Capítulo 4 (Elliot Stabler)

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Vacaciones en Los Angéles, disfrutando de un buen partido de béisbol de los Dodgers contra los Cubs de Chicago. He venido a visitar a mis hijos y a Kathy, aunque ya no hay nada entre nosotros. Sólo existe una relación diplomática por nuestros hijos.

Mientras el Titán corre por las bases después de haber bateado un cuadrangular con bases llenas, mi celular comienza a sonar. Es un número que no conozco, pero como tiene lada de Nueva York decido contestar.

―Diga―contesté.

―¿Elliot?―dijo una voz femenina conocida, que es muy dura, pero es capaz de ser dulce a la vez.

Se me paró el corazón, era la voz de mi vieja compañera de trabajo, de quien creí estar enamorado una vez. La voz de Olivia hizo que me revolviera en el asiento del estadio. Mis hijos me miraron arqueando las cejas.

―¿Olivia?―contesté con una sonrisa en el rostro como si ella me estuviera viendo.

―Hola Elliot.

―¡Qué gusto me da hablar contigo después de unos cuatro años!

―A mí también, compañero.

―Dime, Liv, ¿a qué se debe tu llamada?

―Ha ocurrido un homicidio en tu departamento, bueno un homicidio y un suicidio.

―¿Qué?―grité sorprendido.

―Así es Elliot, necesito que vengas a la estación.

―Buscaré el vuelo que salga más pronto hacia Nueva York.

―¿Dónde estás?

―En un partido de béisbol en Los Ángeles con mis hijos.

―¿Sigues con Kathy?―noté un poco de desilusión en la voz de Olivia.

―Te cuento cuando te vea en la estación, me voy al aeropuerto ahora mismo.

Colgué y vi a mi familia. Tenía todos los ojos de mi familia encima de mí. Kathy sólo me miraba arqueando las cejas. Tenía que ir rápido a Nueva York, por mi departamento, por la escena del crimen, por Olivia. ¡No! No puedo permitirme pensar así en Olivia.

―Tengo que irme chicos, lo siento―dije alzando los hombros por la vergüenza de tener que irme.

―¿Volverás pronto?―me pregunto Maureen.

―Sí, lo prometo―dije y me despedí rápidamente de mis hijos y de Kathy.

Fui a mi hotel a recoger mis cosas. No podía dejar de pensar en que vería a mis viejos compañeros de trabajo y a Olivia. Saqué mi celular y guardé el número de donde llamó Olivia, poniendo una linda foto de ella conmigo en el contacto. Espero que sea el número de su celular. Dejé la habitación del hotel y pedí un taxi para ir al aeropuerto.

Mientras iba en el taxi, movía mucho las piernas. No sé si sean la emoción o los nervios de volver a ver a Olivia. ¿Habrá cambiado? ¿Tendrá novio? ¿Se habrá casado? Necesitaba saberlo.

Para mi mala suerte, el siguiente vuelo a Nueva York estaba lleno, así que tendría que esperar siete horas para el siguiente. No tenía nada que hacer, así que fui a recorrer el aeropuerto.

¿Qué sentirá Olivia de volver a verme? Miré mi atuendo. Un jersey de los Dodgers, una gorra de los Cubs, vaqueros y unos tenis. "Perfecto para ver a Olivia" pensé con sarcasmo.

Después de recorrer el aeropuerto (lo que podía), comer y rentar una sala de descanso, por fin llegó la hora de mi vuelo.


Discúlpenme porque el capítulo está muy corto, fue lo único que se me ocurrió :(

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Gracias por leer :3

Viviendo con los BensonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora