Bailé ballet hasta las cuatro de la madrugada sin parar. Todos ya se habían ido a sus casas, creo ser la única que queda en alguna sala de ensayo.
Escogí bailar para la audición el solo del ballet de "La Bella Durmiente", la versión del coreógrafo Pepe Hevia. Era una mezcla perfecta entre lo contemporáneo y lo clásico. Creo que refleja todo lo que sé hacer muy bien en ballet, y lo ensayé hasta que cada parte de mi cuerpo dolía gravemente. En ballet, señal de dedicación equivale a tu nivel de dolor, si tus pies están destrozados quiere decir que estas haciendo las cosas bien.
Me heché en el piso, subí mis pies en el aire apoyándolos en la barra al lado del espejo, me quedé sin aliento mirando al techo.
Mientras intentaba volver a regularizar mi respiración, el beso en la escalera volvía a gobernar mis pensamientos.
No entiendo el cambio. La noche anterior me pide distancia, al amanecer me hace una escena de celos y después del desayuno me roba un beso.
Definitivamente estoy en el estado emocional perfecto para el solo que interpretaré... confundida, enamorada,y deseando dejar de estar adormecida.
Sí, creo que lo que siento por Evan es eso, amor, lástima que él sólo sienta ganas de jugar. Los "te quiero" que me dice, no sé cómo tomarlos. Me mueve todo el piso cada vez que lo escucho, pero me cuesta confiar en él.
Bejé las piernas de la barra, y me senté para evaluar los daños. Solté las cintas de mis tobillos, y con mucho cuidado me saqué las zapatillas de punta.
Un desastre, sangre a la vista pero ninguna uña rota, esto se arregla rápido en casa.
Me siento muy segura de lo que ensayé, creo que es mejor ir a bañarme, curarme esas heridas, alistar mis cosas para mañana, comer algo y dormir lo más que pueda.
Al llegar a mi edifico saludé a mi despistado conserje, y entré a mi departamento.
Cuando terminé de hacer todo, y ya estaba con el pijama puesto, fui a apagar la luz de la sala para poder dormir, estaba desesperada por cerrar mis ojos por unas horas.
Mi mano estaba por bajar el interruptor, pero me detuve porque noté algo que llamó mi atención.
En el piso había un sobre azul con mi nombre. Lo recogí, alguien debió deslizarlo por debajo de la puerta.
Al abrirlo saqué una nota escrita a mano. Era una cita de mi libro favorito:
"la suerte es para los débiles, el éxito es de los que tienen buena estrella, y tú, eres la estrella que más brilla cuando más oscuro está el firmamento"
En lugar de una firma, había un pétalo de color azul pegado en la hoja.
Me quedé impresionada. La volteé pero no había remitente por ningún lado.
Es el mismo libro que llevábamos, Liam y yo, cuando nos vimos por primera vez en el tren.
Se llama "Blue Roads". Es la historia de dos extraños que se comunican por cartas dejadas en el hueco del tronco de un árbol, se enamoran entre letras,y cuando deciden al fin conocerse para poder tener una relación real, quedan en cada uno llevar una rosa azul para reconocerse.
Sé que Liam no se acuerda nada, pero... ¿Será él? Puse la alarma y me fui a dormir con una sonrisa.
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Amor a Segundo Riel ©
RomanceChloe Diamond, encuentra al chico de sus sueños en el tren del frente leyendo el mismo libro que ella... pero, él cae a los rieles ¿Amor perdido? Pues no, ella va tras él ¿Fin? Bueno, digamos que acompañar al lindo chico herido e inconsciente al hos...