- ¡Déjalo así! Está perfecto... - dice Kevin mientras me quita los platos que llevo en la mano para colocarlos por cuarta vez en la mesa. – Relájate... Todo va a salir perfecto... - asiento aunque los nervios con los que me he levantado esta mañana no desaparecen ni creo que lo hagan hasta que por fin les cuente a todos la noticia...
-¿Cómo estoy? ¿No estoy demasiado arreglada? - digo mientras me miro en el espejo mi nuevo vestido midi color blanco con amapolas estampadas.
- Estás perfecta- responde Kevin mientras me abraza por las espalda y apoya su cabeza en mi hombro.
- ¿Qué crees que dirán cuando se lo contemos? – le pregunto entonces a Kevin.
- Pues que van a decir... Se alegrarán y estarán tan impacientes como nosotros por conocer al pequeño Guisantito.
Como aún es muy pequeño y no sabemos si será niño o niña, le propuse a Kevin llamarle Guisantito. Al principio Kevin me miro con cara de " esta tía está más loca de lo que pensaba" y no le gustó mucho la idea de llamar a su hijo o hija Guisantito. Pero después de haberme oído llamarle así, al final se lo he pegado y ambos le llamamos Guisantito.
- ¿Tú crees? Y si piensa que somos muy jóvenes aún o que llevamos muy poco tiempo como para formar una familia o...
Kevin pega sus labios a los míos y consigue callarme.
-Shhhh.... Deja de decir tonterías... Ya verás como todos tus miedos son infundados. – dice mientras rodea con sus manos mi cintura y vuelve a besarme.
Así seguimos un par de minutos más. Adoro estar entre sus brazos. Para mí, eso es el paraíso.
De pronto, Kevin se separa de mí. Sin poder remediarlo, hago un pequeño puchero con el labio. Kevin que se da cuenta de mi gesto, sonríe y acercándose al equipo de música, lo enciende y por los altavoces comienza a sonar nuestra canción. Esa que hace solo unos meses bailamos en un parque de Londres. Esa que desde esa noche, se ha convertido en mi canción favorita, más aún de lo que ya lo era.
Acercándose a mí, mi apuesto novio y padre de mi Guisantito me coge de la mano y como ya hizo una vez me pregunta:
-¿Quieres bailar?
Y yo, embobada a más poder, asiento y abrazándome a él comenzamos a bailar esta mágica canción en el salón.
What would I do without your smart mouth?
Drawing me in, and you kicking me out
You've got my head spinning, no kidding, I can't pin you down
What's going on in that beautiful mindI'm on your magical mystery ride
And I'm so dizzy, don't know what hit me, but I'll be alright
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Besos de esos #EDIT
ChickLitSi a Adriana le hubieran dicho que su vida iba a dar un cambio de ciento ochenta grados, quizá hubiera tomado por loco a quien lo dijese. Su vida era de los más normal, demasiado monótona a veces, levantarse a las siete, salir de casa a las ochos...