Palabras te faltaban para describir ese sentimiento... por un lado esa culpabilidad se hizo presente en tu corazón, no estar presente en esa fecha tan importante fue imperdonable, y menos esa fecha importante para tu crush. ¿el motivo de esa situación? Pues hace unos días fue el cumpleaños del mexicano dueño de tu corazón, pero por culpa de algunos trabajos, no te permitieron estar a lado de él ese día. Por lo que te contó Manuel, le hicieron una fiesta sorpresa,hubo música tradicional, los países se vistieron con prendas de los bailes folclóricos mexicanos, pero de cierta forma, él observó que a México le faltaba algo.
-¿Qué podría hacer?¿Qué le puedo dar?-te debatias en la tienda al ver algunas posibles opciones del regalo. No querías darle cualquier cosa, algo hermoso... único e indescriptible estaba en tu mente, pero en tu campo visual no se detectaba nada...
-Señorita, le informamos que vamos a cerrar...-te dijo una de las señoras que atendía la tienda... quedarse durante dos horas no fue una buena opción.
Al salir de la tienda, la obscuridad era tu única amiga. Todo estaba vacío, ningún alma pasaba por la calle.
-A dónde rayos se fueron todos?-preguntaste mientras caminabas hacia tu departamento.
-Psss... oye...-se escuchó una voz que provenía del callejon.-Güerita!-
Comenzaste a enumerar esas advertencias que tus familiares te hacían sobre hablar con extraños. Decidiste ignorar esos llamados para evitar futuros secuestros o cosas peores.
-¡(t/n)!-
-Eh...-ahora el dilema era ¿correr o no correr?... esa voz sabía tu nombre.
-Ayúdame por favor...-dijo por último esa voz antes de salir del callejón y mostrar la cara. Pero con solo dar unos pasos, querías reir por la escena que proyectaron tus ojos (c/o). Era un pequeño juguete... un muñeco muy detallado de ese país al que le buscabas un regalo. Sus facciones estaban en su rostro, literalmente era muy adorable y tan solo media como 25 cm.
-Ahora debería preguntar qué paso... o matarme de risa-le dijiste divertida.
-Que gracioso-comentó sarcastico-Esto es culpa del tonto de Martín...-
-¿Argentina?... qué sucedió exactamente?-le cuestionaste mientras te arrodillabas para ver mejor al muñeco.
-Me choca que esta vez tomó la decisión por nosotros... resulta que tuvo una discusión leve con Inglaterra, y para vengarse, él quería hacerle alguna broma clasica como maquillarlo con marcadores permanentes para mañana ya que tenemos una reunión...bueno, el punto es que al llegar al hotel, con sigilo entramos a la habitación y...-
-Mamá, ese juguete esta hablando con esa chica...yo lo quiero-como si hubiera salido de las tinieblas, un niño con sus padres paso cerca de ustedes.
-Mejor vamos a mi casa y me cuentas mejor lo que pasó-aunque levantarlo ese momento era necesario, te le quedaste viendo un poco más, tenía esas ropas de mariachi y esa pequeña guitarra en su espalda.
-¿Le podré cambiar de ropa?-preguntaste con una sonrisa.
-¿Qué?-sin darle esas explicaciones que el mexicano esperaba, lo levantaste con cuidado para ir a tu departamento.
-Gracias (t/n)... pensé que pasaría la noche en ese callejón-suspiró aliviado el muñeco~país.
-Dijiste que estabas con Martín y Manuel en esta travesura... dónde se supone que estan ellos?-dijiste al entrar al edificio de 6 pisos.
-Bueno... lo que pasó es que entramos a la habitación y todo estaba en paz, ese mago con complejo de tsundere estaba durmiendo y Martín estaba a punto de maquillarlo hasta que vio en su mesita de noche ese palito con una estrella en un lado...-
-Su Varita...-ambos entraron a tu departamento y colocaste a Mexico en la mesa.
-Eso... y comenzaron a jugar mientras yo vigilaba que ningún país nos descubra, les dije que dejaran esa arma mortal, pero ese par de idiotas no me escucharon... llegó hasta el punto que lanzaron un rayo que rebotó por toda la habitación y me dió a mi... cuando abrí los ojos,ya estabamos en el callejón, lo más triste es que se comenzaron a reir de mi...-contó con un suspiro mientras se sacaba el pequeño saco que cubría su cuerpo.
-Ya veo... y qué te dijeron exactamente para dejarte ahí?-comentaste curiosa para que te dé más detalles de esa "pequeña aventura".
-Según ellos, Inglaterra despertó, se molestó como la mismísima reencarnación del mal, comenzaron a correr por su vida y Manuel me dijo que este hechizo desaparecería en un tiempo...tal vez minutos... tal vez horas... o años-pudiste notar que México estaba con sus prendas mojadas al tocar el saco del traje.
-Bueno, si ese par no aparece hasta dentro de una hora... te quedarás a dormir aquí-le dijiste con una sonrisa haciendo que sus mejillas se tiñan de rojo.
-Que padre...¿lo dices en serio?-
-Así es... en un momento los llamaré para saber a donde se fueron...-Mientras tomabas tu celular, México tomó su guitarra para comenzar a tocar algunas canciones folclóricas... cada palabra, cada melodía era simplemente única. Esos versos románticos llegaban a tu corazón como si esas canciones fueran solo y únicamente para ti.
-Hola... Martín?? Manu está contigo?.... si... lo dejaron a su suerte saben?... no... no... ¿que se quede a dormir aquí?... esta bien yo... ¡No haré eso!-exclamaste algo sonrojada al escuchar la idea del argentino-Si me gusta... si... pero lo llevaré mañana a la reunión para que aclaren todo con Inglaterra... ¿sorpresa?¿Qué sorpresa?-pudiste escuchar una risa complice de ambos paises antes de colgar la llamada dejandote confundida.
-¿Qué dijeron y porqué estas roja?-preguntó inocente el país.
-D-dijeron que... no vendrán por ti-con un sonrojo notorio te adentraste a tu habitación con el mexicano en tus brazos.
-No mames... bueno, no me queda otra opción más que dormir aquí, (t/n)-dijo el pelinegro mientras saltaba de tus manos para llegar con éxito a tu cama.
-Espera... dormirás en mi cama?... tenía planeado construir una camita o algo así...-ese comentario hizo que México te dedique esa mirada fulminante.
-No te haré nada... sólo dormiremos un poco y además alguien me debe mi regalo de cumpleaños, y ese alguien se llama (t/n)(t/a)-esa sonrisa victoriosa se formó en sus labios, ya entendías a donde iba esto.
-Esta bien... te quedarás en mi cama, pero sólo esta noche...-si hubiera un contador, este diría México 1~(t/n) 0.
-Y ya que pasaremos la noche juntos, quisiera saber que trabajo te tuvo tan ocupada para no estar conmigo ese día-la pregunta del millón, eso ojos cafés se cruzaron con los tuyos color (c/o).
-América necesitaba nuestra ayuda, y no fui la única...Yei, Ross y Luka también fueron conmigo-no querías dar muchos detalles ya que Alfred y Pedro no se llevaban tan bien que digamos.
-Claro...-comentó algo molesto.
-No te enojes... oye México-le llamaste, pero el país se adentro en tu cama para cerrar los ojos.-México...-
-Yo quería que estuvieras ahí, en esa fiesta, te quería ver con ese vertido. Iba a cantar para ti-confeso de golpe dejandote perpleja.
-Este no será tu último cumpleaños... pasare a tu lado los que lleguen, y compensaré este de alguna forma, pero lo haré-no podías creer que esas palabras las soltaste a ese mexicano que te enamoró con su personalidad y su cultura.-Buenas noches...-
Dijiste mientras te adentrabas a la cama con el pijama de color (c/f) en tu cuerpo.
Debió pasar como una hora y no podías consiliar el sueño, no era por ese sentimiento llamado tristeza, era por que el país seguía tocando su guitarra y cantaba en voz baja. A los ojos del país ya estabas durmiendo, así que decidió soltar esas últimas palabras que dejaron a tu corazón K.O.
-Me vuelves loco (t/n), eres hermosa mi Güerita-una vez que tu reloj tocó las 00:00 am, sentiste una presión en tu cama. Dudosa a abrir los ojos continuaste haciendote la dormida. El hechizo había terminado...
-Sólo fueron horas... eso me alegro-susurro el mexicano antes de que la habitación quede en silencio total. Antes de que el sueño gane, sentiste una presión calida en tus labios, todas las canciones románticas comenzaron a tocar en tu cabeza. Ese sonrojo se hizo inevitable en tus mejillas.
-(t/n), me gusta mucho... dormir a tu lado es el mejor regalo que puedo tener.-
Lo único que pudiste recordar es que el mexicano te rodeó con sus brazos para consiliar el sueño.
•°•°•°•°•°•°•
Con cuidado abriste los ojos buscando a ese chico de cabellos negros y bellos ojos marrones, pero no había rastros de él.
-Seguro fue una alucinación o un sueño...-dijiste con una sonrisa-Pero fue un sueño muy lindo-
Esa sonrisa de enamorada no se borraba de tus labios, querías contarle a alguien de ese sueño perfecto con el mexicano, pero en tu mesita de noche visualizaste una nota adornaba con (flor/f).
"Mi señorita, lamento irme sin despedirme, te veías tan linda que no quería despertarte... pasaré esta tarde por tu casa, cobraré mi regalo de nuevo... no me cansaré de estas palabras... Me gustas (t/n)..."
Perpleja te dejaste caer en la cama, esos momentos no fueron un sueño... ese mexicano se declaró de la forma más dulce... robarte un beso en la noche no estaba en tu mente, pero no olvidarías esa sensación dulce que sintieron tus labios.
Solo se podría decir que te quesaste leyendo la carta por unos minutos...
La carta que tu querido crush escribió para la chica que sus canciones y dueña de su corazón.
//////////////♤♡♢♧
ESTÁS LEYENDO
One-shots Hetalia ♤
FanfictionHola, soy Mey!!!! Bienvenidos al libro de One-Shots de Hetalia~ dónde las historias dulces y algunas picantes se verán reflejadas en este libro. Será Personaje×Lectora o Personaje×Lector Sin nada más que agregar,espero que disfruten los One-sh...