Al día siguiente que llegué a psicología Kyler ya estaba ahí.
Estaba serio y parecía algo...molesto.
Me senté a su lado con cuidado, dejando mi bolso sobre la mesa.
—Hola. —saludé.
—Hola. —respondió cortante. Abrí la boca queriéndome disculpar por lo de ayer pero en eso entró la maestra.
La clase transcurrió de los más aburrida y no podía evitar sentir como Kyler estaba ahí, molesto conmigo.
Suspiré pesadamente cuando la clase por fin terminó. Kyler tomó sus cosas y salió dejándome atrás. Fui tras él, bajé las escaleras y salimos al campus fuera de los edificios.
—Kyler. —lo llamé, pero no se detuvo. Corrí para alcanzarlo y tomé su mano. Poco a poco se detuvo, así que me detuve frente a él—. ¿Qué pasa? ¿Por qué estas molesto conmigo?
—¿Por qué estoy molesto? —habló en tono claramente enojado—. ¿Qué quieres que haga? ¿Qué te aplauda mientras tú le mientes a tu noviecito?
—¿Qué? ¿Qué esperabas que hiciera? —cuestioné—. No le podía decir la verdad.
—¿No podías o no querías?
—Eso no importa.
—¡Joder, Hayley, claro que importa! —elevó la voz—. A ti lo único que te interesa es que el inútil de Daniel no se enoje contigo.
—¿Qué? No, no es eso.
—Entonces, ¿por qué no le dijiste que las rosas te las había dado yo?
Me miraba fijamente, como desafiándome. Podía ver el malestar en sus ojos y creo que tenia razón de estar molesto.
—No quiero que te metas en problemas. —susurré.
—¿Ahora te preocupas por mí? —espetó incrédulo y algo burlón.
—¡Siempre lo he hecho, aunque seas un idiota conmigo! —hablé más fuerte—. ¿Por qué te molesta tanto esto? Sabes que estoy con Daniel.
—¿Quieres saber porque me molesta? —se acercó en dos zancadas y me tomó por los brazos obligándome a verlo—. Me molesta porque te quiero, joder, te quiero tanto que con tan sólo verte cerca de él me dan ganas de golpearlo y mandarlo a la luna.
Se alejó y me miró en silencio, pasó una mano por su cabello frustrado.
—¿Qué pasa aquí? —Daniel se detuvo a mi lado, mirando entre Kyler y yo.
—Yo...—miré nerviosa a Kyler.
—¿Quieres saber lo que pasa? —le dijo Kyler a Daniel—. Te lo diré. Pasa que estoy enamorado de Hayley, y me caga verla contigo. Ayer, las rosas no eran de Skyler, eran suyas. Yo se las di.
Daniel me miró sorprendido.
—No te lo dijo —continuó Kyler—. Porque no quiere que te enojes con ella y toda esa mierda, sólo te digo algo Daniel, estoy haciendo todo lo posible por conquistarla y no voy a parar hasta conseguirlo.
—¿Eso es cierto? —me preguntó Daniel, pero no me atreví a verlo de la culpa que sentía. Él tomó mi muñeca y me obligó a verlo—. ¡Contesta!
—¡No la toques! —gruñó Kyler empujando a Daniel haciendo que soltara mi muñeca. Daniel retrocedió pero luego se acercó a la defensiva queriendo retar a Kyler.
—¿Y si no qué? —lo desafió Daniel.
Kyler volvió a gruñir y quiso abalanzarce sobre Daniel pero me interpuse en su camino. Coloqué mis manos sobre el pecho de Kyler, deteniéndolo.
—Kyler, por favor, vete.
—¡¿Qué?! —espetó sobresaltado. Levanté la vista encontrando su mirada.
—Vete —susurré.
—¡¿Lo estas prefiriendo a él?!
Negué. —No, sólo...
Se alejó de mí y pasó ambas manos por su cabello y cuello.
—Sabes que, has lo que quieras.
—No, Kyler...
Me lanzó una mirada y luego miró a Daniel antes de dar media vuelta e irse.
Daniel se volvió hacia mí y me miró molesto.
—Daniel, yo...
—¿Lo que dijo es verdad?
—Daniel...
—¡Sólo responde la jodida pregunta!
—Sí, es verdad —sentí como mis ojos se llenaban de lágrimas—, Pero...
—Pero nada —me interrumpió— No sé como pude ser tan ingenuo, había visto la forma en él te mira y como tú lo miras, pero nunca lo creí.
—Daniel...—lágrimas empezaron a salir de mis ojos.
—Sabes, de verdad me gustabas porque creí que eras diferente, sincera, pero veo que no.
—No, Daniel...
—Se terminó, Hayley. No puedo competir con alguien que ya tiene tu corazón.
Dio media vuelta y se alejó de mí. Limpié mis lágrimas y di media vuelta chocando con alguien. Jake me tomó por los brazos para no dejarme caer.
—Jake. —susurré, y envolví mis brazos a su alrededor. Él me apretó y susurró:
—Tranquila, todo va a estar bien.
Me alejé y me encaminó a nuestro árbol.
Nos sentamos ambos contra el árbol y descansé mi cabeza en en hombro de Jake mientras lloraba.Lloraba por frustración, impotencia y enojo contra mí misma. Había perdido a dos grandes chicos sólo por no ser clara con mis sentimientos.
Y los había perdido en un momento. Y de una manera tan rápida que no parecía posible.
Cuando mi llanto cesó, levante la cabeza y miré la camisa empapada de Jake. Él también lo notó y sonreí melancólica.
—Lo siento. —susurré.
—No te preocupes. —se encogió de hombros—. Me gusta ser tu pañuelo personal.
Traté de sonreír.
—¿Quieres hablar? —me preguntó.
—Jake, de verdad, no quería que nada de esto pasara. —comencé—. Quiero a Kyler y también a Daniel, y por mi estupidez los he perdido a ambos. Kyler esta tan enojado conmigo, que a lo mejor no me quiere volver a ver en la vida y Daniel terminó conmigo.
—Oye, no seas tan dura contigo misma.
—Es que todo esto es mi culpa, Jake. Si desde el inicio hubiera puesto mis sentimientos en orden nada de esto hubiera pasado.
—Tranquila, mira, Kyler esta molesto pero ya se le pasará. Y bueno, Daniel...que le vaya bien.
Golpeé su hombro. —¡Oye!
—Todo va a estar bien, Hayley. Conozco a Kyler y sólo esta molesto, pero ya verás que se le pasará. Sólo dale tiempo.
Asentí y limpié mis lágrimas.
—Vas a tener que lavar mi camisa por mancharla de moco.
—Eres mi pañuelo personal y los pañuelos no se lavan, se desechan.
Jake abrió sus ojos.
—Bueno, así estoy bien.
Reí y envolví mis brazos sobre sus hombros.
—Gracias, Jake. —susurré—. Eres el mejor amigo de todos.
Besó mi cabello.
—Lo sé.
Sonreí, Jake siendo tan modesto.
ESTÁS LEYENDO
Something Of Love
RomanceDespués de la trágica perdida de sus padres, meses antes de entrar a la universidad, Hayley decide seguir adelante, sola. Ella nunca pensó que el día de su cumpleaños sería el día más horrible de su vida. Después de unos meses de depresión, decide s...