¡¡Las Personas Son Raras!!

Sonrisa.

Este capítulo es dedicado a Mary_Kozakura-Shiro disfrutalo y Siéntete afortunada porque es el primero que hago sobre un nuevo personaje :v.

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Pov's Isaac.

Regreso a mi hogar después de haber tenido ese gran día con el chico desconocido,¿Cual era su nombre?,¡Demonios no se lo pregunté!.

Hice una mueca de disgusto,había olvidado por completo preguntarle sobre su nombre,soy muy distraído.
Apreté el envoltorio de chocolate que me había comprado ese chico y decidí de una vez por todas entrar a mi hogar ya que había llegado unos minutos después.

Miré que el suelo estaba un poco sucio y con algunas botellas de vidrio,algo me decía que se trataba de mis padres alcohólicos.

Pude escuchar "ruidos" provenientes de la habitación de ellos y suspiré con cansancio,esta es una razón por la que estoy la mayoría del tiempo en el parque o en algún lugar público.

Subí las escaleras sin hacer ningún ruido y entré a mi habitación cerrando lentamente la puerta.Puse el pestillo y dejé mi mochila que contenía mis libros en mi silla giratoria.

Me acerqué a mi armario y me puse de puntillas para tomar una caja que se encontraba arriba de esta y bajarla.Al tenerla en mis manos la dejé en la cama y la abrí lentamente dejando mostrar los preciados tesoros.

Dejé la envoltura de chocolate en la caja y comencé a mirar el contenido de la caja,estaba un poco polvoroso pero soplé un poco y el polvo se había ido.

Saqué de la caja una fotografía donde estaba con mis amigos.Esteban y Francisco,sonreí al recordar lo buenos tiempos que pasamos juntos,pero...Esteban había perdido una pierna por mi culpa.Las personas que me rodeaban sufrían de mala suerte,yo no pedí ser así y todos me culpan sabiendo que no podía controlarlo.

Escuché que tocaban la puerta de mi habitación,guardé la fotografía en la caja y esta la escondí debajo de la cama.Al levantarme me limpié las lagrimas que habian salido sin permiso por mis mejillas y al no tener ningún rastro de ellas abrí la puerta.

-Hola Isaac.-dijo mi hermano menor,se llamaba René.-¿Puedo pasar?.-preguntó.

-Hola René y claro,puedes pasar.-le dije.

Él al caminar tocaba la pared con sus dedos,la razón era de que su vista había dejado de funcionar...todo por mi culpa.

-Lo lamento.-hablé.

-No fue tu culpa Isaac.-dijo él,sentándose en la cama,acomodando sus gafas oscuras.

-¡Por supuesto que lo fue,sino te hubiera llevado a ese lugar no te hubiera ocurrido nada y no estarías así!.-cerré la puerta y le puse pestillo de nuevo.

-No levantes la voz,a nuestros padres no les gusta que hagas eso.-susurró René.

Suspiré de nuevo,tenía razón,a ellos no les gustaba que levantaramos la voz,siempre estaban con jaqueca y el volumen alto los enloquecia.

-¿Como te fue hoy?.-preguntó René,cambiando de tema.

-Hoy...conocí a un chico amable.-me acerqué a René y me senté a su lado.

-¿En serio?,eso es increíble.-dijo mi hermano sorprendido.

Sonrei y tomé su mano para darle un beso en la palma,le encantaba que hiciera eso,como en los cuentos de hadas.

Mi hermano era como la luz en la oscuridad,quiero que tenga lo mejor y nunca le falte nada.Es aún menor de edad,un niño que no entiende lo difícil que es el mundo.

Aún recuerdo esos días en los que nuestros padres eran violentos a la hora de tomar alcohol,nunca trabajaban y les importaba poco que nosotros estuviésemos bien.

Una vez cuando los dos no habíamos ingerido algún alimento desde hace días,mi hermano tenia mucha hambre,lloraba por el dolor en su estómago,tuve que hacer una cosa horrible,vendí mi cuerpo por dinero,sólo fue una vez pero me sentí sucio y una persona repugnante.

Lo que me hizo sentir mejor fue ver esa sonrisa en el rostro de mi hermano,esa sonrisa que me alegra todos los días.

Y ahora otra sonrisa ilumina mis días.

El chico desconocido...

--Tirititi,cortes comerciales :v.--

No manches wey,tanta seriedad y tristeza me matan,pero bueno aquí está el capítulo espero que les guste y sigan conmigo en esta gran historia.