XIII

283 31 1
                                    

Y en ese momento salí a la superficie.
Estaba desorientada. Hubiera jurado que hacía un momento me estaba ahogando.
Veía todo borroso.
ㅡ¡Respira! ㅡme ordenó una voz aterciopelada, con un tono de angustia.
Era Jungkook.
Resultaba imposible obedecer. El agua, no me permitía respirar. Me quemaba.
Aún sentía que me ahogaba.
Ya no me sentía fría, como la helada agua; de hecho, la sentía caliente contra mi piel.
Me di cuenta que era, las manos de Jungkook, que intentaba expulsar el agua de mis pulmones.
Expulsé el agua por la boca.
La cabeza me daba vueltas.
ㅡ__ ㅡinquirió Kook, con la voz aún tensaㅡ ___, cielo, ¿puedes oírme?
Tenía las vías respiratorias a carne viva, como si hubiera frotado con un estropajo de aluminio, así que cada aliento me quemaba, pero podía respirar.
Intenté abrir los ojos. Me tomó, casi un momento, el sol me encandilaba.
ㅡ¿Kook? ㅡgrazné.
El rostro de Jungkook bloqueó la luz.
ㅡ¡Oh, cielo! ¿Puedes oírme? ¿Estás bien? ¿Te hiciste daño en alguna parte?
ㅡN-no sé ㅡ tartamudeé.
ㅡEn ese caso, te llevaré al auto.
Deslizó sus brazos debajo de mí y me levantó sin esfuerzo, como si fuera una caja vacía. Sentí su pecho desnudo, mojado, pero caliente. Se me deslizó la cabeza hacía su hombro.
Mi cabeza aún me daba vueltas.
Miré como me alejaba de ese hermoso lugar. Sólo se escuchaba la cascada, el aire y los árboles moviéndose. Me pregunté si estaba o no consciente.
ㅡ¿Cómo supiste? ㅡpregunté con voz algo ronca.
ㅡEstaba bajando ㅡdijo mientras subía trotando en dirección a la carreteraㅡ estaba casi en medio camino pero te escuché gritar ㅡse estremecióㅡ así que subí para ver, si había pasado algo, y no te vi, te busqué, y no encontré. Pensé lo peor, y me acerqué al borde y vi un círculos y burbujas en el agua. ¿Porqué no me dijiste que ibas hacerlo? ㅡsu voz tenía una combinación de ira y preocupación.
ㅡLo siento ㅡmurmuréㅡ Fue una estupidez.
ㅡDesde luego, fue una verdadera total estupidez ㅡcoincidió. Su cabello chorreó cuando asintió con la cabeza ㅡ Mira, ¿te importaría guardar todas esas tonterías para cuando yo esté cerca? No puedo concentrarme así todo el día, pensando en que andas tirándote de los acantilados a mis espaldas.
ㅡDe acuerdo. No hay problema.
ㅡGracias.
Me estremecí cuando sentí su cuerpo ridículamente cálido.
No me di cuenta que ya habíamos llegado al auto.
De un jalón abrió con facilidad, la puerta del pasajero.
ㅡPodrías quedarte aqui ㅡrepusó mientras me depositaba en el asientoㅡVamos, no te muevas de éste auto. Iré por ropa seca.
Movió unas cosas y saco una toalla y me envolvío en ella.
Luego besó mi frente.
Y después cerró la puerta.
Cerré mis ojos. Por alguna razón me sentía exhausta.
No sé cuanto tardó en llegar Kook, pero yo sentí que fue rápido.
Abrió mi puerta.
ㅡ¿Como te sientes? ㅡmurmuró.
ㅡMi garganta arde ㅡhice un gesto de dolor.
Kook bajó la mirada.
ㅡ¿Puedes levantarte?
ㅡLo intentaré ㅡsusurré.
Me quité la toalla y me deslicé en el asinto, dejando mis piernas colgando. Toqué el suelo y me paré.
Kook ponía atención, y tenía sus brazos estirados, por si tenía un movimiento en falso.
ㅡAquí está tu mochila.
ㅡ¿Puedes sacar, una blusa gris que está adentro?
Kook buscó y sacó la blusa.
ㅡMe iré para que puedas cambiarte.
ㅡNo te vayas. Me cambiaré adentro del auto. Todavía estoy demasiado cansada para moverme. Quédate conmigo.
Kook esperó afuera, apoyándose en el auto, con los brazos cruzados.
Levanté mis brazos para quitarme la blusa y me sentí adolorida, hice un gesto de dolor. Despacio me quité la blusa.
Sentí que Kook me miraba. En realidad no sé si me miraba a mi o su reflejo.
Miré que usaba aún el top de está mañana.
Con esfuerzo, me puse la otra blusa y me envolví de nuevo en la toalla.
Toqué la ventana y Kook abrió la puerta. Me quedé en el asiento.
Mis ojos ardían. Con esfuerzos podría mirarlo.
ㅡ¿Todo bien, cielo?
Kook tenía aún el cabello mojado, lacio y le caía en su frente.
Miré su pecho desnudo.
Lo observé en silencio, sus labios entreabiertos respiraban lentamente. Hacía una gran esfuerzo para no fijarme en su cuerpo, sobre todo en sus bíceps y en su trabajado cuerpo.
Me encogí de hombros, mientras me hundía en la toalla.
Luego sentí la mano de Kook. Quitó unos mechones de mi flequillo que tapaban mi cara.
ㅡ¿Quieres que nos vayamos? ㅡsusurró.
ㅡNo, hay que quedarnos.
Kook asintió y sonrió.

Adagio ➳ j.kDonde viven las historias. Descúbrelo ahora