From what to what? • || JimSu ||

Encuentro II

[SeokJin – NamJoon]

—¿Podrías dejar de seguirme? —pidió después de adentrarse a su pequeño y descuidado edificio.

—¿Qué pasa si no quiero? —le dijo el otro mientras le sonreía pícaramente.

—Vamos, NamJoon. Ya basta. —Bufó mientras se disponía a subir por las estropeadas escaleras.

No recibió ninguna respuesta y solo se dejó llevar por la hilera de escalones, aunque sabía que alguien seguía sus pasos de manera juguetona. Cuando vio el número de su departamento se relajó. Por fin podría alejarse del rubio.

Abrió la puerta con su gastada llave y la dejó ligeramente abierta para echar al rubio de su territorio—. NamJoon, ya te puedes...

Algo que chocó contra sus labios le interrumpió. Le gustaba que lo hiciera, que lo besara, pero JungKook...

—NamJoon, basta —murmuró sobre sus labios, aún manteniendo los ojos cerrados.

El rubio lo empujó con las caderas para adentrarse al pequeño departamento y cerró la puerta con el pie a la vez que lo volvía a besar. Se dejó llevar por el contrario mientras continuában besándose. Sus pasos se dirigieron hasta una de las dos únicas habitaciones que habían en su departamento. Agradeció bastante terminar acostado en su propia cama desecha y no metido en la ducha.

NamJoon se posicionó sobre él sin delicadeza, manteniendo sus caderas fregándose contra las suyas, haciendo que pequeños gemidos se escaparan entre el lascivo beso.

Las manos del rubio se adentraron por debajo de la suelta camiseta, apretando un poco las yemas contra su piel y luego la sacó sin ningún tipo de mesura por sobre su cabeza.

—NamJoon, ¿qué haces? —preguntó extasiado cuando la boca del otro empezó a besar y morder su cuello.

Contrario a lo esperado, el chico no respondió y solo se limitó a pasar con fuerza las manos por su delgado cuerpo, pero a Jin eso no le molestó... para nada. Las manos del rubio manos pasaron rápidamente por el inicio de sus pantalones y su piel se sintió ya caliente por la excitación. El rubio desabotonó rápidamente la prenda y la bajó un poco.

—Mierda... —exclamó cuando sintió la lengua ajena viajar por el elástico de sus boxers y su piel descubierta.

Echó la cabeza hacia atrás con los ojos cerrados para poder aguantar las ganas de golpear a NamJoon para que se apurara.

—Jin —murmuró roncamente el chico, haciendo que él gruñera—, yo...

—¡Hazlo ya! —chilló respirando agitadamente—. Me importa una mierda lo que harás, solo...

Se quedó totalmente mudo cuando sintió que NamJoon bajaba con lentitud sus boxers, como si quisiera hacerlo sufrir. La lengua del tipo pasó lentamente por toda la extensión de su miembro y él inmediatamente se sintió estremecer. Apretó fuertemente las manos en torno a las sábanas desordenadas de su cama y esperó ansiosamente al próximo movimiento del rubio.

—¿Qué esperas? —murmuró casi suplicante cuando sintió la respiración chocar contra la punta de su miembro.

Para su sorpresa, NamJoon le tomó con dureza y frotó su miembro de arriba hacia abajo sin ninguna delicadeza, pero eso le encantó.

Se quejó roncamente cuando sintió que las manos de NamJoon soltaban su miembro, pero inmediatamente se contentó cuando sintió como una cavidad húmeda lo abrazaba. Gimoteó de satisfacción al sentir que la lengua del rubio se restregaba contra la piel de su miembro y una de sus manos se dirigió con urgencia hacia la rubia cabellera para tomarlo con fuerza y hacerlo bajar con rapidez, llegando casi al límite de ambos.

Al cabo de unos segundos repitiendo el mismo movimiento escuchó unas pequeñas arcadas, pero aun así eso no le hizo detenerle, aunque para su sorpresa la boca de NamJoon cada vez apretaba más su miembro por voluntad propia.

—¡NamJoon! —gritó fuertemente el nombre del chico mientras se sentía eyacular.

Después de eso NamJoon se acercó a él para morderle fuertemente el labio inferior.