Más que amigos: (Justin Bieber y Miley Cyrus) Jiley

59-Hay Justin

No sé cuanto rato llevo aquí congelándome, pero aun no tengo intensiones de salir, me siento sucio, me repugna mi propio cuerpo. Y también me duele. Saque una brazo de la bañera y lo pase por mi cabello, luego lo baje y tome mi celular del suelo y observe la hora.

Dios, ya llevo más de dos horas metido aquí. Sera mejor que me muera de hipotermia. Después de todo ¿A quién le importa? Metí la pata, Miley me dejo. Estoy solo. Lagrimas seguían rodando por mis mejillas.

Pero alguien comenzó a golpear la puerta del baño.

— ¡Justin se que estas aquí! ¡Abre la maldita puerta! —Los gritos de Scott me hicieron fruncir el ceño.

Abrí la boca para decir algo pero mis dientes estaban castañeando de frio y no podría decir palabra.

Me mordí el labio con ellos, intentando dejar de hacer esa molesta acción. Aunque me alegra saber que a alguien le preocupo.

— ¡Justin joder! —Escondí la cabeza abajo del agua, cuando escucho que abren la puerta de golpe.

—Mierda—Escuche que dijo Scott. Luego sentí como tomaron mi cabeza y la sacaron del agua.

Scott tenía la boca abierta de asombro.

—Justin... ¿Qué estas haciendo? —Pregunto preocupado.

Me encogí de hombros débilmente y Scott me toco el hombro, pero alejo su mano rápidamente. —Te estás congelando joder... ¿Cuánto rato llevas aquí?

—D-os horas o más—Mi voz salió quebrada, y baje la mirada al agua de inmediato.

—Dios...Justin, no entiendo que ocurrió, solo sé que Miley se fue con algunos de los chicos a no sé dónde.

Me quede en silencio. —Estoy confundido... ¿Estás hablando conmigo o con Dios?

Me sacudió el cabello y soltó una pequeña risa.

— ¿Vas a contarme?

—E-era Rachel—Y volví a romper en llanto.

Scott se vio aun más preocupado y confundido.

—Explícame Justin, no entiendo—Pidió desesperado. —Y sal de ahí que vas a agarrar una enfermedad.

—Sida es lo que voy a agarrar por mi estupidez—Gruñí con odio para mí mismo y Scott se veía más preocupado aun.

Observe atentamente a Scott, su rostro era confusión, preocupación y enojo. Pero se giro y cuando creí que también iba a dejarme, fue al armario de las toallas y saco dos de ellas y volvió hacia mí.

—Bien Justin ¿Tienes que cooperar vale? —Estiro tu mano hacia mí.

Intente pararme pero tenía tantos músculos congelados que se me hacía imposible.

—No puedo Scott—Volví a llorar como niño pequeño—Tengo el trasero congelado.

—Bien...solo toma mi mano, voy a sacarte de ahí ¿De acuerdo? —Volvió a estirar su mano, pero ni me moleste en estirar la mía.

—Soy un asco Scott...una mierda no merezco vivir.

—Justin por favor no seas dramático y sal de ahí para que podamos hablar.

—Soy repugnante, engañe a Miley con Rachel... ¿Cómo mierda volví a drogarme? No entiendo nada Scott—Y volví a enterrar mi cabeza en el agua y Scott volvió a sacármela.

—Bien, creo que ya entendí algo...—Se quedo en silencio—Solo sal de ahí mejor—Al ver que yo no iba a darle la mano, metió su mano en la bañera y tomo mi brazo.