Caramelos.

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-¿Te gusta el chocolate?,talvez pueda ir por un helado para ti.-dijo Lean,refiriéndose a mi,con una sonrisa encantadora.

-No me gusta el chocolate.-le dije.

El se sintió ofendido y se tocó el pecho.

-Me duele el pulmón cuando dijiste eso,y cuando te duele el pulmón significa que me has destrozado,eres una deshonra,deshonra para tu familia,deshonra para tu vaca.-se mordió el labio e hizo una pose dramática.-Quiero el divorcio.

-Pero no estamos casad...-me interrumpió.

-Vámonos Borrunio.-se fue.

Me encogí de hombros y me senté en la mesa.

La puerta explotó y entró Lean corriendo saltando encima de mi.

-¡Lo siento,no quiero el divorcio,me amas demasiado para dejarme ir,pero no lo admites!.-me gritó.

-¿Me amas mucho como para dejar tu yaoi?.-pregunté.

Él se separó.

-Oye,tranquilo viejo.

¡¡Las Personas Son Raras!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora