Luz en la Oscuridad (Nowaki x Hiroki x Akihiko)

CAPITULO 17 Oscuridad.

---Ryu---

Hace mucho que no veo a Kaoru-san, si debo decirlo, para el tiempo humano son como dos años sin verlo.

Tal parece que nada bueno está ocurriendo en estos momentos en el abismo.

Me gustaría hablar con él.

Pero...

No se puede.

-Mi amor.
-Reizo, -comente- ¿Cómo te fue?
-Bien, -sonreí- pensé que vendrías en unos meses.
-Yo también pesaba lo mismo pero...
-¿Qué pasa?
-Hay rumores de una tragedia.
-¿Cómo?
-Tal parece que el rey del abismo tiene más poder de lo imaginado.
-¿Por qué lo dices?
-Bajamos al purgatorio y el lugar está cubierto por una espesa capa de oscuridad.
-Eso está muy mal.
-No podemos ver nada.
-...
-Pero no te preocupes, nos encargaremos de todo.

Seguimos platicando y me di cuenta de lo agotado que se veía.

-Tal vez necesites descansar.
-Yo...
-Vamos Reizo, tienes que recuperar fuerzas y tu energía.
-Supongo que tienes razón.

Me beso la frente y sonrió.

-Espero me puedas conceder una cita mañana.
-Sí has descansado lo suficiente lo pensaré.

Él sonrió y se marchó.

No puedo perder más tiempo, debo ver que está ocurriendo.

Abrí mis alas y me dirigí al purgatorio.

Afortunadamente tengo un habilidad de poder alejar la oscuridad pero solo por un tiempo.

Al llegar al purgatorio me di cuenta de la niebla pesada que había, no se podía ver, así que recite unas cuantas palabras para poder despejar el camino.

¿Qué ha pasado?

Camine por todo el purgatorio buscando pistas pero...

-Vaya, vaya, que lindo angelito ha venido a este lugar.

Mire hacia unas rocas y había una pandilla de demonios.

"Maldición estos roban energía, por eso Reizo estaba cansando..."

-Es un doncel, -olfateo uno- y de un buen rango.

Ellos comenzaron a acercarse y me golpee mentalmente de no haber traído a Miyagi conmigo.

-Me lo pido. –dijo uno.
-Aunque podríamos utilizarlo al mismo tiempo. –sonrió otro.

Empecé a retroceder hasta chocar con una roca.

-¿El angelito está asustado?
-...
-Prometemos no ser tan bruscos, solo si es necesario.

Me quería echar a correr pero me acorralaron.

Dos de ellos me sujetaron de las muñecas y otro se acercó a mí e intento besarme.

-SUELTENLO AHORA.

Los demonios se alejaron y Kaoru llego a mi lado gruñendo.

-S-Solo jugábamos un poco. –comento un demonio.
-FUERA DE MI VISTA.

Ese grupo de demonios se marchó y pude notar que Kaoru estaba algo cambiado, tenía sus ojos rojos, sus alas estaban muy oscuras, un aura negra lo rodeaba y tenía otra vestimenta.

-¿Qué haces aquí?
-K-Kaoru solo quería saber cómo estabas, yo...
-Es mejor que te marches.
-No, -acaricie su mejilla- ¿Qué ocurrió? Tal vez yo.
-Vete.
-Por favor déjame ayudarte y...
-Un ser de luz no tiene nada que hacer aquí.
-Por favor Kaoru...
-Fue un error habernos hecho amigos.
-Entonces soy un error, -susurre- lo siento.

Camine hacía el borde y cuando estaba a punto de sacar mis alas sentí como unos brazos me rodeaban.

-Lo siento no quise decirte eso, no te vayas.

Lentamente volteo y coloque mis manos en sus mejillas.

-Kaoru.
-Te amo Ryu.

Me beso tiernamente y pude ver como el color de sus ojos volvía a la normalidad.

Entonces...

¿Un ser de luz puede calmar la oscuridad?

Nos separamos y sonrió.

-Quiero protegerte.

---Raiden---

Amo a Yoshi, me enamore de él sin darme cuenta.

¿Cómo no enamorarme del angelito tan tierno y dulce?

Su sonrisa siempre me cautivaba cada vez que lo miraba.

Simplemente es tan perfecto.

Pero nunca pensé que Lucci se fuera a encaprichar con él.

Tanto que cuando se enteró que tenía sentimientos por el lindo angelito me mando a golpear y me encerró en la celda.

No tenía idea de que el chico le pertenecía

Y de cierta forma, me decepcione, ¿este es el precio que se debe pagar por amor?

Mi lindo Yoshi...

Ahora que nos sinceramos...

Me doy cuenta que ese demonio vestido de ángel no hace nada más que solo lastimarlo, que su vida tan miserable.

Quiero golpearlo, darle lo que se merece.

Hacerle pagar todo el daño que le ha hecho.

No puedo permitir que siga lastimándolo.

Me siento tranquilo de solo pensar que mi Yoshi me corresponde.

Sus sonrojos, los besos que nos hemos dado, las miradas de ternura que me dedica.

Quiero tenerlo en mis brazos hasta el amanecer.

Pero sé que debe irse, pero solo hoy será el último día en el cual se deba ir temprano.

Nos iremos, y lo llevare al mundo humano.

Lo protegeré.

Él lo necesita más, ya que es un ángel creado y no nacido como yo.

Le daré parte de mi poder.

Me di un baño y me coloque una muda de ropa.

Mire por la ventana que queda hasta arriba y pude ver como empezaba a oscurecer.

Solo debo esperar unas horas más, mi amado Yoshi tiene que venir y nos iremos de aquí.

Ya tengo toda la ruta de escape, en todo este tiempo que hemos estado aquí me he encargado de perfeccionarlo y que todo resulte como lo planeado.

No permitiré que mi angelito permanezca un día más aquí.

Luego de esperar un tiempo Yoshi entró a la habitación con la mirada baja.

-¿Yoshi?

Sus ojos se volvieron cristalinos y corrió a mis brazos.

-¿Qué ocurre?

Lo tome del mentón y pude ver marcas en su cuello.

-Yoshi...
-L-Lucci, él...

Cuando bajo su mirada con lágrimas en sus ojos lo entendí.

Ese idiota abuso de él.

Siento como el odio me consume.

-Llévame contigo.
-Sí, -lo mire- te llevaré conmigo, no te dejare, te amo.

Lo abrazo más a mi pecho para que se tranquilizara.

Juro que ese infeliz me las pagará.

Cuando Yoshi de tranquilizo bese sus manos y lo hizo levantarse.

-Es hora.

Él asintió y lo empecé a guiar a la salida.

Afortunadamente nadie sospechaba y nadie se levantó, el camino era un poco largo pero valía la pena para nuestra libertad.

Después de un par de horas logre divisar la entrada secreta al purgatorio.

A decir verdad mi misión era protegerla, por eso se llegar.

Al llegar a la puerta la abrí y vi el mundo humano.

-¿Estás listo?

Él asintió y lo tome de la cintura.

-Siempre te voy a proteger...

---Nowaki---

Odio...

Dolor...

Destrucción...

Caos...

Todas esas palabras giran en mi mente.

Ya no hay paz...

Ya no tengo porque luchar.

Me han quitado a lo que más amaba.

No voy a descansar hasta ver caer a Zeus junto a su tropa.

Ese imbécil lo mato.

Me lo quito.

***Flash-back***

Estaba mirando a mis tropas buscar a mi amado Hiroki.

Ya ha pasado dos años en la vida humana y no lo han encontrado.

Tengo miedo que algo malo le haya pasado.

Kaoru se muestra preocupado por su hermano ya que no ha recibido noticias de él.

Pero sabe que está a lado de la persona que ama.

Dos de mis guardias entraron seguido de Zeus.

Gruñí y les indique a mis guardias que se fueran.

-¿Qué haces aquí?
-Vengo a mostrarte algo.
-¿Qué?
-Mi hijo ha muerto por tu culpa.
-Pero qué rayos...
-Tú lo pervertiste, llenaste su alma de oscuridad.
-Espera...
-Él se quitó la vida por tu culpa.
-ESO NO ES VERDAD, NOSOTROS NOS AMAMOS.

Él creo como un espejo donde me mostro a mi Hiroki atravesándose una espada y a Zeus abrazando su cuerpo ya inerte, un entierro...

-NO, NO ÉL NO...
-Es tu culpa.

Sentí como la oscuridad me invadía completamente y lo sujete de su cuello alzándolo del piso.

-ME HAS QUITADO A MI HIROKI.
-F-Fue t-tu culpa.

Empecé a apretar su cuello mientras rechinaba los dientes.

-MALDITO, LO TENÍAS Y ME MENTISTE, ME LO QUITASTE.

Entraron varios ángeles y lo apartaron de mi lado.

Desenvainaron sus espadas y sonreí siniestramente.

-Eso no me asusta.

Eleve mi mano y miles de sombras aparecieron.

Ellos se marcharon y sentí tanto poder.

Hiroki...

Él no pudo morir.

No me pudo haber dejado.

-¡¡¡HIROKI!!!

***Fin del flash-back**

Desde ese día he sentido como el poder fluye por mis venas.

Ahora mi reino parece lo que es.

No dejaré libre a ese dios.

Lo mataré, lo juro.

Mandaré a mis tropas al cielo, esta es una guerra que ellos provocaron.

---Saori---

Artemis es la única familia que tengo.

Es mi tío y lo quiero mucho.

Siempre me cuenta acerca de mi mami.

Me mostro una foto y es muy lindo.

Quisiera conocerlo pero el tío ha dicho que debo tener paciencia.

También me ha contado sobre mi papá, dice que tengo el mismo color de cabello que él.

Mi mamá es un ángel y mi papá es un demonio.

Mi tío siempre dice que su amor es tan fuerte.

Quisiera conocerlos.

-Saori, ¿Qué pasa?
-Quiero ver a mis papas.
-Pronto mi niña.
-Siempre dices lo mismo. –limpié mis lágrimas.

Él se hinco y beso mi mano.

-Sabes que ellos deben encontrarse.
-Por culpa de mi abuelo que nos separó a los tres.
-No llores mi niña. –me abrazo.

No puedo evitarlo, extraño a mi mami, apenas me quedo el calor de sus brazos.

-Seguiré buscándolos.
-Sí, -susurre- no dejes que me adopten.
-Te lo prometo.
-¿Por qué no puedo ir contigo?
-Porque tu abuelo se daría cuenta y no quiero eso.
-Entiendo.
-Pero jamás te dejaré.

---Miyagi---

No entiendo porque salió ese nombre de mi boca.

Es como si mi corazón me exigiera que lo gritara a los cuatro vientos.

Que debo decirlo.

Que debo gritarlo.

Realmente es una necesidad.

Shinobu...

¿Quién es esa persona?

¿Qué tiene que ver conmigo?

Realmente todo esto me tiene confundido.

Mi cabeza empieza a dolerme y punzarme.

No quise lastimar a Tetsuya, yo lo quiero.

No.... Yo lo amo.

Pero es el prometido de Zeus, aun así él siente algo por mí.

Me lo dice su mirada y su comportamiento.

Aunque...

Maldición ¿Por qué ese nombre se aferra a mis pensamientos?

Espero que no sea nada importante.