Mirame, ¿por qué no me quieres?

Un, dos, tres cámara y acción.

Eran las seis y media de la mañana el despertador empezó a sonar, pero yo ya estaba despierta desde hacía un buen rato. No podía parar de dar vueltas en la cama, estaba muy nerviosa, así que me levanté y me fui a correr para intentar relajarme. Volví a casa a las siete y cuarto, me metí en la ducha y me arreglé, cuando estaba acabando empezó a sonar mi teléfono.

- Estoy abajo.- Era David.

-Ahora bajo.- Cogí el bolso y bajé.

- Buenos días.- Le di un beso.

- Buenos días. ¿Preparada?

- Si, o eso creo.- Me reí.

Llegamos al estudio. David se fue a hablar con... no se supongo que sería el fotógrafo.

- Gis, ven.- Me acerqué a David.- Mira Gis, él es Richard, es el fotógrafo.

- Hola encantada.- Puse mi mejor sonrisa.

- Muy guapa.- Dijo el fotógrafo.- Tienes unos ojos muy bonitos.- Se acercó y me dio dos besos. Cuando me quise dar cuanta había otro chico al lado de Richard.- Él es Hector es mi pareja y el maquillador de esta sesión.

- Así que tu eres la famosa Giselle. David me ha hablado mucho de ti.

- Verás, conozco a Hector desde que teníamos 8 años.- Me dejo David.

- Es cierto y nunca me había hablado de una chica, eres de la primera que me habla.- Me puse roja, si yo ya tenía un lío en la cabeza solo me faltaba eso.- Ven conmigo, tenemos que peinarte y maquillarte.¿Empezamos por el rojo? ¿Richy?

- ¡Eh! Si por el rojo.- Se empezaron a reír yo no entendía nada.

- Ok. Vamos ¿Giselle?

- Mi nombre es Giselle pero me llaman Gis.

- Pues entonces no se hable más, ¿vamos Gis?- Le sonreí.

Hector me agarró por la cintura y me metió en el set de maquillaje. Me senté en un tocador y empezó a maquillarme, mientras lo hacía estuvimos hablando, la verdad es que me caían muy bien los dos. Cuando acabó de maquillarme parecía otra, yo no me maquillaba mucho, un poco de gloss y rímel y listo, él había enmarcado mis ojos azules, convirtiendo mi mirada en una mirada mas intensa.

- Preciosa. Ahora vamos con esta melena. Que largo tienes el pelo, me encanta.- Soltó una risilla y yo también me reí.

Empezó a recogerme el pelo, para mi sorpresa no tardó mucho en quince minutos tenía un recogido hecho. Hector trajo el primen vestido, era rojo con cola de sirena, tenía un toque muy español aquel vestido, a mi me recordaba a un traje de gitana, era muy bonito.

- Te queda perfecto.- Dijo Richard que se asomó.

- Gracias.

- ¿Ya está?

- Faltan los zapatos. Espera.- Hector fue a por ellos.- Ten.

Me los puse y Richard me agarró de la mano.

- Vamos al plató.

- Richard yo... yo nunca he posado.

- Lo se David me lo dijo. Y también me enseño las fotos que te hizo y son espectaculares.

- ¿Cuanta gente ha visto esas fotos?

- Pues no lo se pero yo y Hector fuimos los primeros. Venga que vamos a hacerte las pruebas de luz.

Me puse en el set y comenzó a probar los focos. Después empezó a hacerme fotos, en un principio me costó pero luego me solté. En una mañana me puse como siete vestidos de noche y, la verdad no se cual era más bonito. La mañana acabó y nos fuimos a comer. Yo bajé maquillada y peinada como para ir a los Oscars pero con unos vaqueros y una camisa. En la comida estuvimos hablando y bromeando, era como si conociera a Richy y a Hector de toda la vida. Después de la comida volvimos al estudio, por la tarde tocaba vestidos de cóctel. Me metí en el set de maquillaje con Hector y me quitó el recogido, me soltó el pelo y comenzó a rizarlo. Me quitó el maquillaje y me dijo que ahora tendríamos que maquillarnos más veces. Primero me maquilló con tonos tierra. El primer vestido que me pues era en tonos dorados. Hicimos las fotos y me cambié. Cuando salí del tercer cambio David me llamó.