BETRAYAL

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Pasa una media hora hasta que todos los iniciados están reunidos abajo, en la sede Osadía.

Me dedico a analizarlos uno a uno con la mirada, como creando perfiles, y solo reacciono cuando uno de ellos habla en tono burlón.

- Cuatro, ¿ como el número ?

Alzo una ceja mirando a la veraz. Bocazas, como dice Eric.

- Que pasa, ¿ uno dos y tres estaban cogidos ?

Ay querida, no debiste decir eso.

Él suelta una risa, aunque sé que no de gracia.

- ¿ Y tú eres ?

- Christina - dice ella en voz aguda y juguetona.

Cuatro se acerca, poniéndose serio, y se acerca tanto a ella que su barbilla está a punto de tocar la cabeza de la chica ( él es bastante más alto).

- Bien, Christina. La primera lección que debes de aprender en Osadía, es cerrar la boca- espeta intimidante, y ella asiente tragando saliva asustada.

Los demás se miran entre sí con nerviosismo.

- ¿ Antes de enseñaros las instalaciones, alguna otra pregunta ?

Una mano se alza, del otro chico veraz, ese al que le hice la Prueba de Aptitud. Peter.

- ¿ Y ésta quien es ? - pregunta señalando la cabeza en mi dirección, escaneando mi cuerpo con la mirada.

Sonrío falsamente y me acerco hacia él. Algo me dice que no me caerá tan bien como su hermano mayor.

- Soy Elsie.

- Encantado. Bonito nombre, muy... dulce- bromea y escucho algunas risitas detrás de él.

Sin dejar de sonreír, en menos de un segundo, agarro su brazo y se lo retuerzo detrás de la espalda con todas mis fuerzas,ignorando sus gritos de dolor. No lo suelto hasta que cae al suelo y me lo suplica.

- Segunda lección, iniciados - me levanto y los veo mirarme con temor y sorpresa - No os metais con un osado, menos con un líder. Manteneos lejos de los problemas, y no os estorbarán. De lo contrario, acabareis como él - escupo mirándolo con asco, y dirigiéndole una última mirada a Tobias, que oculta una sonrisa divertida, salgo de la sala.

Tengo trabajo atrasado que hacer.