(Capítulo especial)
Joseph.
El ejercicio no ha ayudado para poder sacarme a Nicole de la cabeza, mucho menos para poder bajar esta jodida ereccion que me está molestando desde que me levanté. Tan solo el pensar en ella, en su deliciosa inocencia me pongo duro inmediatamente.
Jodida mierda. ¿En qué me había metido? ¿Porque esta pequeña logra afectarme mucho? Me nubla el juicio y no sé cómo actuar con ella. Es tan impredecible que me tiene al pendiente de cómo reaccionará ante un suceso. Es frustrante pero también algo nuevo.
Si no hubiese sido por aquella maldita fiesta a la que no quería asistir no tuviera buenas sesiones de sexo con ella, a veces desearía que ella no hubiese ido a mi oficina con esos pequeños shorts y esa blusa, tan relajada y tan ella como siempre.
Y yo no había podido controlar mis ganas y deseo que tenía que de estar con ella que le ofrecí ser mi amante sin siquiera ponérmelo a pensar, logre que dijera que sí cuando casi follamos en medio de mi oficina, sobre mi escritorio en donde acababa de follarme a Laura. Era un maldito por hacerlo, debió ser una humillación para ella. Pero ¡Demonios! Quería que aceptara a ser mi amante que no me quedo nada más que ordenarle presentarse en mi oficina. Dios me ama ya que ese tono mandón que siempre uso duele funcionar con toda la gente, excepto con Nicole, ella suele retarme todo el tiempo que debo estar alerta. Me ha sacado de mi zona de confort.
Para un hombre al que está acostumbrado a hacer lo que le pegue su jodida gana Nicole es su completo karma.
Cuando logre investigarla y saber quién era me di cuenta que es la hija del hombre al que estoy a punto de dejar en la ruina. Pobre, la cara que puso cuando se enteró de que sus padres no le estaban diciendo todo, me sentí mal por ello pero quizá habían hecho todo un plan para tomar un poco de ventaja y llevar a cabo la venganza que tanto prometieron, era algo de lo que ya me estaba haciendo cargo. Esa familia tenía que pagar por todo el daño causado, en especial para una persona. Les llevo en ventaja; estoy follandome a su única hija, debe importarle a ese cabrón de Michael Flores. Si su hija supiera todo lo que ha hecho le daría asco ser hija de un hombre como él, quizá les estoy haciendo un favor y el único beneficiado de todo ello soy yo.
Y todo surgió después de saber quién era. Y aunque mis sentimientos o mis ideas son contradictorias ahora: tengo ganas de arrancarle la ropa siempre que la veo, sostenerla sobre algún lugar y follarla hasta que me ruegue porque pare, pero también quiero que pague, quiero que sea quien me lleva a lo que tanto estoy buscando.
Quizá sea muy inmaduro, pero Ella, el daño que le hicieron a ella, es irreversible y el daño colateral que causaron a todos los demás.
No niego que Nicole es una preciosura de mujer, una pequeña joyita a la que siempre quieres proteger y a veces me ganan mis instintos de hombre y quiero hacerlo, pero debo recordarme los motivos por los que decidí estar con ella. Quiero creer que aún es por llevar ventaja con los Flores. Pero todo comenzaba a ser una mierda. Le necesitaba como un jodido loco, quería estar entre sus piernas y perderme dentro de ella hasta que me cansara y ella hubiese gritado mi nombre varias veces en un largo muy largo periodo de tiempo.De acuerdo, esto tampoco me está ayudando.
Me remuevo y acomodo mis pantalones deportivos. Seco el sudor que corre por mi cara y decido qué es hora de darme una ducha. Espero que este gran problema entre mis piernas disminuya con una buena ducha de agua fría -muy fría- .
Una hora después estoy llegando a mi oficina, Rosie me tiene lista mi taza de café del día y el trabajo que hay por hacer, tomo los papeles con una de mis manos y con la otra estoy sosteniendo mi café