En compañía de la falsedad

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En los días antiguos, Budafue un mero mortal;
Al final, nosotros mismostambién seremos Budas.
¡Que doloroso que las diferenciasdeban separar a esos que compartenla naturaleza de Buda!

-Cuentos de Heike: Giou



Shion se levantó lentamente del piso.
Sólo quedaban unas cuantas ascuas consumidas en el calentador, y la habitación estaba congelada. Cravat, que estaba acurrucado junto al cuerpo de Shion, levantó la cabeza y chilló suavemente.

—Shh- —Shion enrolló la manta alrededor del ratoncito. —Mira, duerme aquí. Pero por favor no hagas ningún ruido, ¿OK?

Shion se había familiarizado tanto con la habitación que podía encontrar el camino incluso en la oscuridad. Se dirigió con sigilo a la puerta; le quito el seguro, y antes de abrirla, se dio la vuelta. Escuchó cuidadosamente. No había ni un ruido.



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Parecía que el dolor de la herida de Nezumi no le había impedido dormir.

Supongo que una herida tan pequeña no es suficiente para mantenerlo despierto. Aún
había tantas cosas que necesitaba decirle a Nezumi: La alegría de conocerlo, la gratitud por todo lo que había hecho por él, y el profundo respeto que sentía hacia él–

Shion no había podido expresar adecuadamente nada de eso.

Me alegra haberte conocido.
Eso es todo lo que pude decir.

Shion inhaló profundamente el aire de la habitación, sólo una vez, antes de abrir silenciosamente la puerta.




* * *




La luz relampagueó, señal de una llamada de la extensión directa al Ayuntamiento. El hombre levantó el rostro de los documentos de investigación que había estado hojeando, y chasqueó la lengua con irritación. El documento, que había sido imprimido hace décadas, era muy intrigante y deseaba leer más. Pero la luz roja parpadeaba, indicando una situación de emergencia. El hombre chasqueó de nuevo la lengua y metió los documentos en un fólder.

Cuando presionó el botón, el rostro familiar de un hombre apareció en la pantalla. Era un hombre al que solían llamar Fennec.

Fennec– el zorro del desierto. ¿Quién lo había empezado a llamar así?

—¿Qué pasa, Fennec?

—Tenemos una emergencia. Trajeron dos muestras al Hospital Central.

No.6Donde viven las historias. Descúbrelo ahora