Somos 5 Espías ©

19: Campamento de ebrios.

-Esto no era lo que teníamos en mente.

-No, para nada.

- UH AH UH AH.-Miramos raro al indio.

Más conocido como chicos borrachos. Hemos escapado de Christian, pero no fue nada facil. Y el punto de como terminamos aquí fue que unos chicos en una camioneta nos han "raptado", por ser "gringos" y robar sus tierras.

-¡Que venga él rey! -Grito uno pelo azul.

- ¡Con ustedes gringos de América del norte! ¡El rey Steven!

-¡Gringos!-Nos señalo.-¿Que hacéis en mis tierras? ¿Robar? ¿Raptar a este bombo? ¡Respondan!

Me encantaría decir que no era Steven Scott pero como la suerte no esta de mi lado. Si es Steven Scott, uno borracho.

Se acerco a mi y me olió, cerca del cuello.

- ¿Qué mierdas haces Steven? - Pregunte entre dientes.

Se acercó aún más, al punto que sentí su nariz pasando por toda la longitud de mi cuello, se separó para verme con los ojos entre cerrados.

-¿Chris?

-No, él conejo de pascua, idiota.

Abrió los ojos como platos y me abrazo.

-Steven, la estas asfixiando

Steven me soltó y yo pude recuperar él aire. Él fruncio él ceño.

-¿Qué te paso? - Dijo arrastrando las palabras.

-Eso no importa ¿Tienes un teléfono?.

-¡Nadie tiene móviles aquí! ¡La tecnología no exi...!

-Yo tengo uno.- Alzo la mano él chico peli azul.

-Él tiene uno.- Lo señalo a lo que rodé los ojos.

-Steven solo desamarranos.- Hablo Jake.

-¡Alejito! ¡Ricardito! ¡Desaten a estos gringos! - llamo a dos morenos que vinieron a nuestro rescate.

- Por fin.- exclamó James felizmente mientras salía de las cuerdas.

Jake y yo caminamos al peli azul.

-¿No los prestas?- Preguntamos.

-¿Se lo robaran?

-No.

-Okey.

Marque él número de Matt.

-¿Hola? - Su voz se estaba ronca, y rezaba que no estuviera tomado.

-Hola Matt ¿Donde estas?

-Chris..

-No, garfield...

-¿Garfield? ¿Eres tu? ¡Eres mi ídolo!

Le colgué.

observe él lugar, Estábamos en un al parecer campamento.

- Chris.

-Chris.

-Chris.

-Jake estoy a tu lado.-Dije volteandome.- ¿Que te paso en la cara?

-Estos chicos pintan muy bien sabes.

-¡JA! Ya veo que si, te pintareataron la cara a una más idiota, hermanito.

Estaba pintado igual que los otros tomados quienes parecían fingir ser una tribu. De verdad que cada día se sorprendía por la estupidez humana bajo los efectos del alcohol.