Capítulo 36

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Jane me mira con todos los sentimientos mezclados.

-¿Eso es cierto Calum?- Me pregunta con la billis en la garganta.

-No es lo que crees- Digo sintiendo mi mundo derrumbarse.

-¿Hiciste una apuesta por acostarte conmigo sí o no?- Dice cada vez más furiosa pero con una tristeza inmensa.

-T-t-te lo iba a decir- Digo.

Alice sólo nos miraba más que complacida por lo que acababa de hacer. Comienza a caminar fuera de la cara, juro que hasta pude oír un grito de felicidad afuera de la casa.

-No puedo creer lo que hiciste- Dice Jane llena de rabia y con lágrimas bajando por su cara.

-Puedo explicarlo- Digo tratando de acercarme a ella, pero se aparta.

-¿¡Qué me vas a explicar!? ¿Que hiciste una apuesta por acostarte conmigo? Realmente no puedo creer que confié en ti- Se ríe  sarcásticamente- Claro. ¿Cómo no me di cuenta? Eso de haberte acercado de la nada a mí, insistir e insistir... Dios pero que idiota e ingenua he sido.

-Jane por favor dejam...- Recibo una cachetada de su parte.

-No quiero que me expliques nada, ya todo está dicho y hecho.

Se va corriendo al cuarto y cierra con llave antes de que pueda entrar con ella. Oigo como empaca su ropa en la única maleta que tiene. 

-Jane abre y hablemos por favor- Digo de la manera más suplicante y desesperada que he hecho alguna vez.

Logro oír como rompe un marco de una foto de nosotros que tenemos en la mesita de noche, lo que hace que me rompa más.

Abre bruscamente la puerta, ya está cambiada y con las mejillas empapada de lágrimas y a la vez ojos que escupían fuego. Corre al cuarto de Sebas y Tere y cierra la puerta. Impotente, simplemente espero a que salga del cuarto. Cuando lo hace corre escaleras abajo y la sigo. Cuando sale por la puerta le agarro del brazo evitando que siga caminando.

-Suéltame- Me dice llena de odio.

-Jane déjame explicarte- Le digo más desesperado que nunca.

-No necesito más de ti y más mentiras. Ya me quedó más claro que el agua que tú sólo quisiste jugar conmigo y nunca importé. Te valió todo lo que te conté. Jugaste conmigo y eso nunca te lo voy a perdonar.

Me pega directamente donde más duele y sube a su motocicleta. Amarra rápido la maleta como puede en la parte trasera de la moto. Se sube y arranca.

Veo cómo se larga de mí, de mis brazos, y de mi vida. Me siento como un muñeco sin vida ahora mismo. No debí hacer esa apuesta, debí frenarla cuando pude, debí decírselo en vez de dejarme llevar por la lujuria. Entro a la casa lentamente. ¿Por qué lo hiciste Calum? ¿Por qué dejaste que la persona que te trae loco se fuera? ¿Por qué no acabaste con esto antes de que fuera demasiado tarde? ¿Por qué siempre la cagas?

Acabo de perder a Jane y no podré perdonarme por eso.

[...]

NARRA ALICE:

Salgo de la casa viendo como Jane se desmorona poco a poco. Me río afuera. Ya era hora de hacer justicia. Camino hasta el auto, en el cual me subo.

-¿Y que tal?- Dice Michael.

-Jane está destruida.

Ambos sonreímos  maliciosamente.

-Te dije que esperaras- Dice Michael sonriendo satisfecho.

-Y tenías razón, sólo debiste verle la carita de corazón roto- Nos reímos a carcajadas.

-Te dije que mantenerlos vigilados era una buena solución.

-Y sí eh, ya que las cámaras que pusimos lograron captar cada paso, entonces ahora pude llegar en el momento justo.

-Además de deleitarte con tus fantasías con Hood.

Le pego en el hombro y se carcajea.

-Cállate que a ti se te nota tu erección con Foster.

-Para qué negarlo, la quiero tener debajo de mi gritando: Ay Michael!- Dice gimiendo lo último.

-Cierra la boca, ya tuve mucho oyendo sus gemidos de gato- Digo con fastidio.

-Sin duda hermosos- Dice riéndose de mi cara.

-Bueno ya cállate. 

Ahí es cuando vemos a Jane saliendo de la casa con una maleta. 

-Ya era hora- Dice Michael sonriendo.

-Auch- Decimos a la vez cuando vemos la patada tan fea que ella le da a Calum justo en eses punto.

Al irse, esperamos que Calum se meta dentro de la casa para poder irnos.

-Espero que eso haya sido suficiente- Dice Michael.

-Ojalá.

Jane Foster, quien diría que Calum se enamorara de ella, sin embargo, nadie dijo que eso no podía ser como el papel: fácil de romper.

Losing It All | EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora