Nuestra familia rara regresa, pero ahora con más poder de volver locas a todas las personas.
Las cosas nunca cambiaron, pero ahora ellos se encuentran en la ciudad.
¿Qué estupidez harán ahora?
¿Por qué no lo descubres ti mismo?
¿Por qué tengo hambre...
-Oye es mejor que dejes de hablar con Alex,lo confundes y además él mismo piensa que está loco.-le dije al chico que estaba frente a mi,que estaba distraído.-¿Al menos puedes fingir que me prestas atención?.-le pregunté,cruzandome de brazos.
-¿Eh?,¡Si,si claro!.-habló el chico de cabellera blanca,que estaba sentado con la piernas cruzadas en mi cama.
Suspiré y traté de no hacerlo explotar.Lo cuál era difícil,ya que me parecía un buena idea.
Lo miré por un momento,en verdad se veía como todo un uke y no dudaría en buscarle a alguien para que yo pudiera grabarlos en el acto.
-¡Borrunio,ponme atención cabrón!.-le grité.
Él continuó ignorandome.
De hecho el chico tenía a Ritsu en sus manos y le cambió el color de pelaje a uno blanco como la nieve.
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-¡¿Ya miraste que bonito se ve con este pelaje?!.-preguntó Borrunio,con una sonrisa idiota.
-No seas pendejo y deja al gato en el suelo.-me acerqué para tomar al gato pero Borrunio me dio una patada en la cara.
-¡No lo toques,es mío!.-gritó él.
Respiré varias veces para no explotarlo de una puta vez.Cuando por fin me relajé puse mis manos en mi cara y pensé en algo.
-Muy bien,si te quedarás de esta forma,tenemos que hacerte una historia.-pongo mi mano en mi barbilla.
-¡Ya se!,te llamarás Enrique y tu eres un amigo que conocí en un parque de diversiones,me habías tirado con tu zapato en la cara y después nos hicimos amigos,Fin.
