Un viernes por la mañana cuando teníamos insti Bella estaba mala con anginas así que tuve que ir andando. Llegué tarde, como a todos los sitios aunque por suerte la profesora aún no había llegado.
Mientras todos estaban hablando, tirando papeles y sentados encima de las mesas yo hablaba con Alexa y Saray y no sé como ni porqué acabé fijándome en Jack, en lo guapo que iba con su precioso pelo y también no pude evitar fijarme en con quien estaba hablando. Para mi sorpresa con Irene la mas hija de puta de todas.
—E, ¿qué te pasa? —Pregunto intentando sorprenderme con la respuesta.
—Bella no ha venido. —Tan triste como siempre contestó Jorge, y no me sorprendí.
Ellos dos fueron novios hace mucho tiempo y se querían mucho pero al final cortaron porque Bella decía que le faltaba madurar un poco y tener mas claro si era con ella con quien él quería estar. En mi opinión estaba claro que sí.
Todos los días iba a hablarle o le sujetaba los libros o la mochila. Más que un pretendiente parecía un sirviente que a todas nos envidiaba que Bella tuviera, ya que Jorge no estaba nada mal que digamos pero ella quería que él se esforzara más. Lo cual no me parecía mal.
Sonó el timbre y como no yo tenía que irme sola porque mi amiga estaba mala.
Aún me faltaba por llegar a casa, como unas tres calles y de repente noto como una mano toca mi hombro y dice:
—Hola guapa, ¿te molesta que vaya contigo a casa?—Preguntó coqueto y muy seguro de si mismo y yo negué.
Me puse nerviosa para ser sincera y no sé porqué cuando era un chico normal y yo tenía claro que el a mí no me gustaba y yo a él mucho menos.
—No me importa. ¿Qué tal en el insti? —Le pregunté más que nada por ser algo considerada y cordial.
—Hay muchas tías buenas pero son muy babosas. —Reí internamente.
—Hay una que me llama bastante la atención...Me quedé sin aliento, mis mejillas no pudieron ocultar la rojez. —No sabía porqué si él ni siquiera me gustaba.
—¿Nos sentamos un rato? —Asentí, y nos sentamos a hablar un poco de todo.
—Tú eres esa chica. Te conozco poco pero tienes algo.—Ahora si que iba a morir de la vergüenza joder.
—Siento que puedo contarte cualquier cosa, me siento muy bien a tu lado.—Ah...e..si y yo—Mentí. —bueno se esta haciendo muy tarde y me apetece irme a casa.
—Ah, claro te acompaño—Me respondió bastante amable.
Cuando llegamos a mi portal, el me miró a los ojos y sentí que estábamos a escasos centímetros de distancia y entonces yo me puse a mil por hora. Mi cuerpo temblaba y estaba muy nerviosa por que ha decir verdad yo hacía tiempo que había perdido ya la practica.
Me besó, un beso de diez segundos en el que una lluvia de sentimientos y mariposas se metieron en mi estómago, yo estaba repleta de felicidad una felicidad difícil de arruinar. Al principio no supe que hacer, hacia tiempo que no besaba a nadie. Me esforcé, y ni si quiera sabía porqué. No era ninguna facilona y en ese momento tenía muchas ganas de pegarle un bofetón. Pero no podía parar. Mi cuerpo no reaccionaba.
—Adiós Sammy. —Se despidió con otro beso corto y se fue.
Ese día fue uno de los mejores de mi vida y me costó dormirme, claro, tantos mensajes de Bella cuando se lo conté. Parecía estar incluso más feliz que yo.
•••
El primer beso de la parejita feliz.
Mejores que los de Jack.
Beliebgrey🧡
ESTÁS LEYENDO
Duele quererte
Novela Juvenil-¿Sabes como se mide el amor hacia una persona? -¿Cómo? -Perdiéndola. ¿Qué pasa cuando te enamoras de tu mejor amigo que resulta ser el chico nuevo que atrae a todas las chicas? Todos los derechos reservados. No se per...