Capítulo 9

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Dama oscura

¿Quién iba a imaginar que usar un par de sandalias de mujer, le meterían en una situación tan divertida?.

Ahí estaba Jack, en la lujosa mansión de un cliente bastante excéntrico y fetichista. Sentía muchísimos deseos de reírse; sin embargo, se aguantó. Sino le ofendía, tal vez, aquel hombre volvería a solicitar su compañía.

Caminó como si estuviese en un desfile de modas, mientras él le miraba los finos pies portadores de un hermoso par de sandalias taco aguja color rosa – tenía la suerte de saber caminar con ellas- y se masturbaba.

Y sonriendo, aspiró un poco más de la cocaína que le había ofrecido.

"Toda la que quieras" le había dicho. Después le daría su paga, como si hubiese prestado un servicio completo.

¿Podía pedir algo mejor? No iban a tocarle ni un solo pelo y encima le darían dinero.

"Gracias, Marcus" Pensó, ya que había sido idea de su amigo, que esa noche tuviese ese pequeño toque femenino.

Sabía que muchos hombres y mujeres tenían deseos sexuales bastante extraños. En su profesión, se había encontrado con peticiones que podían resultar de lo más excéntricas; sin embargo, era la primera vez que le sucedía algo como eso.

Pero, se sentía bien, por supuesto que sí. Aquello le pintaba una alegre sonrisa en el rostro.

Luego de despedirse, de "El loco de los zapatos" como lo había apodado mentalmente, volvió a juntarse con Marcus en la esquina de siempre.

_ Cariño, te ves muy contento _

_ El cliente se masturbó mientras me veía caminar. ¡Ese es el efecto que causan tus sandalias! _

Ambos rieron divertidos.

_ Es que todo lo mío, desprende sensualidad _ respondió Marcus, con aires coquetos.

_ ¿Te había pasado algo como eso antes?_

_ La verdad que, no _ volvió a reír.

Un auto oscuro se paró frente a ellos, sin darles tiempo a nada, una mujer descendió y se acercó a Jack de manera intimidante; quedando a pocos centímetros de él.

The joker tuvo que agachar la cabeza para poder observarla. Debía tener unos cuarenta años, tal vez, de tez muy blanca, cabellos oscuros y unos enormes y hermosos ojos color verde. Era preciosa.

_ Tienes unos ojos muy bonitos _ dijo ella, quién parecía no darse por enterada, de lo extraño de la situación

_ Tengo otros atributos mejores _ le respondió tratando de poner una voz sensual.

En lo personal, a Jack no le gustaban las mujeres. Nunca le habían atraído, pero debía admitir que como clientas eran muy buenas. La mayoría era de trato suave, gustaba mucho de las caricias y esas cosas, aunque por supuesto; se había encontrado con bastantes excepciones.

_ Ven conmigo _ dijo ella, con tono que no supo si definir como autoritario.

Él la siguió sin decir palabra. Ella le resultaba un poco excéntrica, pero su trabajo no era hacerse preguntas. Además, el cliente anterior, también había sido extraño.

"Noche de freakys... Debo ser yo, él peor de todos" pensó divertido.

Llegaron a un lujoso edificio y a penas si miró a su al rededor, antes de meterse al ascensor y de allí al departamento.

A Jack le sorprendía el poder adquisitivo de sus clientes esa noche.

Avanzaron hacia un living muy grande, y de iluminación bastante tenue, ofrecida por un hogar que había en una pared frente a él.

Jack: The JokerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora