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Al día siguiente, la mayoría de las caras que veo tienen rasguños y cortes en la nariz, los labios, o las mejillas.

- ¿ Te parece si dejamos la lucha para otro día ? - le pregunto a Cuatro. No creo que si seguimos hoy duren mucho.

- Eric pareció pensar lo mismo. Vendrá hoy para el lanzamiento de cuchillos, lo mejor será que empiecen ya - contesta, y se pone las manos a modo de altavoz en la boca - ¡ Que cada iniciado coja tres cuchillos y se ponga delante de una diana !

Alzo los ojos al cielo para pedir ayuda a lo que sea que esté ahí arriba ; ¿ cómo es que ni siquiera pueden darle al borde de la diana ?

Suspiro aliviada al ver a Tris lanzar, al menos a ella se le da realmente bien.

Eric aparece por la puerta, y frunce el ceño al ver los lanzamientos.

Como yo, observa el fracaso estrepitoso de Al, solo que él planea una cosa distinta.

- ¿ Qué ha sido eso, iniciado ?

El chico se da la vuelta poniéndose pálido.

- Se me ha resbalado - se excusa, pero Eric no lo deja.

- ¡ Pues ve a cogerlo !

Le lanzo una mirada de advertencia, que él ignora, y se cruza de brazos viendo a los demás iniciados.

- ¿¡ Os he dicho que pareis de lanzar ?!

Al suelta un gemido ahogado y anda hacia la diana. Se coloca en el centro con seriedad, pero puedo ver que está muerto de miedo.

- Cuatro te lanzará los cuchillos. Si te mueves, te vas - ordena Eric con voz fría - Si cierras los ojos, te vas. Si hablas, te vas. ¿ Lo has entendido ?

El trasladado asiente tragando saliva, ocultando sus manos temblorosas en la espalda.

Cuatro me mira como pidiéndome ayuda, pero yo niego levemente con la cabeza. No puedo desafiar a Eric aquí,delante de todos.
Eso solo empeoraría las cosas.

Cuatro suspira y se lleva el cuchillo a la nuca, preparado para lanzarlo.

En el último momento, una voz detiene su brazo en el aire :

- ¡ Para !

Todos dejan de lanzar, y observamos a la abnegada.

- Esto es ridículo, ponerse delante de una diana no demuestra nada.

Eric suelta una risa sorprendido, y divertido, le desafía.

- Entonces no te importará ocupar su lugar.

Tris se muerde el labio nerviosa y sustituye a Al en la diana, aunque su cabeza llega a la altura de los hombros de la silueta.

Veo a Cuatro indeciso, y lo miro extrañada alzando una ceja. ¿ Porqué ahora y antes no ?

Después, su expresión se ensombrece y los cuatro cuchillos acaban clavados en la madera, muy cerca de Tris.

Ella se separa soltando la respiración, y se lleva la mano a la oreja llena de sangre. Sé que Cuatro lo ha hecho aposta, él no falla nunca.

- Ganas puntos por valentía, estirada- anuncia Eric, y después espeta señalándola- Pero no tantos como los que has perdido al abrir la boca.

Siento la necesidad de hablar, para endulzar un poco la cosa. El castigo de Eric ha sido excesivo, pero ella tampoco tiene la autoridad para cuestionarle.

- Los osados protegemos todas las vidas dentro de la valla y no podemos fallar- miro a Tris, que está atacando a mi novio con la mirada - Adiestramos soldados, no rebeldes. Ir a descansar.

Mientras los iniciados se largan entre cuchicheos, noto que Cuatro ralentiza su trabajo para poder hablar con Tris, así que aprovecho y salgo en busca de Eric, antes de que se me escape.

Después de comprobar que el pasillo está vacío, lo agarro del hombro y lo estampo contra la pared.

- ¿ Pero a ti que diablos te pasa ? ¿ Es que quieres matar a alguno de los transferidos ? Hay mejores formas de hacerles saber lo que deben hacer.

En cuestión de segundos, los roles se han invertido ; ahora soy yo la que está acorralada.

Trato de soltarme incómoda, la pared está fría.

- No me cuestiones, Ross - replica enfurecido, acercándose a mi cara, quedando solo a unos centímetros - No siempre se puede ser tan blando como tu noviecito.

Respiro entrecortadamente, no sé si por su frío tono de voz, o por su cercanía.

Él baja sus ojos a mis labios, y cuando me quiero dar cuenta, estoy sola.

¿ Qué acaba de pasar ?

BETRAYALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora