Más que amigos: (Justin Bieber y Miley Cyrus) Jiley

58-Polvillo magico, Justin mete la pata

Justin POV:

La gira termino y nos fuimos a California, me pelee con Miley por celos y estupideces.

Organizamos una fiesta donde vino mucha gente, es realmente genial todo.

La fiesta estaba en su punto, llevo más de tres latas de cerveza, como cinco vasos de vodka y nose cuantos vasos extraños que me ofrecían.

Yo estaba con los chicos, pero en las pista comenzamos a separarnos, la gente nos hacia bailar, y nose donde quedaron los demás.

Una chica quedo en frente de mí, comencé a ver un poco borroso, por la cantidad de luces de colores que había, pero seguí bailando hipnotizado por la energía que emitía mi cuerpo.

— ¿Te muestro algo? —Ya ni podía reconocer quien me estaba hablando, solo sentí que alguien tomo mi brazo y me obligo a seguirlo.

Lo siguiente que reconocí es que estábamos subiendo las escaleras. Yo iba guiado por su mano y afirmándome de todo.

— ¿Te gusta volar? —No sé porque una sonrisa tonta se plasmo en mi rostro.

Comencé a sentirme mareado, pero lo ignore. —Yo vuelo. Red bull, te da alas...—Canturreé moviendo la cabeza al ritmo de la música.

—Tengo algo que te hace volar...pero no es Red bull tontito.

Cerré mis ojos distraídamente. Me gustaría estar en un parque ¿Por qué? No sé. Lalalala.

Verde...me gusta el verde. Pero más el morado. A Miley le gusta el rosado.

— ¡Miley! —Grite buscándola, pero al abrir los ojos de golpe me maree y caí sentado en el suelo.

Escuche algo ser arrastrado cerca de mí y me puse lo mas alerta que pude.

—No me toques si no eres Miley—Logre decir con dificultad.

Me comenzó a doler la cabeza de horrible forma.

—Abre los ojos. —Los abrí lentamente, había una pequeña mesa frente a mí, con finas líneas blancas de un polvillo en ella.

Intente pasar mi dedo para formar una figura pero una mano golpeó la mía.

—Mira esto se hace así. —No lograba reconocerle la cara porque la cubría con su pelo y la poca luz que había, mas mi mareo y dolor de cabeza me aturdía.

Tomo un papelito y lo acerco a su nariz, luego se acerco a fina línea de polvillo en la mesa y comenzó a inhalarla.

Cuando termino me dio un papel a mí y me apunto la mesa.

—Tu turno—Dijo risueña y comenzó a reír.

—No...yo no inhalo azúcar...ni sal. Voy a estornudar maldita loca.

Asintió.

—Toma esto—Me entrego un vaso y lo mire con desconfianza.

¿Lo tomo o no lo tomo?

Como mis ojos comenzaban a cerrarse, por lo que me lo tome de golpe, esperando despertar, y ardió al pasar por mi garganta y me hizo dar un pequeño salto.

Recarga de energía ¡Guju! Lalalalala

Me volvió a entregar el papel y eufórico lo acepte gustoso y comencé a inhalar el polvillo.

— ¿Te gusta bebe? Es polvillo mágico.

Arrugue la nariz al terminar, inhalé todo lo que no entro de una.