Punto de quiebre

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-Llegué -exclama James Logan, en un notable estado físico desgastado, sucio, tenso y algo cansado.


Aunque Los Vengadores sabían de su próxima llegada a la base, no sabían con exactitud la llegada del hombre con garras, por lo cual su aparición es motivo de sorpresa y en cierta forma; emoción. Emoción de que esto es el principio del fin del secuestro de Natasha. 


-Em, ¿gustas primero darte una ducha para después continuar con la junta? -sugiere Stark, disfrazando con educación el hecho de que en realidad el hedor de Logan incomoda su nariz y desea tenerlo lejos de inmediato.


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-No, nada, a los hechos -dice tajantemente al tomar asiento- ¿les compartiste la información que te di?


-No es como que me hayas dado mucha... -masculla el filantropo- Logan mencionó que estaba investigando en Volgogrado y que había encontrado algo.


-Investigué la casa donde Natalia había vivido anteriormente, esa fue la clave para darme cuenta de que la tenía cerca. Esa casa lleva abandonada varios años, por lo tanto está intacta, o al menos lo estaba. Conozco cada centímetro a la perfección, entonces cuando noté que algunas cosas no estaban o habían sido movidas de lugar; me alerté. Había pisadas frescas y daban a un bosque. En ese momento até cabos en mi cabeza, Shostakov planeaba construir algo en un bosque, hace años, prometió tener algo así como un hogar, entonces tiene sentido que él haya sido quién entró a la casa para después desaparecer en la abundancia de los pinos, refugiándose de la sociedad, en el lugar perfecto para tener cautivo a alguien.


-¿Y no es posible que las cosas hayan desaparecido por algún vándalo o curioso? -pregunta el mayor de los Maximoff.


-No, porque solo habían desaparecido unos objetos esenciales, objetos que nadie, ni tirando la casa abajo sabría donde estaban. Solo Natalia y él sabían de la existencia y localización exacta de esos objetos, claro que aparte de mi, además, no tienen algún valor monetario, es meramente sentimental. Probablemente, más para Shostakov que para ella, por eso estoy seguro de que es él y que la tiene cerca.


-Pues parece que estás en lo cierto -menciona Tony y le enseña en holograma el mensaje recibido anteriormente por el teléfono no identificable.


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No estaba en mis planes: Hundiéndonos en la obscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora