¡¡Las Personas Son Raras!!

Pelota blanca.

Pov's Tío Frank.

Pasando las páginas de el libro que tenía en mis piernas inmóviles.

Hasta que escucho que la puerta principal se abre con una patada.

De esta entra mi hermano,muy feliz de la vida,en sus manos tenía un palo de golf.

Palo de golf...

Abrí los ojos con sorpresa y me alejé de ahí rápidamente,hasta que...

-¡¿Hey Frank,te gustaría ir al campo de golf?!.-preguntó Franklin.

Paré de mover las ruedas de mi silla y giré un poco mi cabeza.

-¿Crees que quisiera volver a ese lugar después de lo que me pasó?.-pregunté cortante.

-¡Por supuesto!.-dijo él,alegre de la vida.

Lo pensé por un momento,si me niego a ir él me obligará de todos modos.Suspiré y giré la silla en dirección a la ubicación de Franklin.

-Vámonos.-me crucé de brazos.

--Tirititi,cortes comerciales :v.--

Me encontraba temblando como una gelatina,ver el campo de golf me daba escalofrios.

No me gusta recordar el pasado de la tragedia.

-¡¿Está listo para regresar a las andadas?!.-preguntó mi hermano con un palo de golf en su hombro.

-N-No.-respondí,me sentía nervioso.

-¡Pues me importa poco que digas que no!.-río él.

Me lanzó un palo y yo con miedo lo tomé.

Me puse en posición y dejé el palo cerca de la pequeña pelota blanca.

Mis manos sudaban y el palo de metal se resbalaba de mis manos.Después comenzaron a temblar y estaba apunto de rendirme e irme de aquí pero unas manos se posaron encima de las mías,apretando firmemente mis manos al palo.

-Te enseñaré como se hace.-habló Franklin a mis espaldas,dejando su respiración en mi cuello.

Me sentí como él chico de hace años atrás,dónde Franklin y yo éramos algo íntimos.

Franklin elevó mi mano y la bajó con una velocidad rápida para golpear con el palo la pequeña pelota.

Miré cómo la pelota cayó en el hoyo y me sonroje de la felicidad,sonriendo como un niño pequeño.

Franklin se separó de mi y quitó sus manos de las mías,se alejó un poco y se cruzó de brazos sonriendo al verme de esa manera.

-Tirititi,cortes comerciales :v.--