Capítulo 49: Louis

1.1K 62 7
                                    



Su mirada está fija en mis labios.

Se acerca acortando la distancia a sólo centímetros, y remoja sus labios con su lengua.

Hijo de puta.

Lucho con todas mis fuerzas por no demostrar lo que me causan sus ojos fijos en mi, su boca, su lengua, y todo él.

Muerdo mi labio inevitablemente, y esto yo ya lo viví.

Mierda.

Me empuja con su pecho y mientras me pierdo en sus hipnóticos ojos, escucho la puerta cerrarse.

Oh, no.

Mis ojos se abren de par en par resistiendo los impulsos que tengo de tirarme, literalmente, sobre él.

Autocontrol. Autocontrol. Autocontrol. Autocontrol.

"Está ebrio"

Autocontrol. Autocontrol. Autocontrol. Autocontrol.

¡No puedo modular una puta palabra!

-¿Q...qué haces?-tartamudeo mientras retrocedo hasta chocar contra el lavabo. Mierda.

-Nada, todavía-dice para luego colocar sus manos a los costados de mi cuerpo, acorralandome.

Su rostro se acerca peligrosamente al mío, y percibo el olor a alcohol.

¿Por qué siempre así?¿Por qué de esta manera?

-Me gustas- dice con voz ronca.

Oh, Dios.

"Aléjate de él antes que-"

Ya no la escucho. Ya no puedo escucharla, y tampoco quiero.

Brad succiona mi labio inferior y una ola de sensaciones me inunda.

Mis manos se enredan detrás de su nuca.

No quiero separarme de él.

El beso se transforma, ya no es un simple beso, o por lo menos él no quiere que sea un simple beso.

¿A quién engaño? Yo tampoco quiero un puto beso.

Las manos de Brad se deslizan por mis piernas y en un movimiento rápido, me tiene sobre el lavabo.

Mis piernas rodean automáticamente su cadera, sin dejar un sólo milímetro de distancia entre nosotros.

Siento, aún más que antes, el bulto creciente en los pantalones del chico.

Estoy muerta.

Esto tiene que ser un puto sueño.

-Sam-dice con esa voz que me derrite.

Los besos cesan por un instante y mis ojos observan su perfecto rostro mientras que nuestras respiraciones agitadas hacen eco contra las paredes de esta habitación.

Sus labios rojizos y levemente hinchados me reclaman volver a juntarse con los míos, y no hay otra cosa en el mundo que quiera hacer en este momento.

-Sam-repite acariciando mi mejilla. Suelta un suspiro y se muerde el labio antes de volver a hablar-No te vayas-dice en un susurro. Se acerca y reparte besos por mi mandíbula, haciéndome estremecer.

Cuando sus labios vuelven a los míos, una batalla se desata en nuestras bocas.

-Me encantas.

Dudo que pueda seguir controlándome.

Un momento, no estoy controlándome.

Brad me acaricia sobre la remera y yo sólo me dejo.

Light my fire | The Vamps |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora