Destino 《EDITANDO》

Capítulo XLII

Y hasta aquí llegamos...

Lloramos juntos cuando tuvimos a nuestro hijo en nuestras manos, no pudimos evitar hacerlo. Estamos completos, así nos sentíamos, así me sentía con Ian a mi lado, con Dallan en nuestro brazos.

Cuando mi familia entro a verme no pude evitar llorar junto Lucas, por primera vez en mi vida veía llorar a mi hermano, a ese que me había demostrado que es una roca, y que nadie lo podía romper. Es la primera vez que lo vi llorando por algo que no fuera la muerte de mi amiga y mi abuela.

Le he puesto Dallan a mi bebé porque quería que llevara algo de ella, es un nombre precioso y tiene su inicial. Ahora mismo he perdido la cuenta de las veces que le he dado gracias a dios, al mundo, al cielo por darme esta hermosa bendición. No tenía palabras para expresar lo agradecida que estoy.

Días mas tarde los padres de Daniela vinieron de visita para ver a mi hijo; tampoco pude evitar llorar. Es decir, creo que nunca iba a evitar llorar cuando se le recordara a ella y a mi abuela, pero sobre todo a ella. Porque mi abuela ya había vivido la vida, pero ella... ella empezaba a vivirla.

La fundación la deje a cargo de mi madre y de Lara. No fue hasta que mi hijo cumplió un año que decidí volver a regañadientes. Sentía que tenía que cumplir con ambas responsabilidades, pero es tan difícil separarte de una personita que amas tanto.

Para este momento nuestra fundación es una de las mas importantes de la cuidad y del país, ya que hemos podido abrir las tres sucursales. Ian, Lucas y mi padre están tan orgullosos de nosotras... es decir, nunca supimos que íbamos a tener tan buen recibimiento. Pero todo lo hacemos por esos pequeños que necesitan ayudan.

Jeremías se ha graduado como medico, como no es raro; nuestro padre se había opuesto a que estudiase esa carrera, pero cuando vio la cara de enojados de todos no le quedo más que ceder. El quería que estudiase para abogado. Mi hermano menor ha sido muy exitoso en este campo, ha montado su propia clínica y le va muy bien como cirujano plástico, cuando se especializo le dije que se haría multimillonario con esa carrera, ya se imaginaran porque.

Logan, el hermano me Ian empezó a salir hace un año con una chica maravillosa, ahora mismo están a punto de casarse.

Lucas, bueno... a el no lo entiendo mucho. ¿Recuerdan a la mensajera pelirroja? No lo se, creo que pasa algo entre ellos, pero no puedo asegurar nada. Mi hermano es tan difícil que a veces creo que va a terminar solo, algo que me entristece mucho. La perdida de Daniela parece afectarle mucho aun. Jeremías me ha comentado que parece ser que esta yendo con un especialista, con un psicólogo; ya que vio algunas cosas en su Penthouse.

Mis padre siguen juntos, a pesar de que mi madre lo contradice mas seguido ahora; el ha cedido un poco y esta un poco mas maleable, por así decirlo. Mamá por otra parte es tan distinta a lo que era antes, creo que estar en la fundación la ha ayudado a ser más humilde con el mundo.

Nuestras vidas han dado un giro de ciento ochenta grados, en todos los sentidos. Si hace cinco años atrás me habrían dicho que todo esto seria así, los hubiese llamado locos a todos. Pero creo que se trata de eso, de las personas que llegan a cambiar tu vida para bien, Daniela y Ian nos cambiaron a todos por completo. Nuestra lucha por seguir juntos les hizo saber a varios que no teníamos un capricho de adolescentes, que no era solo un momento de rebeldía de mi parte. que lo amo de verdad. Ahora todos somos una sola familia.

Con respecto a Jordán, fue algo muy difícil de arreglar. Creo que fue la última y la más fuerte discusión que he tenido con Ian y mi familia, nadie quería perdonarlo por lo que había pasado, nadie excepto yo; algo en mí me gritaba que decía la verdad, además, todos necesitamos segundas oportunidades:

—Invitémoslo a cenar a el y a su familia. —Digo, Ian puso los ojos en blanco y se levanto de golpe dejando de lado el periódico que leía.

—No, ni de coña va a entrar a mi casa donde estas tu y mi hijo. —Camino a su despacho por lo que tuve que seguirlo.

—Amor, por dios. Todos nos podemos equivocar. Vamos a darle la oportunidad.

— ¿Equivocar, Alana? ¿Y si tu hubieses muerto ese día? ¿Te has preguntado que seria de mi vida ahora mismo? —Caminaba de un lado a otro enojado —Ok, su familia estaba en peligro, pero, ¿No pensó en lo que podía pasarte a ti? ¿Por qué no me hablo a mí? Yo podía haberlo ayudado. Sabia que ellos iban a matarte después del rescate, no podían dejarte viva porque después ibas hablar. ¡Y una mierda! ¡No lo quiero en mi casa, ni cerca de ti, ni de mi hijo! —Sentencio.

No tenia mas nada que decir, porque; ¿Qué iba a decir? También lo entendía a el, entendía la preocupación de mi esposo, si volvían amenazar a su familia, ¿Lo haría de nuevo?

Solté un suspiro entrecortado, y me resigne. Iba a emprender mi camino de nuevo al cuarto de mi hijo cuando agrego:

—Si te hace sentir mejor, déjame decirte que lo estoy ayudando, a el y a su familia. Le estoy pagando una universidad privada para que termine su carrera de derecho, a su hermana le pago uno de los mejores colegios y a su madre la tengo como gerente un uno de nuestros supermercados. — Lo escuche soltar un suspiro. No me voltee a verlo pero emboce una sonrisa y salí de allí.

¿Ven a lo que me refiero? Tengo al mejor hombre del mundo a mi lado. Y si, Logan y Ian tienen una red de supermercados en todo el país, forma parte de sus empresas en conjunto.

~*~

— ¡Mamá, voy a llegar tarde! ¿Dónde esta papá? —Grita Dallan desde la planta baja. Tomo los primeros tacones que encuentro y los engancho en mis pies para bajar.

—Tu mamá es la que se demora, ya yo estoy listo —Dice Ian apareciendo por la cocina.

Dallan tiene cinco años, y ahora mismo vamos tarde a la final de su campeonato de futbol. Mi esposo, siempre me culpa de todo.

—Solo apúrate, papá. Si fuera mi abuelo ya estuviéramos en el campeonato —Sonrió, siempre dice eso para molestar a su padre. Ian se pone celoso cuando su hijo dice cosas buenas de su abuelo Aarón.

—Por favor, ya ni puede ver. Deberían quitarle la licencia de conducir.

Trepamos al auto y salimos. Mi esposo conduce y yo voy a su lado. Vuelvo la mirada para ver a mi pequeño hijo ajustando sus tacos, muerde sus labios y tiene el ceño fruncido. Siempre que esta nervioso muerde sus labios. Observo a mi esposo y cuando nota que lo hago me regala una sonrisa y toma mi mano para entrelazarla con la suya.

—Por favor, no se pongan cariñosos frente a mí. Es asqueroso. —Sonreímos cuando lo vemos rodar los ojos y dirigir la mirada a todos lados menos a nosotros.

Dallan es un niño muy inteligente, demasiado para su edad. Es calculador, exigente y perfeccionista. Creo que eso lo saco a su abuelo, Ian no es así, claro que no se lo digo, porque se enojaría, el dice que su hijo saco todo de el. Es el capitán del equipo de futbol donde están y han llegado a la final, se que si no gana hoy... dios, pasara tres días o mas amargado.

Cuando llegamos a cancha lo vimos calentar, lo observamos jugar y también ganar. Tres a uno a favor de ellos y uno de esos goles lo metió mi bebé. No pude evitar soltar unas lágrimas cuando lo vi sonreír y levantar su gran trofeo. soy una llorona, lo se.

¿Qué más podía pedirle a la vida?

Todo lo malo que pase había valido la pena, los conflictos con mi familia por estar con el hombre que aplaudía como foca a mi lado a su hijo. No cambiaría nada de mi relación, de mi familia y de mi vida... bueno, ya saben lo que cambiaría. Ese fatal accidente lo borraría, lo evitaría. Pero sabemos que no puedo hacer eso, nadie lo puede hacer.

El abrazo de Ian me saca de mis pensamientos, me toma de la mano para llevarme al campo, cuando Dallan nos ve corre a nosotros para arroparlo en abrazos y besos.

Amo cada parte de lo que tengo, de lo que poseo, y no me refiero a lo material; hablo de las personas y de la estabilidad que tengo con cada una de ellas, lo feliz que me siento a su lado y cada día que pasa le agradezco a la vida por este hermoso regalo.

«Mi familia»

...

Gracias por leerme <3

—Essa Garcia <3