Duele quererte

Capítulo 46

La ira inundó mi cuerpo. Más bien la decepción y no solo por mi, si no por Jack. Hace unas horas dijo que no estaba seguro y que se esperaba mas de ella y ahora estaban pegaditos y riéndose.

Me daban ganas de partirle un diente a él y a ella insultarla por tonta.

Para mi que la estaba utilizando como un juguete, como con Alexa. Solo para olvidarme y cuando no lo consiguió se confesó ante mi, como tampoco consiguió nada se fue a por otra. Lo único es que se comportaba conmigo de manera diferente. Lo que hacía verse como un capullo aunque yo supiera que era buen chaval, no estaba bien lo que hacía.

Una u otra.

Todo no lo puede tener.

Alexander se sentó al lado de Maca quedando en frente de Bella que se colocaba justo a mi lado y con mucha frustración encima.

—Han estado toda la tarde riéndose como unos pavos...—Murmuró en mi oído.

Estaba claro a quien se refería porque Alexander ponía la misma cara.

Miré hacia ellos sonríentes y aún agarrados. Estaban justo por sentarse cuando vi como Elisabeth se acercaba a nosotros.

Mierda.

—¡Jack! ¡Jack! —Oímos que gritaba y se acercaba. Jack me miró con súplica y hice algo que de lo que no me iba a arrepentir.

—¿Quién es esa loca?—Preguntó Bella.

Me levanté de mi sitio y cogí las manos de Jack haciendo separar a Emma que tenía una cara que parecía un cuadro.

La miré haciéndole entender que luego se lo explicaba pero aun así ponía cara de culo.

Te jodes, zorra.

Abracé a Jack tocándole toda la espalda.

—Hola cariño. —Dije mirándole seductoramente mientras Elisabeth detrás nuestro observaba la escena.
—Te echaba de menos, ¿qué tal está tu prima?

Me dirigí a Emma que sonrió forzosamente.

—Me alegro, oh espera... ¿Elisabeth? ¡hola! ¿qué tal?—Fingí sorpresa mientras cogía la mano de él.

Todos mis amigos estaban mudos, flipando.

Algún día me dedicaré a actriz, lo juro.

Estábamos girados mirando a Elisabeth, que en cuanto me vio sus ojos empezaron a echar chispas.

—Uh, ¿aún estas con ella? —Preguntó molesta.

—Pues claro, es mi novia. —Recalcó Jack sonriente.

—¿Su q-?

—Sí. —Interrumpí a Emma.
—Mañana haremos cuatro meses, así que largo.

Hizo una mueca no muy agradable y se marchó por donde se había ido, nos sentamos en nuestros sitios pero Emma estaba petrificada.

—¿Que coño ha sido eso?—Bella estaba sonriente y orgullosa.

—Yo lo llamo aparta-zorras. —Reí.

Jack estaba riéndose también hasta que nos acordamos de que Emma merecía una explicación.

—La última vez, Elisabeth vino para conquistarme y tuvimos que fingir que Sammy era mi novia. —Explicó Jack.

—Sois unos actores de la leche.
—Añadió Maca.

Me acordaba muy bien de ese día, hacía poco pero me acordaba como si hubiera sido ayer. Yo sí quería besarle aunque una parte de mi no quisiera, y no sé si hice bien. Después del beso algo despertó en mi. No nació, porque nacer ya estaba muy vividito. Pero supongo que otra vez mis sentimientos se fueron a la mierda porque este chico era demasiado bipolar.