Light my fire | The Vamps |

Capítulo 15: Love is easy

Cada frase de la canción me derritió.

-¿Te gusto?-había dicho luego de terminar su interpretación.

Sólo asentí, no tenia palabras.

-Entonces voy por buen camino-sonrio, dejando su guitarra a un costado. Pero antes de que pudiera decir algo, su celular comenzó a sonar-Lo siento-se disculpo y atendió.

Mientras el hablaba yo estaba intentando descifrar que significaba todo esto. Es decir... ¿Por qué?¿Por qué había-

-Debo irme, están arreglando los últimos detalles de la fiesta y me necesitan-había dicho rápidamente-Nos vemos mañana por la noche-se despidió y otra vez sus labios se encontraron con mi mejilla.

Sin dejarme decir palabra alguna se había ido, dejándome estúpida por un simple beso.

Mi cabeza estaba hecha un remolino, demasiadas ideas, demasiadas hipótesis, nada seguro.

No quise seguir pensando, le di de comer a Benny por última vez en el día, me cepille los dientes y me obligue a dormir, mañana aclararía mis pensamientos, por hoy, ya era suficiente.

***

Sábado.

Me había levantado como reloj a las diez de la mañana. Hora en la que los últimos días me había estado levantando Brad, pero hoy era el gran día, la fiesta. Seguramente estaba ocupandose de los últimos detalles, o tal vez preparando su ropa...

¡ROPA!

Recordé que no tengo ropa, excepto por los jeans y remeras estampadas, o mis viejas zapatillas sucias. Mierda.

Me prepare lo más rápido que pude, ni siquiera desayune, sólo le dejé comida a Benny y me tome un taxi hasta el centro comercial más cercano.

El día fue agotador, había conseguido todo-eso creo-, un vestido azul francia simple, ajustado hasta la cintura y luego suelto; unos zapatos negros altos y un saco largo- por si refrescaba en la noche-; de paso, aproveche para comprar un poco de maquillaje, lo básico-base, corrector, rubor, delineador, gloss, máscara de pestañas-; y para decorarme aún más, unos aros dorados, un collar del mismo color, y un esmalte a juego.

Ya eran las seis de la tarde. Sí, ese par de cosas me tomo casi ocho horas, es que siempre fui indecisa y es algo que creo muy difícil de cambiar.

Agotada, decidí tomar un helado. Fui hasta la heladería más cercana y pedí mi sabor favorito. Busqué una mesa y me deje caer en el asiento como bolsa de papas, literalmente.

Brad, se me vino a la mente.

Últimamente, siempre lo tenía en mente.

¿Es que... Desde cuando me produzco tanto para una estúpida fiesta que ni sé de quién es?

Yo sólo me producía cuando estaba, salía o iba a ver a...

¿Me gusta Bradley?

Mi vista se desvió a todas las bolsas que se amontonaban a mi alrededor. Y sólo una razón por la cual las había comprado me venia a la cabeza.

Bradley.

Oh Dios mío.

¡Esto no tendría que estar pasando! Es decir, nunca estuvo en mis planes volver a enam...¡No!

Es que... No quiero volver a sufrir, no quiero que me engañen, pero Bradley... Brad no es un chico de esos ¿o si?

Tal vez, y sólo tal vez, todo lo que estuvo pasando estos últimos días son señales... Señales para que... ¿Me vuelva a enamorar?¿Vuelva a sonreír?