Mi mejor amigo

Capitulo 62

Mientras giraba el volante y encendía las luces que indicaban que daría vuelta en la siguiente calle pensé en lo que le diría a Zayn, tenia que ser algo realmente sincero y que expresara todo lo que siento por el, pero como en el asunto de las palabras no soy muy buena dejaré que todo fluya en cuanto lo vea, solo espero no quedarme pasmada y totalmente muda cuando me tope con el frente a frente.

Estacione el auto frente a su casa bajándome del auto, no pude evitar mirar el garaje para comprobar que el estaba en casa y si, efectivamente el se encontraba en casa. Una vez más respiré profundo y fui hasta la puerta, me sequé las manos en los pantalones y toqué el timbre. Esperé varios minutos sin respuesta lo cual me puso los nervios de punta así que volví a tocar el timbre una y otra vez, luego más rápido y finalmente llegue al extremo de no dejar acabar el primer tono del timbre para que empezara el otro haciendo que sintiera unos pequeños toques en la punta de mi dedo. Cansada de esperar decidí marcharme, di media vuelta y desactive la alarma de mi auto. Fue ahí cuando la puerta se abrió.

-Espera ___- escuché la voz apagada de Zayn detrás de mi. Me voltee de golpe desconcertada y a la vez maravillada por el simple hecho de que Zayn abriera la puerta.

-¡Zayn!- solté un gritito y corrí a la puerta , note que las manos las tenia manchadas de pintura–¡Antes de que me cierres la puerta en la cara quiero decirte algo!- di un paso atrás al notar la cara de Zayn –Lo siento... solo escúchame-

Zayn relajó un poco su expresión pero no tanto ya que la arruga de su nariz aun estaba presente. Tragué todo el aire que mis pulmones aguantaron y comencé a hablar.

-Zayn yo... solo quiero pedirte perdón, lo que hice estuvo muy mal y me arrepiento totalmente de todo... y lo soneto mucho no era mi intención lastimarte- miré al suelo y di media vuelta.

¡¿Eso era todo?! ¡Solo eso! Me gritó una voz en mi cabeza y luego yo me replantee esa pregunta, ¿De verdad eso era todo lo que le tenia que decir a Zayn Malik? Lo tengo justo enfrente de mi y eso es todo lo que le voy a decir al hombre, que creo yo, me ha hecho sentir totalmente especial durante meses, ¿eso es todo lo que le tengo que decir al chico del cual estoy perdidamente enamorada? Perdóname pero no ______. Ahora o nunca. Hoy Zayn se debe de enterar lo que siento por el aun que por mas patética que me vea se lo diré.

Me detuve de golpe e inmediatamente regrese a donde estaba, justo enfrente de Zayn.

-Mira Zayn... no voy a estar con rodeos e iré directo al grano porque esto es muy difícil y extraño para mi pero necesitas saberlo, necesitas saber lo que siento por ti.- tome todo el aire posible y continué –Tu eres el único que hace que mis rodillas tiemblen, que se me acelere el pulso cuando te veo, que me ponga nerviosa, que con la cosa mas simple y estúpida me saque una sonrisa. Zayn eres el único chico que logra despertar a todas esas mariposa que duermen dentro de mi estómago, también eres el único que creo que es perfecto aun que no es así pero para mi si lo es y sabes porque Zayn? Porque estoy completamente enamorada de ti y... lamento mucho lo que te hice-

Traté de calmar mi respiración porque las ultimas palabras las dije demasiado rápido y no estaba muy segura si Zayn las había entendido o había entendido todo lo que le había dicho, levanté la mirada pero el no tenia expresión alguna, simplemente se frotó la cara con ambas manos y tras unos minutos de observarme fijamente cerró la puerta.

¡Perfecto! Dos portazos en la cara el mismo día, deberían darme un premio. Abatida por el instantáneo rechazo me dirigí a mi coche emprendiendo camino a casa, me quedaría en cama por el resto del día y parte de mañana pero luego recordé la escuela así que solo sería hoy.

Llegue a mi casa y me adentré en ella dejando mi celular en la mesa del recibidor junto con mi bolsa y mis llaves. Subí las escaleras con una inmensa pesadez y cuando por fin llegué a mi habitación me tumbé en la cama boca arriba. Me dolía la cabeza un poco así que hice que mi cabeza colgara de la cama viendo todo al revés, pero mientras observaba toda mi habitación desde otro ángulo la manta colgada en mi pared se me atravesó. Inmediatamente pensé en Zayn y en el día en el que me la había dado, cuando todo era diferente y sin ninguna duda mas sencillo. Di un largo suspiro y me recosté de nuevo hacia arriba con mis manos en mi pecho, me quité los zapatos con un leve empujón de parte del otro pie y me acurruque en mi cama aun tendida quedándome profundamente dormida.

Estaba soñando algo relacionado con tartas de manzana, supongo por que me había acostado sin comer pero desperté justo en el momento en el que estaba por probar la tarta, el sonido del timbre de la casa fue incrementando conforme fui despertando, al inicio creí que era una de esas campañillas que anuncian en los restaurantes que la comida esta lista pero solo era mi sueño. Miré mi celular fijándome en la hora. Las ocho de la noche, dormí al menos dos horas. El timbre sonaba con insistencia, bastante yo diría, así que me levante de la cama y bajé las escaleras. Encendí todos los interruptores de luces para no tropezarme con nada ya que mis sentidos no estaban del todo despiertos, el timbre seguía sonando y también tocaban la puerta. Me dio un poco de miedo abrirla, si la tocaban con insistencia debió haber pasado algo malo, algo muy malo. Imaginé lo peor rogando por que no sucediera nada. No me demoré mas y la abrí.

Todo lo que pensaba en ese momento se esfumó por completo, me quede pasmada y sin ningún sonido en mi boca gracias al asombro, miraba hacia el otro extremo de la calle por donde pasaba un auto solitario y se alejaba a gran velocidad, jugaba con sus dedos y su pie se movía insensatamente. Estaba nervioso al igual que yo.

-Zayn...- se me escapó en el momento que pude articular una palabra. Él giró la cabeza y luego su cuerpo quedando totalmente frente a mí

-¿Crees que me puedas acompañar? Tengo algo que mostrarte.-

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