No Me Dejes © - Carl Grimes [TERMINADA].

Capítulo 30: "-Me diste un susto Stone..."

||Narra Carl||

– ¿Cómo estas?. – me senté a su lado.

– Bueno... No me quejo. – sonrió. Estaba re pálida y tenía unas ojeras impresionantes. – ¿Tu? ¿Cómo has estado?.

– Como la mierda. – reí sarcásticamente. – Ver a la mujer que amas debilitarse a cada segundo, es... Es... Horrible. Y mas sabiendo que no puedes hacer nada.

– Vamos, Carl, no te culpes. – apoyo su cabeza en mi hombro. – Ahora mismo no debería estar así contigo, podría contagiarte.

– Me importa muy poco enfermarme, de hecho, que tu me enfermes, sería un honor. – río con pocas fuerzas.

– ¡Grupo!. – mi padre empezó a hablar. – Iremos con Aaron a la comunidad, pero ire con algunos de ustedes, los restantes irán en la camioneta. – esa camioneta conseguimos cuando fuimos todos a confirmar que Aaron venia sólo. – El pequeño grupo que me acompañará son; Glenn Michonne y _______. – fruncí me ceño, directamente todos me miraron a mi. Aún sigo enojado con mi padre.

– ¿Yo iré?. – pregunto ______ levantando su cabeza de mi hombro.

– Si, te necesito. – ella sintió.

(...)

Camine hacia mi papá.

– Papá, ¿En serio tiene que ir? Creí que dijiste que estaba enferma.

– Si, Carl, pero la necesito, ella es fuerte y valiente.

– Mi chica es genial, ¿No?. –rei, papá sonrió. – Me siento un inútil a su lado.

– Todos nos sentimos inútiles a su lado, incluso yo me siento inútil a su lado.

– Sólo cuidala, ¿Quieres?. – lo mire a los ojos.

– Con mi vida. – sonrió, lo abrace y luego camine hacia mi novia.

– Prométeme que te cuidaras. – la mire fijamente.

– Lo prometo, sheriff. – bufe, siempre odie que me digan así. Ella rio. – Hey, ¿Que te pasa?. – tomo mi mano.

– No quiero que te pase nada. – no quiero perderla, no soportaria perderla.

– Tranquilo... Se cuídame. – acarició mi mejilla, cerré los ojos por su tacto. – Te amo, Carl.

– Yo también te amo. – agarre sus mejillas con mis manos, y cuando estaba apunto de besarla, se apartó. Fruncí el ceño.

– No quiero que te enfermes.

– ¡¿Crees que esa maldita enfermedad impedirá besar a la mujer que amo?!. – grite, me importaba muy poco que los demás escucharan, que de seguro escucharon. En un acto rápido, la tome de la cintura y la bese fugazmente, ella correspondió a mi beso. Sentí una mano en mi espalda y luego una risita. Rick.

– Ya hay que iros. – se aguantaba por no reír. Gruñi. _______ río.

Me fui al camión, todos los que estaban allí, me miraban con una cara de burlón y picardía. Fruncí el ceño.

– ¿Que?.

– Nada. – dijeron todos, segundos después, estallaron en carcajadas.

– ¡Oh!, ¡Vamos, chicos!. – sentí mis mejillas arder. Mierda, me sonroje.

||Narra ______||

Cuando llegue al auto, todos me miraban con cara de burlón y picardía.

– ¿En serio?, ¡Vamos!. – bufe y me sente, ellos rieron. Me sonroje.

(...)

Todo el camino fue silencioso, sólo sentia a Aaron que estaba a mi lado, y muy nervioso, no se si esta nervioso por que es una trampa, y si es una trampa, morirá, pero estaba muy, muy nervioso.