Los dos llegaron al viejo depósito en donde, luego de pasar la seguridad correspondiente, vieron en una habitación a un hombre de unos 40 años atado a una silla con su cara visiblemente ensangrentada.
-Hola Jacob- dijo Z- tanto tiempo sin verte.- el hombre no contesto.
-No ha querido pagar la última entrega y se ha querido ir del país. Lo pudimos localizar rápidamente. -Dijo un chico rubio.
-No tengo nada que pagar, esa mierda no era de calidad.- dijo el hombre con dificultad.
-Mi droga siempre es de calidad Jacob, yo mismo me encargo de probarla antes de enviarla.-Alysse miró a Z, esa confesión le sorprendió. Z no le correspondió la mirada, estaba concentrado en el hombre. Le pasaron una planilla y la leyó- han sido 100 kilos de cocaína y 50 de marihuana. Sabes que no me molesto en los distribuidores pequeños, pero es que 150 kilogramos de droga pasan mis límites.-siguió mirando la planilla.- tienes derecho a réplica, ¿algo que debas acotar?
-No pagaré.
-Esta bien, has dicho lo que querías. Fue un gusto.-Miró al chico rubio nuevamente- Matenlo.- el hombre levantó la cabeza y miró fijamente a Alysse. -Aléjate de él, te está utilizando.-La chica se sorprendió. Supuestamente no le conocía nadie allí.
-Cállate la boca.- dijo Z. Tomo a Alysse del brazo y camino con ella hasta la salida. Mientras salían sintió dos disparos. Sabía a donde iban dirigidos.
Ya en el auto, iban de camino a la casa de Alysse.
-¿Que ha sido eso?
-Sabes muy bien que en un acto desesperado por hacerme algún daño, dicen mentiras.- Aceptó lo que dijo no muy convencida. Investigaría.
-¿Que es eso de que pruebas la mercadería antes de enviarla? Contratamos gente para eso.
-A veces no confío en mis empleados y no hay nadie mejor que yo mismo para hacer el trabajo.
-No quiero un novio drogadicto. Aunque suene hipócrita. Sé que vendo droga, pero trato de no meterla en mi cuerpo. Deberías de hacer lo mismo. -dijo mirándolo fijo.
-Alysse, mierda, no te metas en mi trabajo. -Estaba visiblemente enojado. Apretaba el volante y sus nudillos estaban blancos.
-No me hables así, me preocupo por ti. No me interesa que sea tu trabajo, es tu cuerpo en el que metes esa mierda.
-¡Joder! ¿¡Puedes parar ya!? No te he pedido una puta opinión. -Estaba muy irritado y Alysse no iba a dejar que pasase por sobre ella.
-Para el puto coche y déjame aquí. Puedes irte a la mierda.
-Alysse... -la miró. Esta ves con preocupación.
-Que pares el coche y me dejes aquí ¡joder!- le grito. Z detuvo el coche.- puedes ir a drogarte tranquilo. Lo único que te diré es que no me ves más la puta cara Zack.
-Alysse, joder. -puso el seguro en la puerta, no la dejaría salir.- tranquilicémonos.-suspiro- siento haberte hablado así. No estoy acostumbrado a que se metan en mi trabajo cariño. Yo no me meto en el tuyo.
-No me metí en tu puto trabajo- estaba alterada- te he dicho que dejes de meterte esas mierdas en el cuerpo. Para eso se contrata gente. No necesitas terminar con tu puta vida por los clientes. Te destruirás y yo no estaré allí para ver como eso sucede.-trató de abrir la puerta.- sácale el seguro o rompo el vidrio Zack.
-Tranquilízate cariño.-trató de tomarle la mano, ésta no se dejó.- lo siento ¿si?
-Si yo me drogara ¿te preocuparías por mi?- ésta ves lo miró a los ojos.
-Pues claro que si cariño.
-¿Entonces logras entenderlo?- Z pensó por un momento, tenía razón.
-Si, logro entenderlo, lo siento nena.
-Esta bien, ahora déjame aquí.
-¿Que? Claro que no.
-Que me dejes aquí.-cerró los ojos estresada.
-Ya hemos solucionado el problema. No es necesario que te deje sola en medio de la carretera.
-Necesito tomar aire.
-Baja el vidrio.
-Sola Z, necesito tomar aire sola. Caminar me hará bien.
-El sol está fuerte, tu corazón está débil aún. No cometeré el error de dejarte morir por ahí.
-No moriré.
-He dicho que no y punto. Camina en el jardín de tu casa si quieres.- encendió el auto y comenzó a andar. Alysse se cruzó de brazos. Estaba enojada.
Luego de 20 minutos llegaron a la casa de los Falcon. Alysse se bajo del auto y golpeó fuertemente la puerta. Camino apresurada hacia adentro. Se encontró con Fran en el living.
-Alysse, tu padre me ha dicho que te espera en su despacho.
-Está bien, gracias Fran.
Z entró a la casa.
-Alysse ven aquí. Tenemos que hablar.
-Ahora no puedo Z. Luego lo haremos.
-Joder nena, no te pongas así.
-Luego hablamos.- camino hacia el despacho de su padre y entró.
Lo vio, agarraba su cara con sus manos, estaba despeinado y apoyado sobre el escritorio. Había unos libros de la estantería central tirados por el piso de madera. Su adorno de oro con forma de arma estaba deshecho en el piso. Había varios papeles regados por todo el escritorio.
-¿Que ha pasado?
-Tengo que hablarte. Es un tema muy delicado.
-Pues dime- se sentó en un sillón justo delante de él.
-Sé que tu corazón está débil y no quisiera darte esta noticia de esta manera. Pero necesito que estés alerta.- Alysse prestaba atención, el hombre suspiro- he encontrado a Olivia.
-¿Como?- Alysse sentía que el aire no entraba a sus pulmones. Su cara quedó roja.
-Respira cariño.- resfrego su cara con las manos nuevamente- Ella vive, me he enterado hace apenas dos horas. La situación es crítica. Ella no quiere ni vernos, no entiendo la razón aún pero espero poder entenderla pronto. Va a por todas con nosotros, quiere atacarnos, lastimarnos y quitarnos el negocio.
-¿Por qué? No puedo creerlo. - se tapó la cara con sus manos. Comenzó a llorar.- Era una simple niña tierna, ¿que ha pasado con ella?
-No lo sé hija, pero voy a averiguarlo cueste lo que cueste.-
Z estaba comiendo un sándwich que le había preparado Susy mientras Alysse hablaba con su padre en el despacho. Su celular sonó. Era un número registrado. Sarah.
Contestó.
-¿Que pasa?
-Hola cariño, me tienes totalmente olvidada.
-Sarah, te he dicho que ya no estoy interesado en tener sexo contigo.
-Oh vamos, se que te gusta.
-Que no.
-No creo que esa guarra que tienes como novia cumpla con tus expectativas.
-Claro que si Sarah. No te metas con ella.
-Pues no decías lo mismo hace 3 semanas.
-Olvida lo que ha pasado.
-No puedo hacerlo gatito, eres muy bueno en la cama.
-Sarah, olvídate lo que ha pasado, ya no quiero verte más. Eres sólo una puta del pasado. -resfrego su rostro con su mano izquierda.
-Te arrepentirás de lo que has dicho gatito.- ésta colgó.
ESTÁS LEYENDO
Encuentro fatal. TERMINADA
Roman d'amourEllos estaban destinados a estar juntos, a pesar de las circunstancias. Alysse Falcon con tan solo veintiún años era la heredera de la mafia más poderosa de Los Ángeles y Zack Bennet, o mejor dicho "Z", con veintisiete, heredero de la segunda mafia...