No estaba en mis planes: Hundiéndonos en la obscuridad

Diabetes tipo dos

-Natasha, despiértate, vas tarde.

-Ya voy.

-!Natasha despierta¡

Me siento de golpe en la cama ante el grito, pero doblemente asustada porque vivo sola y que alguien grite en mi departamento mientras duermo es raro.

-Natalia, sal de la cama ahora -la voz creo que proviene de la cocina, me doy unas sacudidas para despertarme y analizar las cosas con calma, segundos después entro en razón de que es la voz de Steve.

-!Ya voy¡

Corro a darme una ducha rápida ignorando los gritos de Steve, anoche después de cenar creo que me quede dormida mientras veíamos la tele y supongo el se quedo a dormir igual. Para calmar a el griton de Steve corro a la cocina aun en toalla y calmar su ansiedad de que no e desayunado.

-Tu desayuno ya se... !Santa María purisima¡ -cuando volteo hacia el, veo que de un brinco echa el sarten hacia atrás, tirando el huevo y tocino que había en el hacia la pared y la alfombra.

-¿Qué?  ¿Tengo algo?

-!Más bien te falta que te pongas algo¡ -después tiro el sarten a la deriva, chocando con la ventana y rompiéndola- !Tápate mujer que vas a pescar algo¡

Acto seguido yo me vi de las piernas para arriba sin entender a que se refería, pero el me tiro la cortina encima, impidiéndome seguir con mi tarea de ver que debía taparme.

-!Estas semi desnuda Natasha, cúbrete¡

Bufe y me levante con la cortina camino al cuarto a cambiarme.

-Más te vale levantar el desorden que hiciste Steve -le grite decidida a asustarlo- por cierto, me estoy poniendo el brasear, y es de encaje rojo para que sepas.

Hasta acá pude escuchar sususpiro y de otro tipo de frustración.
-----------

Ya llevaba unas horas en la oficina con un día tipicamente ocupado, Suzzy me paso a Pepper así que pensé estaría paranoica, pero al contestar ella estaba normal.

-¿Todo bien?

-Si, solo para recodrate que hoy sera la cena en el Galaxy a las ocho, no llegues tarde.

-Estaré allí lo prometo, te dejo, debo ir a una junta.

Colgué y le avise a Suzzy que saldria temprano, despues me dediqué a prestar atención a las siguientes tres juntas y propuestas por aprobar como en cada día normal. Nunca faltaba el señor dormido, la rubia que se limaba las uñas, la tipa nueva que es toda una maldita ñoña, el gordito que todo lo sabe y el barba de chivo que no deja de coquetear, me puse a imaginar un poco usando estos estereotipos y otros clásicos, ¿Quien sería yo dentro de estos clichés si fuera una persona normal?

Hablando del estereotipo de oficina, sería una gran variable ya que podría ser la tímida, ñoña antisocial que se peina hacia atrás con cinco kilos de gel y con ceguera nivel topo o sería la tipa exuberante que se maquillaria todo el tiempo y sólo le daría órdenes a la gente para ella tener todo fácil.

Si, me voy por la segunda pero con el corazón de la ñoña. Steve podría ser el equivalente a Christian Grey, ósea el todas mías, o el renacuajo tímido que sólo habla con su jefe y es para que le baje el sueldo sin tener realmente una vida y con un traje más grande que su pierna derecha.

Aquí también hay dos variables, si Steve es el buenote de la oficina yo sería -indudablemente y con gusto- la zorra que se lo tiraría en el escritorio...