Par de patanes

824 51 12
                                    

Ruido.



Hay mucho ruido.



Rápidamente tomó la pistola debajo de la almohada y disparo hacia el ruido aún sin abrir los ojos.



El ruido para.



Lentamente abro los ojos, la luz que entra por la ventana me hace cerrarlos de nuevo y así estoy como por dos minutos. Cuando por fin soporto la luz veo que le dispare al despertador.



Idiota.



Me levanto lentamente hacia el baño, me duele la cabeza y al verme al espejo casi siento que veo a mi abuelita.



Más pálida de lo normal y con cara de muerta.



Al meterme a la ducha recuerdo, parece que ayer a alguien le entro el "Voy a ponerme sentimental para justificar mis malos actos y así sentirme mejor conmigo misma" y se embriagó en casa del vecino.



Momento.



¿Cómo llegue aquí?



Salí de la ducha, ya ni me apuraría, después de todo ya iba a llegar tarde y que mejor que llegar bien tarde, digo al menos que valga la pena. Al salir hacia el comedor hay una nota en la mesa, una letra que no conozco.



"Ayer te pasaste un poco de copas y no podías hacer mucho por ti más que respirar así que traje hasta acá, la puerta estaba abierta. En la mesa hay unas pastillas para la migraña, tómalas con el electrolíto que esta en el refrigerador y estarás bien.


Atte: Arturo Valen"



Debería decir: Atte el mejor vecino del mundo.



!Este tipo es asombroso, denle el premio a la persona más generosa del año¡ Un poco más animada tomo las pastillas y tranquilamente conduzco al trabajo.



El plan es este, medio día del trabajo, junta con Fury y hablo con Steve Celostino Rogers.



Después de controlar a la histérica Suzzy sermoneandome por mi tardanza entró con tranquilidad a la oficina.

No estaba en mis planes: Hundiéndonos en la obscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora