Capítulo 39 (Olivia Benson)

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Les aviso que me van a odiar y amar en este capítulo :v

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―...te amo.

Esas palabras que acabo de escuchar, al entrar al sanitario de hombres, me han desgarrado el alma por completo. Elliot no pudo haber dicho eso. Ese no es Elliot.

Cuando él me ve entrar me mira anonado, confundido, sin saber qué hacer. Kathy me mira victoriosa. Siento como las lágrimas comienzan a brotar de mis ojos mientras mi alma se rompe igual o peor que cuando Elliot se fue. De pronto, todos mis sentimientos hacia él entran en una revolución y comienzo a odiar a Elliot. Lo detesto igual que cuando se fue, igual que cuando no estuvo para mí cuando Lewis llegó a mi vida. Me limpio las lágrimas con el dorso de la mano. Él da un paso hacia mí, yo retrocedo.

―Liv...

―¡Aléjate de mí!―le grito.

―Por favor, Liv, déjame...

―Soy Teniente Olivia Benson para ti―lo miro severamente.

―No es lo que parece―da otro paso hacia mí, esta vez no retrocedo. El coraje que siento arde como fuego en mi interior.

―Te escuché claramente decirle a tu ex que la amas―mi voz se quebrantó. No puedo aguantar más, no puedo seguir fingiendo ser la fuerte.

―Yo no dije eso.

―Te escuché, Stabler.

―Tienes mucha razón, Olivia, él me ama, siempre lo ha hecho―dice Kathy acercándose a Elliot, después lo abraza. Elliot se libera del abrazo rápidamente.

―¡Yo no te amo!―le grita él a ella.

―¡Te escuché, Elliot!―comienzo a llorar, no puedo contenerme― No sé cómo pude confiar en ti, volver a confiar en ti. No sé cómo te haces llamar padre de mis hijos si eres un estúpido, mentiroso y, una persona asquerosa y detestable. Qué gusto me da no haber metilo tus papeles para el examen de sargento―"no sé cómo puedo estar esperando un hijo tuyo".

―Olivia, por favor, escúchame en este momento.

―No tengo oídos para personas detestables como tú. Me llevo a mis hijos.

―Olivia...

―¡Cállate!―lo interrumpo.

Salgo a toda velocidad del sanitario de varones y voy hacia mi mesa donde duermen Danielle y Noah. A él no lo despierto, despierto a Danielle, quien me mira con ojos somnolientos y confundidos. Yo dirijo una mirada rápida en la dirección en que están los sanitarios para verificar que Elliot no viene hacia nosotros mientras cargo a Noah, y para mi suerte, así es. Que él se quede con su Kathy, no me interesa lo que él haga ahora.

―Levántate, Danielle, tenemos que irnos―digo sacudiéndola un poco.

―¿Ya?―pregunta después de un bostezo.

―Ya, apúrate.

―¿Y Elliot?

―Se queda, no volverá.

―¿Por qué?―Danielle se ha despertado completamente al escuchar que Elliot no volverá a nuestras vidas.

―Porque sí, ahora vámonos. No podemos quedarnos ni un segundo más.

Viviendo con los BensonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora