Lean.
Nuevo día,nuevo empleo,el día anterior la había pasado muy bien con los nuevos inquilinos en la casa de Antonio,hablamos sobre cosas que no tuvieran nada que ver con temas de adultos ya que Lucas se encontraba con nosotros.
Después de ir a dormir,Antonio me había despertado exageradamente temprano para ir a trabajar,yo aún no estaba acostumbrado a levantarme temprano,pero después de mucho esfuerzo de Antonio terminé levantándome.
Ahora nos encontrábamos en el trabajo,yo estaba atendiendo a una muchacha que se encontraba algo deprimida,yo trataba de consolarla,diciéndole palabras reconfortantes haya que se sintiera mejor.Antonio también estaba ahí,atendiendo a un ancianito.
En mis manos tenía una charola con el café de la chica,se lo dejé en la mesa junto con un pastel de parte de la casa.La chica se encontraba mejor y me lo agradeció con una sonrisa que fue devolvida por mi.
Así pasó el día,junto con Antonio y Thomas que se encontraba de nuevo incómodo por estar con las mismas ancianitas de antes.Escuchamos la campana de la puerta anunciando a un nuevo cliente,yo miré hacía la puerta y abrí los ojos exageradamente.
-Oh.por.Dios.-susurré,tratando de mantenerme quieto en mi lugar.-Pst Antonio.-susurré,observando a Antonio.
Ella volteó al escuchar su nombre y me miró.
-¿Que quieres?.-preguntó ella,mirándome con extrañes.
-Mira la puerta.-susurré de nuevo,haciéndole señas.
-¿Que hay en la puer....-se quedó un momento sorprendida y me miró de nuevo con pánico.-No mames es Alex.-susurró ella,acercándose a mi y sacando una peluca negra de su sostén.-Ponte la peluca.
-T-Tengo que ir al baño.-dije con cierto nerviosismo en mi voz.
-¿Porque?.-preguntó ella.
-Creo que tengo una erección por ver a Alex de nuevo.-dije corriendo al baño,escuchando una risita de parte de Antonio.
¤¤¤¤
Después de hacer cosas en el baño y ponerme la peluca,fuí a lavarme las manos,quitandome la cosa blanca y pegajosa que había quedado en mis manos,después de tener las manos limpias me lave la cara,tratando de despertar,me pasé una mano por la cara y escuché como alguien entraba,giré mi cuerpo y lo miré ahí,igual de hermoso como siempre.
Alex me miró por un momento y después entró a uno de los baños,apreté los puños y suspiré,no me reconoció,obviamente no porque tenía la peluca pero al menos se hubiera fijado un poco más en mi.
Seguí mis instintos y me acerqué con paso rápido a la puerta en donde se encontraba Alex,abriendo la puerta de golpe,Alex me miró con sorpresa,apenas se estaba desabrochando el pantalón,me acerqué y lo pegué a una de las paredes que había en el baño,tomando sus manos y poniéndolas arriba de su cabeza.
-¡¿Q-Que crees que estas haciendo?!-preguntó Alex.-¡Sueltame maldito pervertido!.
Se movió de un lado a otro,tratando de zafarse,yo por mi parte lo miraba con tristeza,no podría tenerlo de nuevo,Alex se había enamorado de ese tipo,olvidándose de mi.
Lo solté y me alejé de él,Alex salió del baño y me dejó sólo.Me arrodille en el suelo y comencé a llorar,tocando el suelo con mis manos,mojando el piso con mis lágrimas.Después sentí palmadas en mi espalda,era Thomas.
-Tranquilo amigo,después vendrá alguien más con quien puedas compartir tu...¿Explosiva personalidad?.-habló Thomas con cierta duda en la pregunta.
Lo miré con una sonrisa y le di un abrazo,que fue correspondido,después Thomas me quitó la peluca dejándola en el suelo.
-Ya no la necesitas,Alex y el chico se fueron.-dijo Thomas separándose.
Asenti y me levanté del suelo,junto con Thomas,nos miramos por última vez para salir juntos del baño y acercarnos a Antonio,que nos preguntó porque tardamos tanto.
Tal vez Thomas tenia razón en sus palabras, debería olvidar a Alex y buscar a alguien con quien tenga una gran conexión,Alex me olvidó,yo también podría hacerlo,aunque sería un largo tiempo en encontrar a alguien.
--Tirititi,cortes comerciales.--
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¡¡Las Personas Son Raras!!
HumorNuestra familia rara regresa, pero ahora con más poder de volver locas a todas las personas. Las cosas nunca cambiaron, pero ahora ellos se encuentran en la ciudad. ¿Qué estupidez harán ahora? ¿Por qué no lo descubres ti mismo? ¿Por qué tengo hambre...