habéis puesto todos de acuerdo en poneros super ridículos? -dije mientras me reía- sin ofender claro –añadí en seguida al ver la cara que puso Neville.

- Vámonos, anda –dijo Seamus emprendiendo la marcha.
- ¿Qué nos toca a primera hora? -me preguntó Hermione mientras bajábamos en el ascensor.
- Educación Física.
- Genial, en Hogwarts el quidditch y las clases de vuelo, y en Londres muggle gimnasia, ¡qué pesada es la gente con el deporte! –se quejó Hermione.

***

- Bien, alumnos extranjeros hoy observarán como se juega al fútbol, deporte mundialmente conocido pero como me ha comunicado vuestra profesora en vuestro país no lo conoce ni lo practica nadie -dijo el profesor, cada año lo cambiaban como el nuestro de DCAO, así que no sabía quien era.
- Profesor –me apresuré a decir- yo si que sé jugar.
- Pues excelente, tu jugarás con los demás, ¿alguno de tus compañeros sabe jugar también? -yo miré a Draco, Blaise y Theo, estas vacaciones de Navidad yo les había enseñado un poco, pero ellos negaron con la cabeza rápidamente, después miré a Harry, él sí que sabía jugar, pero también negó con la cabeza, a Hermione no me hizo falta mirarla, sabía que a ella no le hacía mucha gracia el deporte.
- No, profesor, ninguno sabe.
- Bien, pues vamos al campo y que ellos se queden sentados observando.
Llegamos al campo, tal y como lo recordaba, y todos mis compañeros se sentaron en las gradas que habían para el público.
- Hoy jugaremos contra la clase de 4º C -dijo el profesor, un momento, ¿esa no era la clase de Dudley?- Potter, Dursley seréis los capitanes, elegid equipo.

Me acerqué a Dudley como me indicó el profesor.
- ¿Qué haces tu aquí? ¿Ya te han expulsado de tu escuela de fenómenos? -me dijo bajito Dudley.
- No, Dudders, estamos de intercambio, ¿sabes? A lo mejor me paso unos días por tu casa mientras duermes, y a lo mejor unos amigos míos me acompañan –señalé con mi cabeza a Blaise y a Theo.
- Ni se te ocurra, no... no serias capaz.
- Sabes que si soy capaz.