¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
A Elizabeth,
Todos tenemos el derecho de escribir una carta que jamás será leída o al menos no en un corto periodo de tiempo, tú ya tuviste tu oportunidad, lo recuerdo bien, aún conservo aquel papel arrugado y lo leo en algunas ocasiones, eso con el fin de no olvidar tu verdadera personalidad. El tiempo ha pasado y hoy soy yo quien se toma el atrevimiento de utilizar la pluma y el papel para descargar todo aquello que siente, para expresar lo que su corazón grita. Plasmar en unas cuantas líneas lo que no he sido capaz de decir.
No es simple, no es comprensible aún para mi cerebro lo que ha pasado. Elizabeth, puse mi fe en ti, puse mi amor en ti, mi futuro estaba en tus manos, un futuro juntos, una eternidad a tu lado eso era todo lo que yo pedía a cambio de darte mi amor, un amor incompresible pero dedicado, nadie mejor que tú para asegurarlo.
Cada mañana despierto, trato de encontrarte pero tú no estás. Te pienso, te siento, aún mi corazón late con el tuyo, estoy seguro de eso, están conectados, es algo que no puede ser remplazado, fue algo vital, importante tanto para mí, como para ti. No voy a negar, Elizabeth, cuanto te amaba como tampoco voy a ignorar el amor que tú me profesabas, sé que fue real y aunque de aquello solo me quedan recuerdos, lo guardaré como un tesoro.
No, no aseguraré que todo seguirá en marcha, mi alma se quedo a tu lado, se quedo contigo y es que de eso se trata, siempre se ha tratado de ti, de lo que hacías por mí, de cómo me hacías sentir, de lo que me hacías pensar, de lo que imaginaba a tu lado...
Las palabras no solo se atascan en mi garganta cuando trato de hablar, sino que ahora me es difícil escribirlas, todo lo que siento es demasiado para plasmarlo en una sola carta y no pienso escribir un libro sobre esto, te prometo que será la única carta que escribiré al respecto y si con esto logro sentirme bien, habrá valido la pena.
Sentado en mi trono, sostengo entre mis manos el árbol de los nueve mundos, así es, aquel regalo que te hice ya hace tiempo y que has decidido regresarme, cuelga junto con el anillo de compromiso, que se suponía uniría nuestras vidas. Algo es seguro, siguen perteneciéndote, llevan impregnado tu perfume. Me molesta admitirlo, pero aquel dije me trae más recuerdos malos que buenos y eso es solo otra alusión que me responde al por qué de tu partida y que lo mantiene en mi cabeza como algo constante y muy real.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sí, sigues viva lo sé, pero dentro de mi corazón por otra parte me hago a la idea de que trágicamente desapareciste de cualquier lugar, porque me niego, me niego rotundamente a imaginarte como un ser maligno, como él. No quiero pensar en que el dolor te hace sentir bien, que la tristeza y la pena ahora son de tu deleite o que tan siquiera te brindan alegría. Querida Elizabeth, para mí aún eres aquella chica bondadosa, tierna, caritativa, rebosante de felicidad...el recuerdo de tu sonrisa sigue impasible en mi memoria y será así por toda una eternidad, sería iluso por mi parte creer que en algún momento algo o alguien borrará tu recuerdo de mi cabeza.
Regrese a Asgard, podrás pensar en que este siempre ha sido mi escape, pero no es así, es mi hogar y hoy más que nunca me he dado cuenta de esto, mi pueblo me ha recibido con el mismo amor filial con el que me despidieron. Aún pese a mi ausencia sigo siendo su rey y me he prometido a mi mismo que jamás los abandonaría, sin importar qué, Asgard es y será mi hogar hasta el fin de mis tiempos.
La vida sigue ¿no es verdad? Mi vida tiene que continuar contigo o sin ti, no puedo permitirme tener mi existencia ligada al amor reciproco que una humana me brindó, eso se acabo, es historia, quedo en el pasado y si por mi fuera me lo gritaría mil y un veces hasta creérmelo, sé que por ahora es complicado o poco más, lo lograré, mi vida no girará más entorno a ti y lamento si estas palabras suenan más toscas de lo que pretendo, pero es así como la realidad se manifiesta al superar la etapa emocional que ciega nuestras mentes y nos obliga a tomar decisiones erróneas.
Te estarás haciendo muchas preguntas, me tomaré el trabajo de responder a algunas de ellas. Sí, Zayn lamentablemente está muerto, fue imposible salvarle después de que aquella daga atravesara sin pesar su corazón, recibió el funeral de un héroe, al salvar al rey de Asgard, aún poniendo en peligro su integridad y aún más, al sacrificarse.
No regrese a Midgard más que una última vez ¿Qué había allí para mí? Absolutamente nada, ya nada quedaba para mí y ahora que tú te habías ido de mi lado, las razones que tenía para regresar eran casi nulas. Prometí cuidar de los nueve mundos y esa promesa sigue en pie y cada vez que tenga la imperiosa necesidad de ir a aquel planeta que fue tu hogar, iré, sin pensármelo dos veces, porque ese es mi deber como rey, no porque la nostalgia me invada.
¿Cuál fue la misión que me hizo regresar a Midgard? Simple, conocer a la pequeña Jane Elizabeth, sí, la hija de Amelia y Louis, es tan hermosa como podrías esperarlo, sus ojos son azules, su cabello rizado y color ámbar. Sé que la habrías amado con todas tus fuerzas, sé que ella te habría dado una razón para creer en la pureza de un alma, porque eso hizo ella en mí. Es mi pequeña protegida, por ella haré de Midgard un mundo libre de cualquier amenaza, claro, de aquellas que tengan que ver con guerras entre planetas, porque la maldad que allí habita es casi imposible de vencer, justo así como el mal que hay en tu corazón...
Todos los caminos conducen a ti ¿lo has notado? Todo lo que he planteado en este papel me regresa a ti, en cualquier aspecto... pero se acabo, ya nada va a atarme a ti, todo se termino, no es que no vaya a agradecerte por todo lo que me diste, por la felicidad, el amor, los buenos recuerdos, pero aquello solo terminará por llevarme a mi propia ruina y es ahora cuando voy a admitirlo, tu recuerdo me hace daño, tanto o más que una daga filosa atravesando mi pecho.
Adiós Elizabeth, adiós para siempre.
Sólo podría pedir una cosa a los antepasados que te cuiden y te ayuden a alejar la maldad de tu alma...
Cordialmente,
Niall. Rey de Asgard, protector de los nueve mundos.