Abrí la puerta de su habitación lentamente esperando encontrarlo ahí y me relajé al verlo tendido sobre su cama.
-Harry, ¿Podemos hablar?- Mi voz sonaba como una anticipada disculpa.
-¿Hablar de como me diste un discurso de la moral por lo que estaba haciendo, cuando tu estabas haciendo lo mismo?- Su voz hizo que toda mi espina dorsal se estremeciera. Sabía que estaba enojado y yo tenía que mantener mi compostura si quería que me escuchara.
-Lamento que te enteraras así.- Sus ojos seguían perdidos en cualquier otro lugar de su habitación.
-¿Cuando fue esto?- Disparó enojado.
-El día que llegaste al pub.- Respondí al instante. El músculo de su mandíbula se tensó con tanta fuerza que temí por ella. –Pero no es lo que imaginas.-
-¿Me estoy imaginando entonces que justo antes que te llamé mi novia te estabas besuqueando con otro hombre?- Se sentó poniendo los pies en el suelo y sus ojos se posaron por primera vez en los míos, con tanta oscuridad que sentí como se apretujaba mi corazón hasta el punto de correr a esconderse a mi garganta.
-Sí.- Le respondí solemne. Sus ojos cedieron un momento, pero solo un momento para volver a ser fríos como un glaciar. –Deja explicarte, estoy segura que en tu cabeza es mil veces peor de lo que realmente fue.-
Pude ver como había adivinado sus pensamientos, me asintió enojado una vez para que continuara.
Me acerqué a él y me senté a su lado intentando calmar el ritmo de mi corazón que batía solo para que mi estomago se batiera con él por los nervios que sentía en esos momentos.
"Si hago esto mal, todo se puede ir a la mierda, no puedo dejar que eso pase. No ahora."Llené mis pulmones con aire para luego soltar todo de una vez.
-Ese día me junté con Ana en el pub por unas copas, comenzó a hablar de ti, y no quería pensar en ti, no quería que Ana me hiciera preguntas que me recordaran a ti, quería beber con mi amiga y despedir la ultima noche que tenía en la ciudad...- Hablaba rápido, para que Harry no tuviese la oportunidad de interrumpirme, mirando mis zapatos para no desconcentrarme al sentir lo enojado que estaba. -...En un momento fui al baño y cuando volví, Ana se había acercado a dos hombres, y me dejó bastante claro que quería que algo pasara entre ella y uno de ellos, así que no tuve más opción que hablar con Tom. Sí, se llama Tom. Hablamos arto, y en un momento me preguntó si podía besarme...- El rostro de Harry se giró en dirección contraria de la mía exhalando furibundo.
- ...Pero mi mente se fue hacia ti. Hacia tus ojos, hacia tus labios. Y no quería Harry, no quería que aparecieras en mi cabeza con la frecuencia con la que salías. Así que sin pensarlo le dije que sí...- Harry pasó su mano por su pelo frustrado, dejando escapar un gruñido.
-...Pero no pude.-
Su cabeza giró en mi dirección y esos ojos esmerarla me miraron sorprendidos, y me dio la fuerza necesaria para mirarlo de vuelta. –Me retracté en el ultimo segundo. Lo sé, debí habértelo contado esa misma noche, pero no creí que fuese importante, porque nada había pasado.- Ahora su rostro se dividía entre el enojo y la confusión. Continué.
-No pude hacerlo Harry, tienes que creerme. Cuando comenzó a acercarse, que es la fotografía que te enviaron, sus labios estaban casi en los míos pero no pude, no pude porque no podía dejar de verte a ti, no podía dejar de imaginarme tus labios. Y me di cuenta que, además de no poder besarlo... No quería, no quería besar otros labios que no fueran los tuyos, y te odié, te odié porque tu imagen no dejaba de aparecer en mi cabeza, tanto, que en ese momento sentí que me arruinaste para cualquier otro hombre que quisiera besarme en el futuro, porque no serías tu. Nada pasó, tienes que creerme.- Tomé un respiro gigante para volver a llenar mi pulmones. Harry no dejaba de mirarme, pero ahora todo dejo de enojo se había disipado.
-Te creo.- Dijo al fin con un gran suspiro.
No había notado que una lagrima había corrido por mi mejilla hasta que la secó con su pulgar mientras su mano acunaba mi mejilla. –Te creo bebé, no llores.--Lo lamento mucho, de verdad, debí habértelo dicho esa misma noche.- Harry me acarició suavemente el cabello mientras negaba con la cabeza.
-No te preocupes, tenías razón, en mi cabeza era mil veces peor, e imaginarte con otro hombre hizo que reaccionara peor de lo que hubiese querido.-
-Me gusta que admitas que actuaste un poco irracional.- Le dije con una sonrisa a penas. Su rostro cambió y lo noté al instante.
-Me gusta que te haya arruinado para otros hombres.- Me sonrió divertido.
-Eres un maldito...- Pero su mano acercó mi cabeza para posar sus labios en los míos haciéndome callar. Le respondí el beso feliz y ahora sin la culpa que me carcomía desde que vi esas grotescas fotos.
-¿Haz pensado que harás con esa persona que te envía mensajes?- Le dije alejándome unos centímetros después de nuestro beso. -No quiero que el día de mañana aparezca un mensaje nuevo en tu celular diciendo que me acosté con la mitad de Londres.- Harry levantó una ceja. –Porque sí, lo hice, pero tiene que salir de mi boca y no por un mensaje de un extraño, digo, entre verte a ti, pasear por la ciudad y cambiarme cada dos días de hostal, acostarse con la mitad de Londres fue un logro tan grande que debo ser yo la que lo cuente.- Dije divertida.
-Ja ja ja, me matas de la risa pequeña.- Me dijo mientras me daba un abrazo apretado haciendo que nuestros cuerpos se recostaran en la cama. Mis ojos buscaron los suyos aun esperando mi respuesta.
-Creo que me cambiaré de numero al llegar a Londres.-
-¿Haz intentado escribirle de vuelta?-
-No me rebajaré a su nivel amor.- La incertidumbre que sentía en esos momentos no fue lo suficiente como para ignorar el hecho que esa ultima palabra me desarmó y me armó en cuestión de segundos. –Ignoraremos esos estúpidos mensajes hasta que tenga un nuevo numero, no dejaremos que nos arruine el poco tiempo que nos queda.- Harry me dio un beso en la cien para tranquilizarme.
Y lo consiguió, como siempre lo hacía. Me tranquilizó hasta la médula.

ESTÁS LEYENDO
All The Love (Harry Styles)
FanfictionEran sólo 9 horas de viaje para comenzar las vacaciones de Carolina. 9 horas en un avión común y corriente, con un perfecto extraño a su lado. Nada fuera de lo normal. Pero ¿Qué pasaría si ese perfecto extraño sentado a su lado es Harry Styles?