CAPITULO 30 Poco a poco.

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--Zeus---


Después de charlar un poco más con Akihiko, decidí que era momento de regresar.

En verdad me hubiera encantado esperar a Hiroki y comprobar con mis poderes que mi hijo esperaba a un varón.

Al mejor de los ángeles.

La luz divina dará guerreros invencibles.

Mis planes están dando frutos.

La luz y el guerrero más poderoso.

Simplemente sus hijos nacerán para ser los mejores guerreros.

Para comandar la tropa de ángeles.

Ahora espero tener un hijo con mi Shinobu.

Así tendrá el poder de un ser angelical y un demonio.

Llegue a mi palacio y vi a mis sirvientes.

-Preparen el baño y traigan a mi esposo.
-Así será señor. –comento la mujer.

Subí hasta mis aposentos y me quite mi ropa para ponerme mi bata.

Tengo tantas ganas de follar a mi lindo demonio.

Tal vez le quite su apariencia angelical al hacerlo mío.

Quiero disfrutar de sus múltiples expresiones como el chico rubio que es.

Ya es tiempo que me dé una descendencia.

Me quede recostado en la cama, esperando a que todo estuviera listo.

-¿Señor? –alguien toco la puerta.
-Adelante, -suspire y la chica entró- ¿Dónde está Tetsuya?
-Lo siento. –murmuro.
-¿Qué ocurre? –rechine los dientes.
-Su joven esposo no se encuentran por ningún lado.
-¿Cómo?
-Ya algunos guardias lo han buscado pero no lo encuentran, -comento temerosa- ni alguna señal de su aura, nada.

MALDITA SEA.

-Yo lo buscare puedes retirarte.

Ella asintió y se salió cerrando la puerta.

¿DÓNDE TE HAS METIDO SHINOBU?

Me di un baño rápido y me coloque mi ropa.

Coloque mi mano en el piso y recite unos versos.

Pude observar el aura de Shinobu, es de color gris, así que salí del palacio y comencé a seguirla.

Cada paso que daba se hacía más débil, hasta que desapareció frente la casa del idiota de Miyagi.

Empecé a revisar todas las habitaciones.

-Maldita sea.

Ese infeliz.

Sus auras ya no me aparecen.

Hijo de...


Cubrió su rastro.

Tengo que encontrarlo.

SHINOBU ES MÍO.


Me dirigí al purgatorio y revise cada rincón.

No hay nada.

MALDITO MIYAGI.

¿A DÓNDE SE LO LLEVO?

LO MATARÉ.

CODENARE A SU ALMA A DIVAGAR POR LAS TIERRAS MALDITAS.

DONDE NO VERÁ LA LUZ DEL SOL.

LO JURO...

Intente abrir un portar al abismo pero no puedo.

Es como si alguien lo estuviera protegiendo, un escudo.

MALDITA SEA...

TENDRÉ QUE BUSCAR LA MANERA DE RECUPER LO QUE ME PERTENECE...



---Yoshi---

Ya tengo 4 meses.

Mi vientre se ve ya más grande.

Soy tan feliz.

Raiden me ha protegido y me ha dado tanto amor.

Vivimos en su casa, a veces visito a mis padres.

Pero ahora se han ido a unas vacaciones.

Las necesitaban.

Les tuve que rogar prácticamente para que fuera.

Ellos necesitan un descanso.

-¿Yoshi?
-¿Sí Raiden?
-¿Estás listo para ir con el doctor?
-Hai.
-Por fin sabremos el sexo de nuestro bebé. –me abrazó.
-Pensé que siempre eran a los 5 meses o a los 6.
-Bueno, -comento- como tú fuiste un ángel tu embarazó solo va a durar 6 meses.
-¿Eh?
-No te preocupes, -coloca su mano en mi vientre y una luz verdosa desprende de ella- nuestro bebé está muy bien, créeme que si pudiera verlo no habría necesidad de ir al médico.
-Solo quiero que este bien.
-Lo estará mi amor.
-Tengo miedo Raiden.
-¿Por?
-Q-Qué Lucci nos encuentre y me lo quite.
-Tranquilo mi amor, -junto nuestras frentes- no permitiré que eso sucede.
-Pero...
-Te lo aseguro, -me miro- te protegeré con mi vida.
-Te amo. –lo abrace.
-Y yo a ti Yoshi, mi amor, mi futuro esposito.
-De seguro ya no te gusto.
-¿Eh?
-Parezco un globo.
-Mi amor, si estás tan hermoso y tierno.
-No es verdad.

Él tomo mi mentón y me beso.

-Te amo, para mí eres el ser más hermoso del mundo.
-Raiden...

Lo mire a los ojos y por un momento vi a un ¿Dios?


-¿Yoshi?

Negué con la cabeza y respire profundamente.

-No es nada, vamos.

Nos dirigimos al hospital mientras pensaba en la persona que vi hace un momento.

¿Quién sería ese hombre?

Sus ojos eran idénticos a los de Raiden.

Pero tenía el color de cabello diferente y usaba una armadura extraña-

¿Qué era todo eso?

¿Será que...?

¿Era Raiden?

No...

Aunque todo es posible.

Maldición.

Esto me tiene confundido.

Siento como mi bebé comienza a moverse y aprieto la mano de Raiden.

-¿Pasa algo amor?
-Nada, solo que se mueve mucho.

Él coloco su mano en mi vientre y se tranquilizó.

Después de unos minutos llegamos con el doctor que nos hizo pasar a una habitación para hacerme la ecografía.

Me recosté en la cama y me desabroche mi camisa, el doctor me coloco el gel y comenzó a revisarme.

-Su bebé está en perfecto estado, -comento- y tal parece que será un niño.
-¿Un niño? –pregunte.
-Sí, muchas felicidades.

Raiden junto nuestras frentes y me beso.

-Tendremos un niño mi amor, es una linda noticia.
-Sí.
-Bueno, les daré las indicaciones y las dietas que debe de seguir.

Acaricie mi vientre y sonreí.

Mi bebé, aunque Raiden no sea tu padre te amara como uno.



---Nowaki---

Mi hija se ve más triste.

Sé que desea lo mismo que yo.

Que Hiroki esté con nosotros.

Pero él no recuerda nada...

¿Qué ha hecho Zeus?

¿Por qué nos ha separado?

¿Qué tiene de malo que un ángel y un demonio se enamoren?

¿Es un pecado?

Maldita sea.

Hiroki...

Mi dulce niño.

Ahora está en los brazos de ese peliplata.

¿Cómo recuperarlo?

¿Cómo puedo tenerlo de vuelta?

Tengo que volver a enamorarlo.

Si una vez lo pude...

Que una segunda vez no pueda.

Además está Saori...

Hiroki la tuvo en sus brazos un tiempo.

Sé que pronto la sangre llamara y estaremos juntos.

Por el momento lo voy a reconquistar.

Lo amo, es mi vida entera.

No puedo dejarlo.

Tanto tiempo sin él...

Salí de la casa ya que quería ir al lugar que me dijo Saori, a la exhibición donde están las pinturas de Hiroki.

Tal vez pueda encontrar algo que necesite.

Mi hija se había quedado dormida y le pedí a Artemis que lo cuidara.

Me subí a mi auto y maneje hacia el lugar.

Hiroki se ve tan hermoso.

Ha cambiado tanto.

Esos años no pasan en balde.

Aunque...

Es simplemente perfecto.

Tan hermoso.

Se ve tan joven y tierno.

Sigue siendo mi hermoso niño.

Al llegar al lugar estacione mi auto y entre a la exhibición.

Las pinturas son tan perfectas.

"Hechas por un ángel"

Escucho comentarios como esos.

Sonrió ante la ironía de esos comentarios.

Camino por el lugar hasta que me llega un aroma tan delicioso.

Empecé a seguir ese aroma.

-Me alegra tanto que les guste.

Su voz, su figura, su aroma...

-Hiroki. –susurre.

Él lentamente volteo y sonrió.

-Nowaki, me alegra de verte.

Siento mi corazón acelerarse y me acercó a él.

-Las pinturas son muy hermosas.
-Gracias.
-En verdad eres un gran artista.

Él se sonrojo y desvió la mirada.

Varias personas empezaron a acercarse y mi amado suspiro.

-¿Pasa algo? –pregunte.
-Estoy cansado de hablar con todos ellos.
-En ese caso, -tome su mano y la bese- déjame monopolizar tu tiempo.
-¿Eh?
-Así nadie te molestará.
-Gracias Nowaki.

Mi amado les dijo que no podría quedarse más tiempo porque yo era una gran inversionista y debíamos hablar de negocios.

Empezamos a caminar por la sala.

Hiroki me explicaba cada pintura.

La historia detrás de ella.

Sus ojos se iluminaban al hablar de cada una de ellas.

-Tengo dos pinturas favoritas.

-¿Cuáles son?
-Una es el retrato de tu hija y la otra es esta.

Mire la pintura y me sorprendí.

-E-Eso...
-¿Nowaki?

Siento como mi pecho se acelera y sin poder detenerme abrazó fuertemente a Hiroki.

-¿Pasa algo?

La pintura que hizo es el jardín que hice para él en el abismo.

Es idéntico.

Todo, todo está en su pintura.

-N-Nowaki. –murmuro.

Me separe de él y nos miramos a los ojos.

Acaricie su mejilla y me incline hacia él...

"No lo hagas de golpe, lo puedes asustar"

Me repetía una y otra vez.

Presione mis labios contra su frente y me separé de él.

-Hiroki.
-¿Sí? –se sonrojo.
-Saori me dijo que si podías ir con ella al acuario, yo la llevaría pero... tengo que ir a trabajar.

Él se quedó pensando unos segundos.

-Prometo ir con ustedes en cuanto termine.
-Claro que si Nowaki.
-Espero tu prometido no se moleste.
-No, para nada, además Akihiko tiene que hacer un viaje de negocios.
-Oh.
-Entonces...
-Te parece si nos vemos en el parque ¿a las 10?
-Claro.

De nuevo lo abrace y bese su mejilla.

-Gracias Hiroki.

Él se sonrojo de nuevo y nuestras miradas se encontraron.

"Juro que te voy a reconquistar Hiroki, recuperaremos tu memoria y seremos felices como la familia que somos..."



---Shinobu---

Un bebé...

Un bebé de ese maldito violador.

Ese infeliz.

Lo odio.

Lo odio tanto.

Borro mis memorias.

Las de Shinobu...

Y me hizo casarme con él.

Lo odio.

Maldito cerdo asqueroso.

No puedo creer que lo haya hecho.

Pero, está criatura...

-No la quiero.
-¿Shinobu? –ambos me miraron.
-No lo quiero.
-¿Por qué? hermano...
-No quiero cargar con él hijo de Zeus.
-Shinobu-chin, lo cuidaremos y...
-No Miyagi, no puedo.
-Mi amor...
-Soy un demonio, UN MALDITO DEMONIO QUE FUE VIOLADO POR EL IDIOTA DE ZEUS.

Mi hermano me abrazo fuertemente.

-No lo quiero Kaoru, por favor no insistas.

Mi hermano me tomo del mentón y me obligo a verlo.

-Lo siento pero no dejaré que hagas algo de lo que posiblemente te arrepientas.  

Luz en la Oscuridad (Nowaki x Hiroki x Akihiko)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora