Decisiones

220 22 0
                                    

"Desde el principio! Chloe por favor necesito tu arabesque más arriba, y quiero sonrisas! Hermia tiene que mirar a Lisandro con amor!"

La voz del director, me traía de regreso a la realidad por momentos. Bailar hasta querer desmayarme funciona bien para que mi cabeza dejé de pensar en él todo el tiempo, pero no puedo evitar repasar en mi mente lo que viví estos días.

Han pasado semanas desde que acepté decir a todos que estaba oficialmente comprometida con Liam.

La familia Harding completa está organizando una fiesta para celebrarlo.

Separaron un salón en el hotel más exclusivo de la ciudad. Según Bivian hay muchos invitados, entre ellos periodistas que cubrirán el evento, lo que no me gustó, pero finalmente acepté porque me explicaron que es buena publicidad para "Harding Enterprises".

Supongo que debo adaptarme a su manera de hacer las cosas.

No invité a mi familia, tal vez al ver la noticia en alguna revista se animen a dar el primer paso y buscarme, pero lo dudo. Por mi lado sólo están invitados Lucas, Camila y un par de autoridades de la compañía nacional de danza.

Empecé a trabajar ahí hace unos días, mi primer ballet con ellos será "Sueño de una noche de verano", mi personaje es Hermia. El elenco viene ensayando hace meses, pensé tener un rol menos importante, pero al incorporarme el director decidió que ante sus ojos yo era perfecta para el papel e hizo los cambios necesarios. Lo cuál me ganó a varias enemigas gratis entre las bailarinas, pero aprendí a manejarlo, me ignoran y yo a ellas, finalmente no vine a hacer amigos sino a disfrutar de lo que más me gusta hacer, bailar ballet. Los horarios, el nivel de exigencia y los ensayos me dejan agotada, pero nada me impedirá dar todo de mí para estar lista para el estreno.

Lucas y yo estamos distanciados, me lo cruzo en la compañía pero no me habla, no sé si acepte la invitación a la fiesta que me están organizando. Reaccionó muy mal cuando le conté cómo siguieron las cosas con Liam, dice que no me cree capaz de seguir con esa relación basada en una farsa. Ya no me quedan fuerzas para pedir cariño a nadie, así que si elige alejarse de mí es tema suyo.

La única persona que sabe sobre lo que pasó verdaderamente entre Evan y yo, es Camila, le conté todo. Ella me dió su apoyo, a pesar de no entender mi decisión, porque sabe que no estoy enamorada de Liam. Lo quiero mucho, sí, pero no lo amo. Las cartas que me mandó son mi esperanza de poder llegar a hacerlo con el tiempo.

Las personas que me ven todos los días deben pensar que soy una chica feliz... sonrío todo el tiempo, hago bien lo que tengo que hacer, pero por dentro las cosas son distintas.

¿Se puede ser una deprimida funcional? No lo sé, pero realmente al llegar a casa las máscaras se me caen y la angustia me llena.

No sé nada de Evan desde esa noche, hasta borré su número de mi celular para no caer en intentar llamarlo.

Me enteré por Bivian que él terminó con Annie, me confirmó que lo que ella declaró en el artículo era mentira.

Escuchar eso me causó mucho dolor, creo que aún más que cuando le mentí a Evan sobre lo que pasaba entre su hermano menor y yo. Debí confiar en él en su momento, pero ya es tarde. Lo que hice no tiene vuelta atrás, no le encuentro solución. Quise ir a buscarlo varias veces, pero me controlé. Hasta evito ir a la casa de los Harding para no verlo, este tiempo he visto a Liam en mi departamento o en lugares públicos.

Supe por él que Evan sigue ocupando el lugar de siempre en la empresa, así que me alivia saber que la explicación que le dió a su abuelo sobre lo que vió entre nosotros esa noche fue suficiente para calmarlo.

Bivian me pidió que la busque hoy para irnos juntas a comprar un vestido para el evento, le digo evento porque lo siento ajeno, como si ese momento no me perteneciera.

"¡Es todo por hoy!"

Detuve mi cuerpo al escuchar esas palabras que me alejaron del enredo de pensamientos que bailaban en mi mente y me aterrizó a tierra firme, el primer ensayo general terminó.

Luego de ducharme con agua caliente para relajar los músculos tensos, me sequé el cabello, y me cambié con algo cómodo. Un polo gris de algodón suelto, que me queda grande, es corto adelante y largo atrás, unas leggins negras para mis piernas y unas zapatillas blancas muy cómodas con un poco de plataforma.

Tomé un taxi hasta el edificio de la empresa, la verdad que no estoy de humor para trenes.

Subí por el ascensor hasta el quinto piso, al abrirse las puertas de este, ante mis ojos habían muchos cubículos con gente ocupada, y varias oficinas con las puertas cerradas. Lo que me llamó la atención fue la decoración del lugar, era minimalista pero moderno, con muchos colores, y todos parecían estar felices de estar ahí. Sentí que incomodaba rompiendo esa armonía con mi falta de ganas de reír.

Dí varias vueltas, tratando de ser lo más invisible posible, fijándome en el nombre que aparecía en cada puerta pero no encontré el de Bivian. Me pregunto si estoy en el piso correcto.

Decidí mandarle un mensaje para decirle que ella venga a buscarme, saqué mi celular y empecé a escribir.

Levanté la mirada al escuchar una puerta abrirse.

Lo ví, a pocos metros, después de semanas, Evan.

Amor a Segundo Riel ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora