No estaba en mis planes: Hundiéndonos en la obscuridad

Cautela

Base de Los Vengadores

Expectante, Stark se encuentra mirando el televisor en el canal de noticias, en la imagen se ve a si mismo hace unos momentos, dando declaraciones acerca del paradero de su amiga ante una multitud ansiosa de saber que pasa y que tan mala es la situación actual.

Catarsis es lo que toda la nación -y en parte el mundo- vive. La desaparición forzada y misteriosa de uno de los miembros del grupo catalogado como súper héroes, designados a ver por la protección mundial, dejaba al mundo entero con la boca abierta y a la expectativa. Si un miembro de Los Vengadores, en este caso, la Viuda Negra, había sufrido de un secuestro; eso dejaba en vulnerabilidad total a cualquier civil, y el hecho de que no había ni rastro o información de ella por parte de sus compañeros, dejaba a gran parte de la civilización dividida entre seguir creyendo fielmente en sus héroes, o exigir una revocación de los poderes que estos poseen para actuar a diestra y siniestra en el mundo.

Abrumado, el multimillonario apaga el televisor y suspira, viéndose interrumpido por la vibración de su celular, al que mira hastiado hasta que el nombre "LOGAN" aparece intermitente en sus ojos. 

Con rapidez contesta el teléfono y apenas se lo coloca en la oreja, la voz del tío loco de Natasha salta:

-Vengan a Volgogrado, creo que están en un bosque cerca de aquí -pasan unos segundos donde solo hay ruido de fondo como el viento y el choque de algunas cosas hasta que Logan vuelve a hablar- creo tener cerca a quién se llevó a Natalia.

De un salto Tony se levanta de la silla y empieza a caminar medio frenético por la sala.

-Espera, espera. No, no te muevas, quédate ahí.

Tan rápido como puede activa su computadora central y busca la dirección exacta de Logan al hackear su teléfono. En efecto, Volgogrado.